Ojalá pudiéramos poner un punto final a todas las eternas violencias contra las mujeres. No obstante, no es tan simple, pero soñarlo y proyectarlo nos anima a seguir el camino abierto por todas estas mujeres imparables ante la posibilidad de construir un mejor mundo para todas, todos y todes.
Es lo que se propone Violeta, una joven periodista de la revista Cosmos XXI de la serie titulada Punto final, que se ha emitido en el país en Telecafé, Teleantioquia y el canal 13 de nuestra televisión y que pronto podremos ver en Señal Colombia. Cada capítulo de la serie toca un tema relacionado con una de las múltiples violencias contra las mujeres, tales como la violencia psicológica, la violencia laboral, la violencia física, el feminicidio, la transfobia, la economía del cuidado, el embarazo en adolescentes y la interrupción voluntaria del embarazo como una posibilidad, entre otros.
Violeta asume como suyas las situaciones de las mujeres y se propone denunciar e invitar a través de sus artículos de la revista a la reflexión sobre las violencias tan normalizadas y naturalizadas en nuestro país. La serie dirigida por Raquel Sofía Amaya y Claudia Arango es el resultado del premio otorgado por el Mintic ‘Abre cámara 2021’, premio que buscaba reconocer a mujeres directoras de televisión. A la producción se sumaron Usaid y Enterritorio.
Conociendo a Raquel Sofía desde hace muchos años, fui testigo y parte de algunas escenas de la serie y puedo dar fe del profesionalismo y la calidad de la producción. Si bien el proyecto ha sido uno de los más exigentes de la carrera de Raquel Sofía como comunicadora, nunca dudé de que lo asumiría sin miedo, de frente y de manera contundente, a pesar de los requerimientos de producción: locaciones, actores, fotografía, dirección de arte y libretos, entre otros. Tuve la posibilidad de asistir al rodaje de algunas escenas que me dejaron sin palabras ante lo complicado de tejer un producto audiovisual de esta envergadura.
Las entidades del Estado deben generar espacios para proyectos que, como Punto final, busquen romper estereotipos de toda clase y específicamente de género.
La protagonista es Alejandra Tobar, actriz joven que personifica a Violeta. La acompañan actores de la talla de Marcela Carvajal, Fernando Solórzano, Isabella Santiago, Danna Sultana y Gabriel González, entre otros. La música del cabezote es compuesta e interpretada por la cantante Maía.
En este sentido y tal como no dudó en hacerlo el Mintic, las entidades del Estado deben generar espacios para proyectos que, como Punto final, busquen romper estereotipos de toda clase y específicamente de género, con un lenguaje sencillo, digerible, cotidiano y cercano a la gente. Así quizás se le dé vida al discurso académico y se lo saqué de los anaqueles en los que, a veces, se queda olvidado. Punto final es un ejemplo de cómo se deben retroalimentar la academia y la vida real para facilitar la transmisión de contenidos capaces de transformar la cultura. Con el lenguaje propio de los medios, esta serie logra impactar desde el formato televisivo y deja un mensaje esperanzador.
Si los canales de televisión privados entendieran que también tienen una responsabilidad en la construcción de una sociedad y de un mundo mejor, podríamos soñar con ver Punto final en RCN o Caracol. ¿Por qué no?
FLORENCE THOMAS
* Coordinadora del grupo Mujer y Sociedad