En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información aquí

CLUB VIVAMOS
Suscríbete
Disfruta de los beneficios de El Tiempo
SUSCRÍBETE CLUB VIVAMOS

¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo [email protected] no ha sido verificado. Verificar Correo

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión

Hola, bienvenido

¿Cual es la ciudad colombiana clasificada como la más peligrosa del mundo?
¿Cómo va el juicio al expresidente Álvaro Uribe?
¿Accidente de bus en Calarcá?
Frío inusual en Bogotá explicado por el Ideam

El contexto en que se desarrolló la economía moderna

Benjamin Friedman demuestra que la economía actual es parte de revoluciones científicas y religiosas

Alt thumbnail

Actualizado:

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon
Es importante no perder de vista que la economía, como otras ciencias sociales, surge dentro de un contexto religioso, cultural y político que condicionan el tipo de preguntas y preocupaciones que se enfrentan en cada época y que la sociedad espera que las diferentes disciplinas ayuden a resolver. Así, la economía moderna surge a partir de los escritos de David Hume y Adam Smith en la época de la Ilustración Europea y, geográficamente, en Escocia.
Dos aspectos cruciales que anteceden a la Ilustración fueron las revoluciones científicas de finales del siglo XVII. Primero los descubrimientos científicos de Isaac Newton contenidos en su obra magistral de los Principios matemáticos de filosofía natural, publicada en 1687. En sus Principios se le da una expresión matemática al orden universal y reivindica un enfoque experimental para contestar muchas de las preguntas de la óptica y la física. Igualmente introduce “la idea de un universo ordenado y armónico que se rige por principios universales” en el cual “la filosofía natural se debe ocupar de la armonía del cosmos”. Newton establece la existencia de un orden matemático de la naturaleza y plantea que no existe antagonismo entre ciencia y religión (ver Mauricio Nieto Olarte, Una historia de la verdad en Occidente: ciencia, arte religion y politica en la conformacion de la cosmología moderna, UniAndes-FCE, 2019).
Un segundo cambio fundamental en el contexto religioso de la época fue el rechazo a la versión pesimista del calvinismo sobre la naturaleza corrupta de los seres humanos y la predeterminación del destino de los hombres, que señala su impotencia por cambiar y mejorar las cosas ya que es inútil, pues todo esta predeterminado por el Creador (ver Benjamin Friedman, Religion and the Rise of Capitalism, Harvard, 2021, y su Conferencia sobre ética y economía en honor de J. Olcay, 4 de febrero de 2021,PIIE).
El impacto sobre la economía fue doble al permitir a Smith adoptar una filosofía de la perfectibilidad de la situación de los seres humanos y de otra parte la existencia de un mecanismo (mercados competitivos) a través de los cuales las acciones individuales, no altruistas, se traducen en mejoras en la situación económica colectiva (el concepto de la “mano invisible”). De allí se derivará el primer teorema fundamental de la economía del bienestar, que garantiza que cualquier equilibrio competitivo resulta en un Pareto óptimo, es decir (aunque puedan existir equilibrios múltiples), la asignación resultante de recursos en la economía no se puede mejorar sin desmejorar la situación de uno de los participantes.
A la pregunta de dónde viene la economía occidental moderna, y al contrario de lo que comúnmente se cree, B. Friedman demuestra que la economía moderna occidental no es enteramente un producto secular, sino es parte de las revoluciones científicas y religiosas (protestantismo) del periodo de la Ilustración en Inglaterra. Fue crítico abandonar el calvinismo, con su pobrísima opinión de la naturaleza humana, y la idea de que existe un determinismo inescapable en el dogma de la predestinación. Cuando se acepta una opinión más optimista y expansiva de la naturaleza humana y se afirma en las religiones protestantes que somos “colaboradores activos” con Dios en la tarea de buscar nuestra perfectibilidad en esta vida y que buscar la felicidad es parte del plan divino, se abre el camino a una ciencia económica que debe contribuir al mejoramiento de la situación material de la población. Como lo dice Friedman, los humanos somos agentes morales libres que cooperamos con Dios para nuestra propia salvación”. Así, “promover la felicidad humana es parte del propósito del creador”.
El libro de Benjamin Friedman es realmente novedoso e importante para la historia económica, modificando nuestra forma de ver el proceso histórico por el cual el mundo occidental llegó a la teoría económica actual. Si bien la economía como ciencia es producto de la Ilustración, momento en el cual el proceso de modernización secular se aparta de un universo exclusivamente centrado en Dios hacia una concepción humanista. Sin embargo, es importante entender que la revolución desencadenada por Adam Smith surgió de avances o cambios y de nuevas ideas teológicas y –en particular el rechazo a la predestinación calvinista– con una nueva visión de las oportunidades y de la agencia activa que jugamos los humanos en mejorar nuestro bienestar individual y colectivo. Friedman pone las conclusiones de Max Weber en su Ética del protestantismo y el espíritu del capitalismo (1904), patas arriba”, rechazando la idea de que el calvinismo protestante dio origen al capitalismo moderno.
Sin embargo, después de casi 250 años desde la revolución de la Riqueza de las Naciones (1776) la economía continúa reflejando la influencia religiosa inicial. La conexión entre el pensamiento religioso y el económico ayuda a entender cómo surgió la teoría económica occidental moderna e iluminar algunos aspectos de los debates sobre política económica, como la eficiencia y el rol adecuado de los mercados y el papel del Estado en la sociedad.
Friedman documenta cómo la nueva visión de la capacidad de los individuos por hacerse responsables por mejorar su condición y buscar el progreso económico a la vez lleva a una profunda creencia religiosa de que también se logra el progreso moral. Friedman concluye que “esta influencia del pensamiento religioso permea la forma como los ciudadanos ordinarios piensan hoy acerca de los problemas económicos. “La economía como hoy la conocemos es todavía una ciencia joven. La influencia del pensamiento religioso estuvo muy presente en su creación”.
Fernando Montes Negret
Economista Financiero

Sigue toda la información de Opinión en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon

Conforme a los criterios de

Logo Trust Project
Saber más
Sugerencias
Alt thumbnail

BOLETINES EL TIEMPO

Regístrate en nuestros boletines y recibe noticias en tu correo según tus intereses. Mantente informado con lo que realmente te importa.

Alt thumbnail

EL TIEMPO GOOGLE NEWS

Síguenos en GOOGLE NEWS. Mantente siempre actualizado con las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en Google News.

Alt thumbnail

EL TIEMPO WHATSAPP

Únete al canal de El Tiempo en WhatsApp para estar al día con las noticias más relevantes al momento.

Alt thumbnail

EL TIEMPO APP

Mantente informado con la app de EL TIEMPO. Recibe las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en tu dispositivo.

Alt thumbnail

SUSCRÍBETE AL DIGITAL

Información confiable para ti. Suscríbete a EL TIEMPO y consulta de forma ilimitada nuestros contenidos periodísticos.