Pese a informe, Petro dice que 'se inventaron' relación entre Escobar y el M-19

El mandatario habló del libro de Carlos Lehder, quien dice que el capo no financió toma del Palacio.

El Palacio de Justicia durante la toma de 1985. Foto: Presidencia / Archivo EL TIEMPO

PERIODISTA14.01.2024 10:19 Actualizado: 14.01.2024 18:08

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El presidente Gustavo Petro se refirió este sábado en su cuenta de Twitter a uno de los fragmentos del libro Vida y muerte del cartel de Medellín, del excapo Carlos Lehder, en donde este habla de la toma del Palacio de Justicia.

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Lehder asegura en el libro que la toma del Palacio de Justicia, ocurrida el 6 de noviembre de 1985, no fue financiada por Pablo Escobar o el Cartel de Medellín, algo que contradice el informe encomendado por la Corte Suprema de Justicia a la Comisión de la Verdad.

“Una historia oficial mentirosa. No pueden explicar por qué ante una demanda armada del M-19 por restablecer una acuerdo de paz en 1985, contestaron eliminando sanguinariamente la Justicia”, señaló el jefe de Estado en su cuenta de X.

En el informe de la Comisión de la Verdad, publicado en 2010, aparecen testimonios que daban cuenta de los encuentros entre Pablo Escobar e Iván Marino Ospina, excomandante de ese grupo. También relatos como los de John Jairo Velásquez Vásquez, alias ‘Popeye’, quien aseguraba que el capo del Cartel de Medellín había pagado al M-19 dos millones de dólares por la toma del Palacio de Justicia.

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El primer mandatario, quien hizo parte de esa guerrilla desde 1978 hasta que se firmó el acuerdo de paz con el Gobierno de Virgilio Barco, agregó que dicha relación que le han querido endilgar al M-19 con Escobar es un “invento”.

“Por eso se inventaron la historia de la relación del M-19 con Pablo Escobar, que aquí el más alto miembro sobreviviente del cartel del narcotraficante, desmiente”, concluyó el jefe de Estado.

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La toma del Palacio de Justicia

El 6 de noviembre de 1985, mientras el país enfrentaba los embates del narcoterrorismo, la otra guerra, la del Estado contra las guerrillas, se instaló por dos días en plena Plaza Bolívar en Bogotá, en el corazón del poder en Colombia.

Fueron 28 horas de horror durante las cuales el Palacio de Justicia, sede de la Corte Suprema y del Consejo de Estado, quedó reducido a escombros por los violentos combates entre Ejército y la guerrilla del M-19, y por los tres incendios que asolaron la edificación durante la toma y la retoma.

REDACCIÓN POLÍTICA