Zoom evitó la quiebra de muchas empresas durante la pandemia. También fue fundamental para que muchos gobiernos no se cayeran. Asimismo, nos permitió mantenernos en o con nuestros seres queridos y salvaguardar nuestra salud mental. La herramienta de reuniones virtuales forma parte hoy de la cotidianeidad para comunicarnos. Y ojo a este dato: puede ser el trampolín que necesita la vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris, para vencer al favorito, Donald Trump, en los comicios presidenciales de noviembre.
¿Zoom? Sí. Zoom. Ni Facebook, ni X ni TikTok. Si en 2008 Barack Obama sembró su victoria en Facebook, y Trump hizo lo propio con el entonces Twitter en 2016, Harris podría resultar dando el campanazo con Zoom en 2024.
En las últimas dos semanas, los demócratas han sostenido cientos de mítines políticos por Zoom. El fenómeno ha sido tal que, en la última semana, las donaciones de Harris se han ido multiplicando exponencialmente a través de esta plataforma.
Ganemos con las Mujeres Negras fue el primer encuentro que trazó la línea, apenas unos días después de que Joe Biden abandonó la campaña. Casi 45.000 personas se conectaron a lo que se considera una de las reuniones más numerosas que haya habido en ese canal. Luego habría una con 150.000 personas. Un análisis de ‘The New York Times’ explicaba que casi todos los encuentros han sido organizados por grupos independientes.
Los demócratas, hay que resaltarlo, han sabido aprovecharse del hartazgo que producen hoy las redes sociales.
Los demócratas, hay que resaltarlo, han sabido aprovecharse del hartazgo que producen hoy las redes sociales, lugares ya carcomidos por la desinformación, el odio y el resentimiento, orientando su estrategia a movilizarse por esta nueva ruta.
Zoom es real, la gente se ve, los que hablan prenden la cámara y son responsables de sus palabras. Todo lo anterior genera confianza y a la vez entusiasmo en remar por una misma causa. Facilita además la convocatoria de activistas y líderes ciudadanos y políticos para transmitir mensajes y hojas de ruta, en horas que le convengan a la mayoría. Adicionalmente, esa narrativa esperanzadora y fresca que le ha inyectado Harris a la campaña presidencial está navegando como un tsunami en cada espacio.
En varios encuentros han llegado actores, cantantes, artistas y celebridades. Todo pareciera muy orgánico, pero el resultado final ha sido la recaudación de decenas de millones de dólares para la campaña de Harris. Solo en julio, la actual vicepresidenta recaudó 310 millones de dólares, de los cuales 200 los logró en su primera semana de campaña, y muchos de estos llegaron a través de pequeñas donaciones en Zoom, por códigos QR.
“Se siente que soy parte de algo, y que mi voz es importante, así seamos decenas de miles metidos en el mismo cuarto”, le dijo un asistente al periodista de ‘The New York Times’. Caso contrario pasa en cualquier otra red social, donde, si bien la comunicación es bidireccional, al final termina siendo un monólogo de un par de personas. Asimismo, no todos los días uno comparte espacio con Jeff Bridges o con Joseph Gordon-Levitt.
Independientemente de lo que suceda en noviembre, Zoom puede convertirse en una herramienta muy importante para la oposición colombiana. Dentro del desespero de muchas personas que no saben qué hacer, y cuando preguntan no obtienen respuesta ni guía, quizás la plataforma pueda convocarnos a cientos de miles de ciudadanos para iniciar la defensa de nuestra democracia de cara a 2026.
Viendo lo que está pasando en Venezuela, junto con la preocupante protección que Gustavo Petro le está dando al dictador, represor y asesino de Nicolás Maduro, no descartemos replicar la estrategia de los demócratas. Será muy bueno buscar al grupo de Ganemos con las Mujeres Negras para conocer cómo lograron detonar esta interesantísima estrategia. ¡Nos vemos en Zoom!
DIEGO SANTOS
Analista digital
En X: @DiegoASantos