Las autoridades sanitarias de España están atentas a los pacientes portadores del virus del Nilo Occidental (VNO), que ya deja decenas de casos en al menos tres provincias de ese país.
Y aunque estos brotes se presentan al mismo tiempo que España y otros países europeos viven nuevas olas de contagios con el nuevo coronavirus, lo cierto es que el VNO tiene grandes diferencias, la principal de ellas es que no se transmite entre humanos.
De acuerdo con una hoja informativa elaborada por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés) de Estados Unidos, se trata de una enfermedad potencialmente grave y una amenaza estacional, pues se agrava en el verano y continúa hasta el otoño.
Se ha documentado que este virus se transmite principalmente a través de mosquitos infectados que pican a seres humanos tras alimentarse de aves infectadas.
En muy contados casos, el virus del Nilo Occidental también se ha transmitido por medio de transfusiones de sangre, trasplantes de órganos, lactancia materna y hasta durante el embarazo de madre a hijo. Y queda claro que no se transmite mediante el o físico.
El VNO fue aislado en 1937 en Uganda y detectado después en Oriente Medio en los años 50. Se introdujo en 1999 en América del Norte, donde se propagó rápidamente y causó cientos de víctimas en su momento, generalmente fallecidas a causa de una meningitis o una encefalitis.
Síntomas
Según los CDC, cerca de una de cada 150 personas infectadas se enfermará de manera grave. Y los síntomas graves pueden incluir fiebre alta, dolor de cabeza, rigidez en el cuello, estupor, desorientación, temblores, convulsiones, debilidad muscular, pérdida de la visión, entumecimiento y parálisis. “Estos síntomas pueden durar varias semanas y los efectos neurológicos pueden ser permanentes”, dice la entidad.
La mayoría de las personas no manifiestan síntomas y una de cada cinco presentará algunos como fiebre, dolor de cabeza y en el cuerpo, náuseas y vómitos, ocasionalmente hinchazón en las glándulas linfáticas o erupción cutánea en el pecho, el abdomen y la espalda. Todas estas molestias suelen durar pocos días.
Todas estas señales aparecen generalmente de 3 a 14 días después de haber sido picadas por el mosquito infectado.
El riesgo
Los CDC explican que las personas de más de 50 años tienen mayor riesgo de enfermarse gravemente por este virus y por eso deben cuidarse especialmente de las picaduras de mosquitos. “Mientras más tiempo esté al aire libre, mayor será la posibilidad de que lo pique un mosquito infectado. Si pasa bastante tiempo al aire libre, ya sea por trabajo o por diversión, tenga cuidado especial para evitar las picaduras de mosquitos”.
Al tiempo indican que el riesgo de contraer el virus a través de procedimientos médicos, transfusiones de sangre o trasplante de órganos es muy bajo. Y el riesgo de que un feto o un bebé sea infectado durante la lactancia todavía está en proceso de evaluación.
Cabe destacar que, de acuerdo con el Instituto Nacional de Salud (INS), aún no se han registrado casos de este virus en Colombia.
Sin embargo, sí es una enfermedad transmisible de interés para el país “ya que la ubicación geográfica, la diversidad de reservorios, vectores y características climatológicas de nuestro país son condiciones que pueden favorecer su entrada y desarrollo”.
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