Bienvenidos a bordo

Estimados pasajeros, bienvenidos al vuelo MAGA-002, con destino incierto. Gracias por reelegirnos. En nombre del piloto Donald Trump, el copiloto J. D. Vance, el primer oficial Marco Rubio, el ingeniero de vuelo Elon Musk, y de toda la tripulación, les damos la más cordial bienvenida al Air Force One, que ya se encuentra en plataforma, listo para despegar este 20 de enero, según el itinerario. La duración de este vuelo será de cuatro años. Por motivos de seguridad, y para evitar interferencias democráticas o inclusivas, les recordamos que no se podrán usar teléfonos móviles ni dispositivos electrónicos mientras las señales luminosas estén encendidas. Les recomendamos guardar todos sus prejuicios en los compartimentos superiores o debajo del asiento delantero.

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Les informamos que gracias a las innovaciones implementadas por Space X, este avión no cuenta con salidas de emergencia.

Como en todo vuelo, es probable que encontremos diversos fenómenos climatológicos y atmosféricos que pueden sacudir la aeronave, pero que no representan ningún riesgo para nuestra seguridad. Les recordamos que este nuevo vuelo se produce en un contexto internacional caracterizado por la llegada de corrientes de aire fresco –que algunos erróneamente tratan de presentar como ventarrones provenientes de la extrema derecha y el populismo–, que han sido muy útiles para oxigenar la política global y darles un nuevo impulso a algunas democracias anquilosadas.

A pesar de que el anterior vuelo del capitán Trump terminó de manera un poco agitada, debido a las intrépidas maniobras realizadas en cercanías del Capitolio poco antes del aterrizaje, lo cierto es que la integridad de los pasajeros nunca se vio comprometida, y se espera que en este viaje se presenten algunas movidas de la nave, que el comandante en jefe sabrá manejar sin mayores dificultades, gracias a su experiencia.

A lo largo del trayecto vamos a sentir turbulencias y vientos cruzados, que son perfectamente normales. Por ejemplo, del norte y noreste del continente se espera un frente frío, proveniente de Groenlandia y Canadá, pero que podremos sortear sin dificultad, y al aproximarnos al antiguo golfo de México, se anuncia el paso de la depresión tropical Sheinbaum, que no tiene mucha fuerza.

Más hacia el sur, nos encontraremos con una ola de calor originada en Panamá, cuyos efectos están aún por determinar. Y más adelante tendremos que sobrevolar territorios hostiles, como Venezuela, pero la altura de su mandatario no representa ningún peligro para nuestra travesía.

En todo caso, les recordamos a los pasajeros que durante todo el recorrido podrán disfrutar de nuestras amenidades a bordo, y que una vez se apaguen las luces se podrán conectar a sus plataformas sociales favoritas, como lo son Equis, Facebook, Instagram, WhatsApp y Threads, cuyos contenidos podrán disfrutar sin restricciones ni tortuosos procesos de verificación. Así mismo podrán acceder a una selecta oferta informativa, gentil cortesía de The Washington Post, en cuyas páginas no van a tener que leer artículos a favor de apátridas como Kamala Harris, ni van a encontrar esas absurdas caricaturas de la insoportable Ann Telnaes con las que se cuestionaba la grandeza de nuestro país.

Aprovechamos para darles la bienvenida a los expresidentes Mario Abdo Benítez, de Paraguay; Jorge Jamil Mahuad, de Ecuador; Mireya Moscoso y Ernesto Pérez-Balladares, de Panamá; Felipe Calderón y Vicente Fox Quesada, de México, y Andrés Pastrana Arango, de Colombia, y a los demás trumpistas tropicales ubicados en la parte posterior del avión. Reciban todos un saludo muy especial de parte del capitán Trump, que no ha tenido tiempo de saludarlos en persona.

Por favor, pónganse cómodos y esperamos que disfruten del vuelo...