Gabriel García Márquez dijo alguna vez: “Escritor es aquel que cuando escribe una línea hace que el lector quiera leer lo que sigue”. Y, según Suria Ceja Vásquez, especialista en literatura latinoamericana, Virginia Woolf reveló que una de las claves para distinguir entre una buena o una mala novela se encuentra en la última página. Argumenta que “en ese momento el lector inicia el juicio para determinar si la novela es digna de ser considerada como buena o de lo contrario merece pasar al olvido”. La profesora de una universidad en Washington sostiene que “un buen escritor es aquel que es capaz de provocar en sus lectores emociones y sensaciones que van más allá de la última página”. Para ella, la permanencia que tengan en la memoria del lector los personajes es lo que hace inolvidable un libro.
La frase inicial de Los días del trueno, Premio Escriduende a la mejor novela latinoamericana publicada en España en la Feria del Libro de Madrid 2022, escrita por el colombiano Carlos Pardo Viña, tiene ese imán que lleva al lector hasta su última página, toda vez que le abre horizontes que lo asombran. Como recordarle que, en diciembre de 1988, Estados Unidos detonó, en el sitio de pruebas nucleares de Nevada, en la Operación Cornerstone, dos bombas atómicas. Cuando el autor escribe en el primer párrafo: “Hace frio en Madrid. El termómetro alcanza con dificultad los cuatro grados centígrados y en la tele dicen que lloverá más tarde.”, está narrando que el día en la capital española es frío y, por esta razón, el personaje prefiere quedarse en su apartamento, leyendo Los versos satánicos, de Salman Rushdie.
Oscar Maldonado, el personaje que escribe el diario donde va consignando todos los actos violentos que sacuden al mundo en el año aciago de 1989, es un colombiano que huyendo de la violencia del país viajó a España. Allí se vinculó a la empresa de noticias Efe. Era el encargado de revisar los cables con la información que se enviaba a los periódicos abonados. Le tocaba investigar sobre los sucesos que habían estremecido al mundo en épocas anteriores, para escribir las notas de “un día como hoy”, donde se les recordaba a los lectores qué había pasado en esa fecha años atrás. De este trabajo le quedó el gusto por la historia. Es, además, un creador de belleza que sueña con publicar su primer libro de poesía. Tiene una novia, Natalia, que un día lo abandona sin explicarle la razón.
En esta novela Carlos Pardo Viña narra esa violencia deteniéndose en el dolor de las víctimas, investigando cómo sucedieron los hechos.
Los días del trueno, novela de Carlos Pardo Viña escrita a manera de diario, es la radiografía de un año difícil. En sus páginas se cuentan los sucesos trágicos que, por la violencia desatada por el narcotráfico, los grupos guerrilleros y el paramilitarismo, estremecieron a Colombia en el año 1989. Oscar Maldonado se entera de esos sucesos en Madrid a través de las noticias que llegan a la agencia para la cual trabaja. Ante tanta sangre derramada, piensa en la tragedia que vive su patria. Pero, sobre todo, piensa en el miedo de su mamá. Es a ella a quien llama cada que se entera de que algo grave ocurrió en Colombia. Se expresa allí la preocupación del hijo por la suerte de quien le dio la vida. Teme que una de esas bombas que Pablo Escobar hacia estallar a cada rato pudiera afectarla.
En esta novela Carlos Pardo Viña narra esa violencia deteniéndose en el dolor de las víctimas, investigando cómo sucedieron los hechos y, desde luego, interesándose en dejar un testimonio escrito sobre un año que marcó a Colombia. En una prosa ágil reconstruye la Masacre de la Rochela (20 de enero), el asesinado el líder sindical Teófilo Forero (27 de febrero), el homicidio del líder de izquierda José Antequera (3 de marzo), la muerte de Luis Carlos Galán (18 de agosto), la caída de Gonzalo Rodríguez Gacha (15 de diciembre), el atentado contra el general Maza Márquez (31 de mayo) y las bombas contra El Espectador (2 de septiembre), edificio del Das (6 de diciembre), avión de Avianca (27 de noviembre). Todo contado por un colombiano que en la distancia se duele por el destino de su patria.
La BBC de Londres calificó a 1989 como el año en que Colombia despertó en medio de una pesadilla. Ese año, en su guerra contra el Estado, el narcotráfico demostró que no tenía límite en sus actos violentos. "Sentíamos que el ‘cartel de Medellín’ tenía contra las cuerdas al Gobierno y que el Estado estaba en la disyuntiva entre ceder o que siguieran los atentados", dijo a la cadena británica Hernando Zuleta, director en ese entonces del Centro de Estudios sobre Seguridad y Drogas de la Universidad de Los Andes. Estos sucesos los investigó Carlos Pardo Viña para estructurar una novela que se lee sin tomar aliento. Una obra escrita en dos tiempos cronológicos: 1989 y 2019. En este último año el narrador recuerda, como profesor universitario en Ibagué, esos sucesos que treinta años atrás sacudieron a Colombia.
Los días del trueno es una novela que se deja leer. Ese lenguaje entre periodístico y literario de que el escritor hace gala para elaborar una prosa precisa, manejada con mano de artesano, donde se expresa un colombiano que en la distancia siente dolor en el alma por la situación de violencia que vive su patria, hace agradable su lectura. Oscar Maldonado es un personaje que se queda en la mente del lector por ese cúmulo de tristezas que guarda en el corazón. La ausencia de Natalia, la mujer de quien se enamora en España, lo sume en un estado de desesperación cuando la busca y no la encuentra. Y ese despertar al amor cuando, en la universidad donde trabaja, conoce a Daniela, una muchacha de ascendencia humilde, lo lleva a una situación difícil que, al final, lo conduce a la muerte.
En el prólogo a esta novela actual, dramática, reveladora de verdades sobre la relación entre el ejército y los paramilitares, escrita con la nostalgia que la patria despierta cuando se está lejos, y la preocupación por la suerte que corre, Suria Ceja Vásquez dice que es una obra que transmite “risa, llanto, amor, coraje, emoción deseo y frustración”. Carlos Pardo Viña escribió una novela que debe leerse para entender lo que pasó en Colombia en ese nefasto año 1989 cuando reventaron una serie de violencias que venían incubándose desde años atrás. En El día del trueno el escritor tolimense crea un personaje que mientras cuenta los pasos que hay entre la calle Alcalá y la Plaza España se califica como “hacedor de versos, corrector de cables y buscador de días memorables”, cuyo sueño es ser un gran poeta.
JOSÉ MIGUEL ALZATE