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Familia multiespecie: ¿por qué este vínculo con mascotas ahora tiene respaldo legal?
Una decisión judicial reconoció a animales de compañía como parte de la familia en Colombia.
Este fue un espacio de encuentro para fomentar la tenencia responsable, el cuidado y el bienestar, además para divertirse en familia. Foto: Alcaldía de Cali
Gran revuelo ha causado el pronunciamiento de la Sala del Tribunal Superior de Bogotá respecto al caso de Jaider Alexis Castaño Rico, quien demandó a su expareja por no permitirle visitar a su mascota Simona. En este sentido, el Tribunal de Bogotá, reconoció algo que para muchos no es nuevo: la familia multiespecie y los lazos fuertes que nos unen a nuestros animales de compañía.
Todo inició en el año 2021 cuando, luego de la separación de una pareja, Simona, el animal de compañía que había sido adquirido durante la unión, quedó en la mitad del pleito jurídico y de la separación.
A partir de allí, Castaño pretendía que se le permitieran visitas reguladas bajo el argumento de que la mascota formaba parte de su familia, que los unía un vínculo afectivo y emocional fuerte y que, además, tanto a Simona como a él el o les proveía beneficios emocionales y, por el contrario, la ausencia hacía que cambiaran actitudes y comportamientos.
Luego de ires y venires, que tomaron aproximadamente un año, entre el Juzgado Tercero de Familia y el Juzgado 27 Civil del Circuito de Bogotá, y que le correspondió dirimirlo al Tribunal de Bogotá, se determinó que los animales de compañía hoy en día "dejaron de ser considerados como cosas, pero no perdieron su estatus de propiedad dentro del ordenamiento jurídico. Ahora son también identificados como seres sintientes respecto de quienes existen deberes de protección especial".
Dos argumentos que justifican este punto de vista son la Ley 1774 de 2016, en la que se reconoce a los animales como seres sintientes, y el Artículo 42 de la Constitución Política de Colombia, en el que se habla de la familia como "el núcleo fundamental de la sociedad que se constituye por vínculos naturales o jurídicos".
Si a todo lo anterior se le suma el Artículo 16, que habla del libre desarrollo de la personalidad, los argumentos a favor de reconocer los lazos entre animales y seres humanos son más que suficientes.
¿Qué es una familia multiespecie?
Foto:iStock
Las actitudes hacia los animales en general, y en especial hacia los de compañía o mascotas, ha ido evolucionando con el tiempo. Años atrás, perros y gatos eran considerados como simples especies domésticas y, por lo tanto, no se reconocían sus necesidades básicas como salud, cuidado, respeto, entre otras.
Hoy en día, el concepto de familia ha cambiado: las personas están dispuestas a cambiar hábitos, buscar espacios, invertir dinero e incluso hasta instaurar demandas como en este caso. Los seres humanos han creado vínculos tan estrechos con sus animales que, actualmente, son considerados como hijos, hermanos, sobrinos, nietos, etc., tanto que cada vez es más frecuente escuchar términos como “perrihijo” o “gatihijo”, entre otros.
Pero ¿qué es este nuevo “tipo” de familia? Si bien los lazos no son del todo nuevos, la terminología quizá sí. Una familia multiespecie, también llamada familia interespecie, es aquella que está compuesta por seres humanos y otras especies animales como perros, gatos e incluso algunas otras mascotas no convencionales, como roedores, peces, etc.
Estas familias están unidas no por unos lazos sanguíneos, sino por unos vínculos afectivos, de dependencia y de responsabilidad que son recíprocos y tienden a ser bastante fuertes, debido a que se reconocen los beneficios que estas relaciones tienen para ambos individuos.
Mi mascota, mi familia
A pesar de que algunas personas pueden considerar como extremo o llamativo el hecho de considerarlos como familia, existen argumentos válidos desde diferentes puntos de vista.
- Psicología: Los seres humanos reconocen en sus mascotas no solo a un miembro de la familia, sino también a una fuente de diferentes beneficios para la salud física y mental, modificación de comportamientos, cuidados, entre otros aspectos positivos. Estos sitúan al ser humano como garante y responsable de respetar, cuidar y satisfacer necesidades, los cuales son muy similares a los que se tienen con los humanos de las familias.
- Bioética: Se reconoce en los animales ciertos atributos como una personalidad e individualidad. Esto se percibe a través de asignarles un nombre, reconocer unas necesidades e intentar satisfacerlas, asignarles roles dentro de la construcción de la familia como cuidado, compañía, confianza, seguridad, apoyo emocional, entre otros.
- Veterinario: La medicina veterinaria ha logrado avances significativos en el cuidado de las mascotas tanto que, hoy en día, es más factible encontrar especialidades veterinarias como odontología, cardiología, endocrinología, oncología, entre otras. Esto también habla de esa necesidad de las familias multiespecie de tener a sus unidos durante más tiempo en excelentes condiciones de bienestar.
- Sociología: En algunas ocasiones se suele mencionar que las personas que reconocen a sus mascotas como de la familia, como hijos o hermanos, lo hacen como un sustituto de aquellas relaciones humanas. Sin embargo, la sociología explica que más que un sustituto, tener un perro o un gato es un complemento de la familia.
- Etología: Según esta ciencia, que estudia el comportamiento animal, perros y gatos se asumen a sí mismos como de la familia, reconocen a las personas como integrantes de su núcleo primario o manada, y participan activamente dentro del rol que se les ha asignado.
- Económico: Las personas hoy están más dispuestas a invertir no solo tiempo, sino también dinero en la búsqueda de satisfacer las necesidades de sus animales. Cada vez es más frecuente observar el crecimiento económico de segmentos como estética de animales, paseos, colegios o guarderías, suplementación nutricional, planes de salud, entre otros.
- Tecnología: Muchos propietarios suelen crear perfiles de redes sociales para sus mascotas, otorgándoles atributos más personales, y buscan herramientas tecnológicas que les permitan satisfacer necesidades, brindar salud y bienestar y, adicionalmente, encontrarlos en caso de pérdida o robo.
Gracias a este pronunciamiento del Tribunal de Bogotá, y sumado al reconocimiento de la diversidad en las familias, hoy se podría adicionar un argumento jurídico en el que se reconozca no solamente a los individuos que hacen parte de las familias, sino también los roles que estos cumplen al interior de estas.