En la mañana de este lunes 5 de febrero, los obispos colombianos dieron inicio a su asamblea 116. La instalación del encuentro estuvo a cargo del cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal. Durante su alocución, el purpurado invitó a sus hermanos obispos a ser "instrumentos de renovación sinodal y misionera" en Colombia.
En su mensaje, el primado de Colombia propuso a los prelados cuatro maneras de ser misioneros en sinodalidad para el anuncio del Evangelio en cada una de las jurisdicciones eclesiásticas que pastorean:
Misioneros que oran y trabajan
El cardenal Rueda les recordó la importancia de entretejer siempre la oración con el trabajo que adelantan, y desde allí, desde ese encuentro permanente con el Señor, mantener la claridad y la energía que necesitan para el desarrollo de su misión.
Misioneros con alegría y con cruz
Monseñor Rueda afirmó que la vida de los misioneros armoniza la alegría y la cruz, asimismo, que el corazón de un obispo está lleno de cicatrices producidas por heridas y sufrimientos propias de su pastoreo en medio del Pueblo de Dios. Por ello, los invitó a alimentar su confianza en el Señor y así sobrellevar las dificultades que, a menudo, deben enfrentar. También, a pensar en sus otros hermanos obispos siendo apoyo cuando lo requieran.
Misioneros que escuchan y disciernen
Haciendo referencia a la metodología usada durante la primera parte de la Asamblea General del Sínodo realizada en Roma en octubre del 2023, conocida como conversación en el Espíritu, el cardenal afirmó que se trata de algo más profundo que una simple estrategia. Dijo que es una manera de ser Iglesia y una forma de vivir su episcopado en la escucha y el discernimiento.
Como se plantea el documento de síntesis de dicha asamblea sinodal, -agregó el purpurado-, la auténtica escucha es fundamental en el camino hacia la sanación, el arrepentimiento, la justicia y la reconciliación. Además, que esa escucha debe ser aplicada ante el clamor entero de la creación.
Misioneros con el gusto de ser pueblo de Dios
El presidente del episcopado terminó su alocución recordando que, como pastores, están llamados a vivir su misión de iluminar, bendecir, vivificar, levanta y sanar, desde un amor cercano y comprometido con el bien de todos. Esto implica caminar juntos, como pueblo, consolidando relaciones fraternas, animadas por la fe, la esperanza y la caridad.
Sobre la asamblea
Del 5 al 9 de febrero se llevará a cabo la CXVI Asamblea Plenaria del Episcopado Colombiano, donde ochenta y seis obispos del país, incluyendo algunos eméritos, han confirmado su participación.
Durante esta reuniónlos obispos reflexionarán y trabajarán sobre el Sínodo de la Sinodalidad, específicamente a propósito de la etapa universal, que inició en octubre del 2023 con la primera parte de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos realizada en Roma. Por esto, tendrán como guía el Informe de síntesis presentado desde el Vaticano al cierre de dicha asamblea. Precisamente para esta reunión, los pastores colombianos adoptaron como lema la frase “Una Iglesia sinodal en misión”, la misma con la que se tituló dicho documento.
Bajo ese propósito, los cuatro representantes de la Iglesia colombiana en la Asamblea General del Sínodo, serán los encargados de presentar durante esta semana a todos los prelados las claves centrales de esa síntesis, así como las experiencias vividas durante ese primer encuentro de la asamblea sinodal. Se trata de la madre sinodal, la hermana Gloria Liliana Franco Echeverri, presidenta de la Confederación Latinoamericana y Caribeña de Religiosos y Religiosas (CLAR); el señor Cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia; monseñor Ricardo Tobón Restrepo, arzobispo de Medellín; monseñor José Miguel Gómez Rodríguez, arzobispo de Manizales.
En concordancia con la síntesis, las dimensiones de análisis clave que se abordarán en este encuentro 116 de los obispos del país serán: 1. El rostro de la Iglesia sinodal. 2. Todos discípulos, todos misioneros. 3. Tejer lazos, construir comunidad. Esto, a través de una metodología de trabajo que incluye conversatorios, plenarias, trabajos grupales por temas y por provincias eclesiásticas.
REDACCIÓN VIDA DE HOY*
Con información de la CEC
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