Viajar a Estados Unidos tiene siempre un punto fabuloso: la tecnología funciona muy bien y está ahí para facilitarnos la vida.
Y no lo digo porque existan apps o servicios que no tengamos en Colombia. Mi comentario va a que lo que hay funciona. Son detalles que evidencian la diferencia entre tener ‘la posibilidad’, a realmente contar con la tecnología de manera articulada y eficiente.
Ponerle una SIM 5G al iPhone es ya de entrada algo fascinante: navegar a tasas que rondan el gigabit de velocidad hace olvidar muy pronto la sensación de límites de datos, que hay que esperar a tener wifi para cargar varias fotos o videos; hacer videollamadas a la familia y amigos, ver videos, series, películas, sin preocupaciones, entre otros, es normal.
El iPhone se autoconfiguró casi sin intervención mía en el servicio satelital de emergencias. “Si detectamos que sufre un accidente grave, una caída o si oprime tal combinación de botones, el iPhone ará a los servicios de emergencia incluso si no hay cubrimiento de red”. ¡Cool!
Luego Uber, un servicio regulado, legal, veloz, con carros cómodos y modernos, sin tener que usarlo a ‘escondidas’, con información en vivo del conductor, con paraderos señalizados.
En la calle volví a alquilar una patineta eléctrica para distancias cortas, eficientes, baratas, divertidas. Y cuando necesité, me conecté con el portátil al wifi público de San José (California) veloz, gratuito y con buen cubrimiento.
No necesité descargar ninguna app para tener al segundo información sobre mis vuelos, alertas con los cambios de puerta, mensajes precisos para ir a abordar, todo se actualizaba además automáticamente en el pasabordo electrónico en la Apple Wallet.
Reitero: muchas de esas cosas se supone que también las tenemos en Colombia, pero es innegable que allá en Estados Unidos funcionan verdaderamente bien.
Y no se trata de disponibilidad de servicios digitales o de dispositivos, la regulación y las políticas públicas tienen mucho que ver también. La libre competencia entre servicios, operadores, el incentivo y no bloqueo a emprendedores con apps novedosas, entre otros, son la razón detrás. Es la tecnología que nos merecemos.
JOSÉ CARLOS GARCÍA R.
Editor Multimedia
En X: @JoseCarlosTecno