'Hp', 'víbora' y polémicas afirmaciones: las lecturas del duro discurso del presidente Petro en Soledad, Atlántico

Un discurso inédito, sin filtro y reservas, en el que usó expresiones altisonantes contra el presidente del Congreso y su primer canciller, Álvaro Leyva. Así fue la intervención del presidente Gustavo Petro en la noche de este jueves en Soledad, Atlántico, en medio de la instalación de los controvertidos 'comités del sí’ de la consulta popular.

Si bien se esperaba que el mandatario hablara sobre las 12 preguntas que va a contener el texto que radicará el 1. ° de mayo en el Congreso, el Presidente terminó dando uno de los discursos más duros de los últimos meses y descalificó a sus contradictores.

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El jefe de Estado aseguró calificó de "mucho hp" al senador Efraín Cepeda –a quien, además, calificó como el “Cepeda malo” pues según él solo hay uno bueno y es el senador Iván Cepeda– por decir que deberían concertarse iniciativas legislativas que recojan los principales puntos de la reforma laboral en lugar de acudir a una consulta popular cuando, de acuerdo con Petro, ha obstaculizado el avance de las reformas en el Capitolio.

"Decía Efraín Cepeda entonces "oiga, pero si esas son las preguntas que ustedes presentaron, ahora sí podemos discutirlas en el Congreso". Yo no digo groserías, pero quise decir una: mucho hp. Duré dos años, lo invitaba a mi oficina, me llevó de regalo un libro de fotos de la hija y yo lo puse generoso para que todo el mundo las viera. Siempre me decía "yo voy a concertar Petro, yo sí quiero el diálogo", y apenas salía de mi oficina llegaba a la plenaria lo primero que hacía era hundir las reformas que presentábamos como si fueran basura. Le pagaban o no sé qué, porque la codicia paga a través de sus artículos periodísticos", dijo el presidente Petro ante las risas de su ministro del Interior, Armando Benedetti, y el director de Prosperidad Social, Gustavo Bolívar, en el Polideportivo Hipódromo de Soledad.

Al Presidente le molestó que Cepeda plantease que no habría necesidad de convocar a una consulta popular sobre la reforma laboral, ya que, hay iniciativas similares en curso en el Legislativo que podrían concertarse. “¿Por qué nos vamos a concentrar un mes en el Congreso, tres meses para citar a un proceso electoral, si podemos consensuar algunos de esos proyectos que cursan hoy?”, fueron las palabras del conservador, quien se ha convertido en el principal blanco de críticas de Petro ante el difícil trámite de sus reformas.

Más adelante, el mandatario se fue lanza en ristre contra su excanciller Leyva por la dura carta que este escribió en el que acusa al jefe de Estado de tener un supuesto problema de consumo de sustancias. Petro no solo volvió a negar algún tipo de condición en ese sentido, sino que señaló a Leyva de hipocresía, deslealtad y reveló que supuestamente siendo canciller le aconsejaba cómo reelegirse.

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“Claro, no podía darme las gracias. Tenía era que insultarme y atravesarme una daga por la espalda. Morder la mano. La víbora nunca deja de morder en toda su existencia”, declaró Petro.

La embestida retórica del Presidente en la noche del 24 de abril fue, para varios políticos, una forma de darle la razón a Leyva, quien en la misiva pidió a su exjefe bajar el tono confrontativo de sus discursos y medir el alcance de sus palabras.

“Sus últimas intervenciones públicas desadornadas con amenazas innecesarias, calificando inadecuadamente a sus contradictores, a algunos de criminales sin serlo, incluso dejando entrever más de una vez que los considera una amenaza para la vida de muchos conciudadanos, constituyen un abuso del poder que se deriva de la Jefatura del Estado que usted detenta; no mide adecuadamente el alcance de sus palabras; incita con todo ello a la lucha de clases (...) Colombia requiere la unión, no la confrontación caótica alimentada desde la jefatura del Estado Presidente. Evitemos entre todos un incendio social”, escribió el exministro, que pasó de ser un fuerte alfil a arremeter contra Petro.

Un mensaje similar provino de parte de Efraín Cepeda, quien rechazó los insultos de la cabeza de la rama Ejecutiva. “El presidente Petro aún no comprende la dignidad que ostenta y, como si estuviera en una riña callejera, recurre a la grosería y la bajeza. No pienso caer tan bajo, porque tengo clara la dignidad que represento. Nuestra institucionalidad merece un Honor Perenne, que es mi forma de entender el verdadero HP”, expresó.

Quienes han seguido y analizado el discurso de Petro coinciden en que en este tipo de actos públicos el jefe de Estado eleva el tono, pues debe mantener a sus bases activas, en la calle, de cara a las elecciones del 2026, pues para varios analistas la consulta popular no es más que una estrategia preelectoral. 

El analista Jorge Iván Cuervo también dejó sus reparos: “Esta no es la forma de expresarse un jefe de Estado sobre un presidente de otra rama del poder público. Muy mal y deploro ese comportamiento. Si el Presidente quiere que lo traten con dignidad y respeto, debe proceder de igual manera. El ejercicio del poder exige seriedad y responsabilidad”, comentó.

Para la directora de la Maestría en Comunicación, Tecnología y Sociedad de la Pontificia Universidad Javeriana, Liliana Gómez, es claro que el Presidente "está en campaña electoral y ya dejó de gobernar". "No ha entendido el cargo que ostenta y sigue en campaña electoral, una que además exacerba las emociones y genera espacios de caos y violencia", opinó.

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La extensa oratoria del mandatario en lo corrido de 2025 ha causado debate tanto en la esfera política como en la audiencia que lo escucha. El mandatario sostiene que los medios lo censuran o tergiversan, por lo que su última estrategia fue transmitir en horario Triple A de la televisión nacional sus consejos de ministros. Esa maniobra se cayó la semana pasada por decisión del Consejo de Estado, que el Gobierno impugnó tras calificarla de "censura".

Nazis' y 'nazismo', que junto con el adjetivo de 'fascistas' son términos frecuentemente usados por Petro en contra de sus críticos, aparecen en 19 ocasiones en los discursos de este año. Los mencionó en enero, en su discurso en Jacmel, Haití, y también en la inauguración del nuevo Complejo Científico para la Investigación de las Ciencias de la Salud y la Vida de la Universidad Industrial de Santander, para descalificar decisiones contrarias a su gobierno.

"Lo que hace el Presidente es volver a avivar el fuego de las emociones a partir del insulto y eso no le conviene al país, pero sí le conviene a su campaña, porque hoy la narrativa de no lo dejaron gobernar, la narrativa de los buenos y los malos, esa visión de la política en donde no hay escalas de grises en donde claramente el Presidente busca es que el pueblo haga un juicio moral y no un juicio técnico y argumentado de las reformas y de la propuesta de la consulta popular", complementó el analista Carlos Arias.

La descarga del mandatario no tardó en ser usada como munición por parte de la oposición. “El desespero lo lleva a demostrarle al país y el mundo que Álvaro Leyva tiene razón. Le quedó grande gobernar, le quedó imposible ser persona. Estamos bajo el control de personas que muestran una falta absoluta de decencia, profesionalismo y respeto”, dijo la senadora del Centro Democrático, María Fernanda Cabal.

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“En menos de una semana el Presidente se pasó por la faja disposiciones del Consejo de Estado, continuó ignorando sus obligaciones en materia de salud, reversó la conmoción interior en el Catatumbo, insultó al Presidente del Congreso y fue puesto en evidencia por alguien que solía ser del Ejecutivo. En otras palabras, está en guerra con todos los poderes –incluido el suyo–, provocando una fractura institucional sin precedentes que exige reflexionar sobre el alcance de sus decisiones, reforzar la contención de daños en lo que resta del período y sumar esfuerzos para derrotar al demagogo en 2026”, manifestó Carlos Fernando Motoa, de Cambio Radical.

Incluso, varios han acudido a la “hemeroteca” de las redes sociales para recordar cuando Petro repudiaba el lenguaje de grueso calibre en el debate político. “Es importante que todo luchador por la democracia abandone la grosería como medio de debate”, “el tamaño de la grosería mide con exactitud la deficiencia de la inteligencia”, fueron algunos de los mensajes escritos hace varios años en X (antes Twitter) por Petro.

Hoy, ya como mandatario, sostiene que “por sobre todas las cosas, a quien se debe respetar en una democracia es al pueblo. Y anda por ahí mucho HP que irrespeta al pueblo”, escribió este viernes.

“Que tristeza la línea de "bajeza" a la que cayó el debate público político en nuestro país por cuenta del Presidente”, apuntó la representante del Partido Conservador, Juana Carolina Londoño.

Ahora bien, el discurso de Soledad dejó otras polémicas más allá del ataque verbal. Hubo algunas afirmaciones históricas que provocaron controversia. Entre esas, que el magistrado Manuel Gaona Cruz, víctima de la toma y retoma del Palacio de Justicia, fue su profesor. Abogados de la Universidad Externado de Colombia como Héctor Riveros, institución a la que vinculó el magistrado Gaona como profesor en Derecho Constitucional, negaron que eso fuera verídico.

También hizo ruido su confesión de que le gustaría revivir la Gran Colombia, país que existió entre 1819 y 1831, creado tras la independencia del dominio español, y que unía a varios territorios del norte de Sudamérica y parte de Centroamérica. “Y les quiero confesar que este presidente quiere que volvamos a revivir la gran Colombia. Y hasta me atrevo, sabiendo que aún no somos mayoría, pero podemos serlo, escribir cartas a los presidentes de Ecuador, Venezuela, de Panamá; a sus oposiciones para que sea de toda la sociedad, para que volvamos a encontrarnos para construir la gran confederación gran colombiana, que creo que es un sueño que no se debe olvidar, que no murió con Bolívar”.

JUAN PABLO PENAGOS RAMÍREZ

Redacción Política