Precisiones sobre las pipetas

Con enorme sorpresa nos encontramos este 2 de agosto en la página de opinión, con el comentario ‘Adiós a las pipetas’, en el que se insta a “sepultar definitivamente en el pasado las pipetas de gas”, con la connotación de ser estas unas armas peligrosas para la población, sin la plena claridad de que lo que el editorialista busca es referirse a dejar en el pasado un país violento en el que se utiliza cualquier tipo de arma para atentar contra la vida de sus pobladores, como fueron los carro bomba.

A manera de ilustración queremos entregarles unos datos relevantes de lo que significaría acabar con las pipetas, en otras palabras, el mercado del GLP en el país, energético que suple a más de 12 millones de personas a lo largo y ancho de Colombia. Son un total de 3,4 millones de familias, distribuidas en 32 departamentos y municipios, muchas de ellas ubicadas en lugares recónditos del territorio nacional a donde no llega ningún otro combustible y los obliga en dado caso a consumir leña, con los consabidos daños que esto implica para la salud y los bosques.

Pero las empresas de GLP también atienden un importante sector industrial, agrícola, automotor y náutico y se ha consolidado como un energético accesible, asequible, que también utilizan panaderos, floricultores y ventas callejeras, entre otros.

Hoy por hoy, el GLP es el combustible de transición a nivel internacional por ser un energético limpio que va a permitir dar pasos hacia los renovables sin dejar de suplir las necesidades que los s tengan mientras se logra pasar a nuevas tecnologías sustitutas de los no renovables.

Con el fin de ofrecerles un mayor conocimiento sobre la importancia y relevancia que esta industria tiene a nivel mundial, los invitamos a asistir los próximos días 23 y 24 de agosto al 5.º Congreso Internacional del GLP, donde cerca de 43 conferencistas y istas internacionales y nacionales, de la mano de la Asociación Mundial del GLP (WLPGA) y otras asociaciones latinoamericanas, analizaremos los retos que este sector tiene a nivel mundial y nacional con temas que son relevantes para esta industria y para la población en general.

Presidente de Gasnova

El próximo 4 de agosto se conmemoran 204 años de un suceso histórico que marcó la historia de Colombia y que la gran mayoría de los colombianos no conoce aún. La batalla del Pienta fue un enfrentamiento bélico que se llevó a cabo en el municipio de Charalá, en el departamento de Santander, donde pobladores y campesinos de este pueblo y en alianza con los pobladores de Ocamonte, Coromoro, Cincelada, Riachuelo y Encino se enfrentaron a una tropa realista de 800 soldados comandada por el coronel Lucas González, que se dirigían hacía el Puente de Boyacá a reforzar el ejército de Barreiro para la batalla del 7 de agosto de 1819.

A pesar de esta devastadora pérdida, la ganancia fue el retraso que se le ocasionó a Lucas González, quien no llegó a tiempo a apoyar a Barreiro.

Este suceso que inexplicablemente no quedó registrado en los libros de historia de Colombia es de gran orgullo para los santandereanos.