¿Cuáles son los riesgos de practicar sexo oral sin protección?

El sexo oral es una práctica a la vez difundida y placentera. Hay quienes lo definen como una actividad preliminar perfecta para aumentar la excitación previa a la penetración. 

Otros, lo disfrutan en sí mismo y pueden obtener todo el placer que necesitan solo con la ayuda de las habilidades bucales de su amante. ¿Qué más da? Son gustos.

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No obstante, hay una creencia sobre este tema que es relativamente común, inexacta y hasta peligrosa. Muchas personas identifican el sexo oral como una forma 'segura' de sostener relaciones sin protección, lo cual carece de sustento. Le contamos por qué.

Comencemos por una definición rápida de sexo oral. Esto es, cualquier práctica que incluya la estimulación de la vagina, el pene o el ano haciendo uso de la boca. Ejercerlo es una costumbre histórica, pues desde la cultura india hasta el Antiguo Egipto hay registros de que se consideraba como una actividad sexual común.

Pero su amplia difusión no está necesariamente ligada a su seguridad. Un estudio publicado por la revista 'Annals of Oncology' y realizado en 13.089 personas, de entre 20 y 69 años, mostró que tener sexo oral sin protección con cinco o más parejas puede aumentar el riesgo de contraer algunos tipos de cáncer de garganta, sobre todo en los hombres.

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Quienes estaban más en riesgo eran los fumadores que habían practicado más sexo oral. "La prevalencia de infección fue más alta (15%) entre los hombres que fumaban y tenían cinco o más parejas sexuales orales", señalaba una reseña del estudio, publicada por la agencia de divulgación científica 'EurekAlert'.

Un estudio de la revista ‘Cáncer’, citado por la columna de este medio ‘Sexo con Esther’, aporta datos similares. Según se advierte en ese espacio de opinión, “tener más de 10 parejas con las que se ha practicado sexo oral aumenta en más de cuatro veces el riesgo de desarrollar tumores de la boca y la garganta”.

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Otros factores de riesgo, señala la columna, tienen que ver con qué tan joven es una persona cuando empieza a practicar sexo oral y la cantidad de parejas sexuales que tiene en poco tiempo. 

Pero el VPH, (el virus del papiloma humano, que causa esos tipos de cáncer), no es el único riesgo a la hora de tener sexo oral.

De acuerdo con el sitio web de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por su sigla en inglés), también se pueden contraer otras afecciones como sífilis, gonorrea y clamidia. Esto en el caso de la felación (estimular el pene con la boca) y el cunnilingus (estimular la vagina con la boca).

Mientras tanto, los CDC señalan que en el sexo oral-anal hay riesgos de “transmitir hepatitis A y B, parásitos intestinales (como Giardia) y bacterias (como E. coli)”.

En este punto es probable que usted considere que el sexo oral es una práctica que puede ser peligrosa para la salud. Pero la idea no es que se desanime, sino que conozca a cabalidad qué riesgos corre y los mitigue tanto como sea posible.

En el caso del VPH, tal vez lo más efectivo es la vacunación. Esto podría evitar un cáncer de cuello uterino o de vagina (en el caso de las mujeres) y también reduce de forma drástica las probabilidades de desarrollar cáncer de garganta.

Los CDC también sostienen que, a diferencia de otras prácticas, la probabilidad de contraer VIH a través del sexo oral es extremadamente baja, a menos de que tenga laceraciones o heridas bucales. En caso de que su pareja sea un hombre, procure evitar que eyacule en su boca, esto también puede disminuir las posibilidades de contagiarse.

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Ahora bien, una medida que puede resultar bastante útil es que usted y su pareja se sometan a pruebas de ETS, sobre todo cuando van a a tener relaciones sexuales por primera vez. Si no está seguro del estado de salud de su pareja, lo mejor es hacer uso del siempre adecuado condón en el caso del pene y de diques dentales en el caso de la vagina o el ano (estas son láminas de látex especiales para tener sexo oral de forma segura).

Por supuesto, vale decir que la protección de barrera es una necesidad cuando se trata de tener relaciones con desconocidos.

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