La austeridad es necesaria

Después de la Navidad, los villancicos, los abrazos, los gastos y regalos, es decir, tras ese alto necesario para descansar, estar en familia y disfrutar, cada quien, según sus capacidades, viene la llamada "cuesta de enero". Ese terreno empinado de ver lo que en realidad nos costó diciembre y mirar la dura realidad de lo que viene, en especial con alzas en todo porque eso siempre es inevitable. Sube el mínimo y sube lo demás.

Creo que la austeridad es necesaria. Que el Gobierno se apriete el cinturón y que sea imaginativo en cómo aliviar el bolsillo de los colombianos. Por ejemplo, que los útiles escolares de verdad sean "útiles", los necesarios, más hoy cuando la tecnología ayuda tanto. Y que no se abuse de los precios.

La tasa de desempleo para el mes de noviembre fue del 8,2 %, la más baja en ocho años. Sin embargo, la cifra no da para cantar victoria, teniendo en cuenta que parte del crecimiento lo generó el Gobierno al crear 188.000 nuevos puestos que, de acuerdo a los resultados, no parecen tener ninguna justificación. Sumado a lo anterior, sectores que contribuyen de manera importante al empleo en Colombia como lo son la construcción y la agricultura perdieron 146.000 y 41.000 puestos, respectivamente.

Se debe hacer un reconocimiento especial para el sector manufacturero, de alguna manera subestimado por el Gobierno, que contra viento y marea generó 147.000 nuevos empleos.

Expertos prevén que el 2025 será más caluroso que el 2024 en todo el mundo. En Bogotá habrá sequía hasta marzo; por tanto, no veremos un aumento en los embalses sino hasta mitad del año. La Alcaldía está en mora de mostrar planes robustos de mediano plazo para evitar más racionamientos de agua. Además, las líneas de Chivor y Sogamoso tienen un atraso de 10 años.

¿Qué pasó con los proyectos de agua subterránea, la construcción de un nuevo embalse, el aprovechamiento de las lluvias? ¿O con los es solares, la energía eólica o la producción de energía a partir de biomasa? En el 2010 para la posesión de Juan M. Santos se contrató a un chamán para que no lloviera. Hoy preferimos las ideas científicas para paliar el cambio climático.

El solo sueño, la idea de emprender un viaje y conocer nuevos destinos marcan el comienzo de toda una aventura. No dejamos de soñar con un lugar deseado o en una nueva travesía, para lograrlo es necesario tomar decisiones bien planificadas y con anticipación. Comprar los pasajes dos meses antes del viaje para conseguir ofertas especiales, pues a última hora todo es más costoso. Lo mismo sucede con los hoteles para lograr mejores precios y servicios. No es conveniente improvisar para no llevarnos sorpresas y contratiempos. Los agentes de viaje de nuestra confianza están pendientes de una acertada asesoría y siempre tienen lo mejor. Por eso es importante entender su labor y agradecer su mejor y oportuna gestión. El sueño de viajar es justo ahora si lo planificamos.

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