Nuestro mundo digital nos ha cambiado la vida a todos. Basta ver cómo en cualquier sitio la mayoría de las personas están mirando sus celulares sin interesarles hablar con nadie o mirar los paisajes, etc.
La tecnología también nos ha servido mucho porque nos ha facilitado el trabajo, nos ha proporcionado formas de entretenimiento, nos permite saber cosas que sin internet no lo hubiéramos podido hacer y muchas otras más. Pero la delincuencia también se está volviendo digital, mediante técnicas como el ‘hacking’, el ‘ransomware’ –el secuestro de datos–, la ingeniería social –manipular a las personas para obtener información que les permita entrar a algún sistema–, ‘phishing’ –usar correo o páginas de internet iguales a las legítimas para pedir datos necesarios para hackear.
Esto me ha hecho pensar si nuestras leyes se han desarrollado para llegar a un nivel que permita juzgar a los delincuentes digitales. La informática forense existe y lo que hace es analizar un servidor que haya sido hackeado o cualquier sitio penetrado por delincuentes digitales, para obtener las pruebas, manteniendo la cadena de custodia informático-forense para que sea válida ante un juez.
La delincuencia también se está volviendo digital, mediante técnicas como el ‘hacking’, el ‘ransomware’, la ingeniería social y el ‘phishing’
Esto lleva a preguntarse si los jueces ya están capacitados para entender estas pruebas informáticas, para entender el proceso digital en el que se cometió el delito, si tienen la capacidad para certificar que la cadena de custodia informático-forense se cumplió y otros factores que hacen que un delito digital sea muy diferente a los que están acostumbrados a juzgar.
Por ejemplo, la inteligencia artificial generativa produce contenidos como audio y video. ¿Cómo haría un juez ante un abogado defensor que le dijera que la foto que se le presentó de su defendido cometiendo un delito no es de él sino que fue alterada por ‘deepfake’, que es cuando se altera una foto poniendo una cara o algo diferente a la original y queda como si fuera real? Son muchas las preguntas que hay para la justicia ante el crecimiento de la delincuencia digital. El Ministerio de Justicia debería empezar con entrenamientos para los jueces sobre el tema.
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Suspendidos los Intercolegiados 2024 por falta de recursos, cuando el Presidente se ha gastado miles de millones de pesos en la casa en París y en numerosas delegaciones que lleva en sus viajes y otras cosas. Presidente, sea generoso con los niños y no con usted mismo.
GUILLERMO SANTOS CALDERÓN