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Los responsables de la idea de extender periodos que causó indignación
Un grupo de 22 representantes a la Cámara figuran tras esta propuesta. Algunos investigados.
Las críticas se dieron, entre otras razones, porque los congresistas trabajaron la mayoría del tiempo en casa. Foto: Diego Caucayo
Pocas veces en la historia reciente una propuesta había recibido un rechazo tan generalizado como sucedió esta semana con la idea de un grupo de 22 representantes a la Cámara que plantearon extender algunos mandatos, aplazar las elecciones del próximo año y unificar los periodos de casi todos los altos servidores del Estado.
Aunque el tema se había planteado hace algunas semanas, el miércoles en la noche se conoció el proyecto de reforma constitucional que contenía estas propuestas, el cual fue radicado con la firma de este grupo de congresistas, la mayoría de los cuales no goza de reconocimiento a nivel nacional.
De entrada, la propuesta era aplazar los comicios legislativos y presidenciales del 2022 al 2024, lo que extendía el mandato presidencial y el de alcaldes y gobernadores.
Adicionalmente, la iniciativa ampliaba los periodos del Presidente, congresistas, gobernadores, alcaldes, diputados, concejales, Fiscal, Procurador, Contralor, Registrador, Defensor y magistrados del Consejo Nacional Electoral de cuatro a cinco años, lo que para varios observadores constituía una modificación profunda del sistema político y electoral.
Los responsables de la idea de extender periodos que causó indignación Foto:EL TIEMPO
Tan pronto se conoció la iniciativa, todos los sectores políticos, aliados del Gobierno y de oposición, manifestaron su rechazo e indignación. Y como complemento se conoció una posición de la Corte Constitucional que impide que se modifiquen las reglas de juego de los elegidos en medio de sus mandatos.
Esto derivó en que en cuestión de horas varios de los congresistas que habían firmado el proyecto de acto legislativo se apresuraron a pedir que se excluyera su apoyo del documento.
Uno de los pocos que salió a poner la cara públicamente fue el conservador Armando Zabaraín, quien argumentó que esta iniciativa era clave en medio de la pandemia y de una campaña electoral que podría disparar los contagios.
El presidente Iván Duque, quien desde hace varios días había cerrado la discusión asegurando que su mandato iría hasta el 7 de agosto de 2022, fue más enfático que nunca y dio una declaración que no dejó dudas de su decisión de respetar los periodos constitucionales.
“Lo voy a contestar de la forma más clara, como lo he hecho ya tantas veces, pero lo voy a decir así de claro: Iván Duque Márquez, presidente de Colombia, con cédula de ciudadanía 79...., será presidente hasta el 7 de agosto del año 2022. Punto”, dijo en la revista Semana.
Superado el tema, las miradas se dirigieron a los responsables de la idea: los 22 representantes a la Cámara que firmaron el proyecto y el director ejecutivo de la Federación Colombiana de Municipios, Gilberto Toro, autor de esta idea.
Lo primero que hay que decir es que la mayoría de estos congresistas han tenido un bajo perfil en el Congreso. Sus caras no son conocidas para los medios de comunicación y han brillado por su ausencia en los grandes debates del país.
Incluso dos de ellos han tenido que responder ante las autoridades por algunos temas. Uno es el liberal Hernán Gustavo Estupiñán, quien fue suspendido por la Procuraduría hace dos años por la presunta exigencia de dinero a un miembro de su equipo de trabajo.
Y Mónica Valencia, de ‘la U’, quien afronta un proceso de pérdida de investidura porque cuando se inscribió como candidata por el Vaupés un familiar suyo ocupaba un cargo público en ese departamento.
El resto son congresistas que han tenido cargos de cierto nivel en sus departamentos, pero que no son reconocidos por la opinión pública nacional, sino que, al parecer, prefieren moverse más en sus regiones.
Buenaventura León, conservador, ha sido secretario de Agricultura y de Gobierno de Cundinamarca, así como concejal del municipio de Caparrapí, y días antes de firmar el proyecto de acto legislativo fue condecorado por la Cámara.
José Eliécer Salazar, de ‘la U’, fue uno de los pocos congresistas que se opuso al artículo que da paridad de género en las listas al Congreso, y los conservadores Félix Alejandro Chica y Felipe Muñoz se hicieron conocidos cuando aparecieron como beneficiarios del Sisbén.
Nidia Marcela Osorio, también conservadora, se hizo célebre en 2015 cuando durante una intervención en el Senado confundió a Albert Einstein con Maquiavelo y es recordada por un proyecto de ley que eliminaba la sanción a los congresistas por conflicto de interés.
Y el segundo autor de la propuesta es Gilberto Toro, director ejecutivo de la Federación Colombiana de Municipios, quien cada cierto tiempo trata de moverla con el apoyo de algunos congresistas.
Hace algunas semanas, en diálogo con EL TIEMPO, Toro la defendió y dijo que el propósito era “abrir el debate y que empecemos a buscar la concertación con los diferentes partidos”.
“Lo que estamos proponiendo es que se amplíen los periodos de los alcaldes y se unifiquen con el del presidente, y que sea una iniciativa que no lidere el Presidente, sino que se haga desde el Congreso”, afirmó Toro.
Hay dos lecciones que quedan de este episodio: la primera es que este tipo de reformas tan profundas al sistema político y electoral requieren consenso político. Y la segunda es que hay parámetros constitucionales que algunos congresistas deberían medir antes de presentar este tipo de propuestas.