En el año 2014, Bogotá llegó a registrar 417 nacimientos en niñas de 10 a 14 años y 16.747 en mujeres de 15 a 19 años. ¿Qué habrá pasado en Bogotá para que esas cifras pasaran a ser 274 y 10.675, respectivamente, cuatro años después?
Las respuestas son variadas. Las explicaciones comienzan por lo demográfico y pasan por los buenos resultados de múltiples estrategias lideradas por entidades del Distrito e, incluso, por la genialidad de quienes encontraron en sus aulas de clase o entornos una oportunidad para darle un giro a esta realidad.
En ese orden de ideas se han registrado los cambios significativos en la estructura y dinámica poblacional, asociados a procesos de transición demográfica: reducción de la natalidad, fecundidad y mortalidad.
Durante los últimos cinco años, en Bogotá se identificó una tendencia hacia la reducción de los nacimientos en la población general. Según el Dane, al comparar el periodo 2014-2018 se presenta una reducción del 16 % en los nacimientos de la población general, es decir, adolescentes y mujeres mayores de edad. Sin embargo, según el ente estadístico, son mejores las cifras de reducción de los nacimientos en mujeres adolescentes (10 a 19 años) que para el mismo periodo fue del 36 %, es decir, dos veces la magnitud de reducción de la población mayor de 19 años.
Es cierto, en Colombia y en Bogotá está aumentando la edad en que las mujeres tienen su primer hijo, pero esto no es gratuito, ha dependido también de mayor a la educación, de más participación en el mercado laboral y de un mejor a servicios de salud sexual y reproductiva.
“Podemos decir que este es el resultado de un trabajo integral: anticoncepción en jóvenes, educación sexual y trabajo pedagógico sobre los riesgos de enfrentarse a un embarazo adolescente”, dijo Cristina Vélez, exsecretaria de Integración Social del Distrito.
El primer paso de este logro fue darle solidez al ‘Programa distrital de prevención y atención de la maternidad y la paternidad temprana’ y hacer que en este participaran conjuntamente ocho sectores de la istración y entendieran la necesidad de que los adolescentes y jóvenes de la ciudad ejercieran plenamente sus derechos sexuales y reproductivos.
El asunto era impactar, y había que comenzar en casa, transformando el sistema de creencias y valores de quienes están vinculados al Distrito en torno a los derechos sexuales y reproductivos de niños, adolescentes y jóvenes. Según la istración Distrital, 22.205 funcionarios y contratistas fueron formados.
Lo mismo se hizo con 1.400 profesionales de la salud, 1.094 docentes y 420 coordinadores y orientadores de colegios públicos de Bogotá. Incluso, 52 familias y 76 líderes de organizaciones sociales juveniles de las localidades de Chapinero, La Candelaria y Santa Fe fueron educados en este tema.
Igualmente se ó con 119 organizaciones comunitarias. En el marco de la ‘Semana andina de prevención del embarazo’ se llegó con talleres sobre promoción, apropiación y ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos, durante 14 jornadas.
También se debía llegar a las viviendas, no sin antes caracterizar unos 8.464 hogares en los que unos 5.638 integrantes eran adolescentes y jóvenes de 10 a 19 años.
“A través del programa ‘Cuidado para la salud familiar’ se trabajó en prevención del embarazo a temprana edad, regulación de la fecundidad, fortalecimiento del proyecto de vida y ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos”, explicaron funcionarios del Distrito.
En los hogares se realizó seguimiento a 1.694 adolescentes con alto riesgo de embarazo. Se identificaron desde el espacio de vivienda 406 adolescentes desescolarizados y se realizó activación de ruta intersectorial con la Secretaría de Educación (SED). Todo esto resume una estrategia clara: prevención, que, según el Distrito, ya dio sus primeros frutos.
Estos logros son valorados hasta por la academia. “Hay que reconocer que existe mayor conciencia, mejor educación sexual, mejores programas de prevención del embarazo y un cambio en el pensamiento de los adolescentes”, dijo Carlos Gómez Restrepo, decano de Medicina de la Pontificia Universidad Javeriana.
Hay que reconocer que existe mayor conciencia, mejor educación sexual, mejores programas de prevención del embarazo y un cambio en el pensamiento de los adolescentes
Agregó, sin embargo, que se debe continuar con el trabajo, lograr que los jóvenes tomen decisiones acertadas. “Hay que seguir comprendiendo esta problemática y haciendo una mejor pedagogía en los colegios, las instituciones de salud, las comunidades y las familias. Esto es y debe ser un problema de los jóvenes, pero en el que todos aportemos en la solución”.
Lo mismo piensa Ómar Oróstegui, director del programa Bogotá Cómo Vamos, que también ha reconocido los logros del Distrito.
“Los resultados han sido positivos como consecuencia de intervenciones integrales y gracias al concurso de instituciones del sector público y el privado que entendieron la necesidad de articularse para tener efectos en los modelos de prevención tanto en entornos escolares como familiares”. Sin embargo, agregó: “Debe continuar la articulación para tener un mayor impacto en la reducción del embarazo adolescente”.
Sexperto.co, la plataforma que habla de sexo a los adolescentes y jóvenes Foto:SDS
a consultas
Otro avance positivo fue el cambio del modelo de pago entre Capital Salud y las subredes. Esto permitió aumentar en 39 % la cobertura de consultas en fecundidad en adolescentes y jóvenes de entre los 14 y 24 años, así como aumentar en un 16 % el suministro de métodos de regulación de la fecundidad.
Antiguamente, la Secretaría Distrital de Salud entregaba un monto determinado de recursos a las IPS para cubrir los servicios que un afiliado a Capital Salud demandara; en la actualidad, el modelo utilizado es el de pago por actividad final, es decir, la IPS factura cada vez que un reciba un servicio del prestador.
“Este cambio en el modelo de pago ha promovido un enfoque integral de atención, entendiendo que los adolescentes y jóvenes no solo tienen como riesgo para su salud un embarazo a temprana edad, sino que están expuestos a otros riesgos que pueden afectar su bienestar”, dijo Morales.
La cultura también importa
“El machismo deteriora la convivencia y pone en riesgo la vida. La Encuesta Bienal de Culturas, con una representatividad del 95 %, arrojó resultados inquietantes en 2017: el 38 % de las personas creen que una educación adecuada para las niñas es la que da preferencia al desarrollo de los roles de madre y esposa.
El 43 % piensa que una mujer que se viste con minifalda o ropa muy ajustada provoca que le falten el respeto en la calle. El 55 % considera que la mujer que se deja maltratar por su pareja es porque le gusta que la maltraten”, dijo María Claudia López, secretaria de Cultura. Estas cifras fueron lo suficientemente dicientes como para que el Distrito emprendiera una lucha contra el machismo.
La idea de esta estrategia es que la sociedad piense en la maternidad y la paternidad temprana desde las construcciones culturales, como un fenómeno multicausal.
La campaña ‘Bogotá, un espacio libre de machismo’, liderada por siete entidades, busca desmitificar tabúes no solo entre los jóvenes, sino en todos los entornos que habitan (familia, colegio, comunidad).
Mediante esta estrategia también se ha buscado apoyar las iniciativas de los jóvenes. Para ello se entregan estímulos económicos o en especie.
A la fecha han sido apoyadas un total de 104 iniciativas en derechos sexuales y reproductivos.
Esto permite que los jóvenes emprendan proyectos y movilicen a otros de su localidad para que participen en temas de prevención de maternidad y paternidad tempranas. Las iniciativas juveniles han repercutido en más de 17.000 beneficiarios.
“Otorgar iniciativas a agrupaciones juveniles permite reconocer que ellos son quienes conocen su territorio, su comunidad, y por ello tienen la idoneidad para generar estrategias de prevención que se adapten a las necesidades del territorio desde diferentes ámbitos: teatro, música, producciones audiovisuales, componentes pedagógicos, uso de las TIC, entre otros”, dijeron expertos del Distrito.
El Distrito también lleva a cabo las ferias de sexualidad, en las cuales se busca que se produzcan aprendizajes significativos y contextualizados, en adolescentes y jóvenes, para el ejercicio de una sexualidad libre, autónoma y placentera.
Las ferias están conformadas por seis estaciones con actividades dinámicas y lúdicas, en las que adolescentes y jóvenes acceden a información sobre prácticas protectoras; herramientas para la toma de decisiones y prevención de riesgos como las infecciones de trasmisión sexual (ITS), la violencia de género, el abuso sexual y los embarazos no deseados. Más de 17.000 adolescentes y jóvenes han participado en estos espacios.
Y desde la Secretaría de Salud de Bogotá se desarrolla la estrategia Sintonizarte, que realiza intervenciones con niños y adolescentes, docentes y padres de familia en colegios priorizados, definidos mediante la articulación con la Secretaría de Educación Distrital, para llevar a cabo estrategias de intervención individual y colectiva en cuatro ejes: afecto y convivencia, alimentación saludable para la vida, desarrollo motor feliz y vida salud y ambiente.
Durante el 2016, la intervención con Sintonizarte se hizo en 396 sedes de establecimientos educativos; en el 2017 fueron abordadas 407 sedes de establecimientos públicos y privados (383 urbanos y 24 rurales). En el 2018 fueron priorizados 100 establecimientos educativos, alcanzando una población de 186.816 niños, niñas, jóvenes y adolescentes, 2.182 padres y 1.676 docentes. Para el 2019, la acción integrada Sintonizarte se desarrollará en 100 establecimientos educativos urbanos y dos rurales.
Los esfuerzos, según el Distrito, han ido más allá de lo pedagógico. La Secretaría de Salud, por ejemplo, como medida de prevención del VIH-sida, infecciones de transmisión sexual y embarazo no planeado, ha realizado la entrega de preservativos a la población en los espacios de vida cotidiana. Las cifras de esta actividad de distribución se discriminan por año así: 1’106.023 unidades entregadas en 2016, 1’342.281 para el 2017 y 1’590.591 preservativos masculinos y 4.000 femeninos en 2018.
Y no ha sido la única estrategia para la distribución de preservativos en la ciudad. Se han instalado 110 dispensadores de estos elementos, para permitir el a bajo precio a este método de anticoncepción, en sitios priorizados de 15 localidades de la siguiente manera: Antonio Nariño (9), Barrios Unidos (1), Bosa (2), La Candelaria (11), Chapinero (21), Ciudad Bolívar (10), Engativá (8), Fontibón (1), Kennedy (19), Los Mártires (9), Puente Aranda (3), Rafael Uribe Uribe (1), San Cristóbal (1), Suba (2) y Teusaquillo (12).
Las 110 máquinas dispensadoras de preservativos masculinos fueron instaladas así: 45 en instituciones de educación superior, 21 en bares, 14 en parques públicos-IDRD, 15 en casas de la Juventud SDIS (Secretaría Distrital de Integración Social), cuatro en centros comerciales, cuatro en servicios comunitarios, dos en la SDS (Secretaría Distrital de Salud), dos en fundaciones, dos en la Secretaría de la Mujer y una en el Idiprón (Usme).
El seguimiento a la estrategia de dispensadores de preservativos evidenció un aumento progresivo, para un consumo total de 85.480 unidades, durante los cinco meses en los que las máquinas permanecieron instaladas, con un promedio mensual de uso de 17.096 preservativos.
Los resultados han sido positivos como consecuencia de intervenciones integrales y gracias al concurso de instituciones del sector público y el privado
Abuso sexual, el delito que corta los sueños de las niñas
Según el Instituto de Medicina Legal, en el 2018 se registraron 1.155 casos de violencia sexual en niños y adolescentes en Bogotá entre enero y abril (198 hombres, 957 mujeres), mientras que en el mismo período de 2019, las cifras son de 1.103 (193 hombres, 910 mujeres).
Entre enero y mayo del 2019, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) abrió en Bogotá, 1.448 procesos istrativos para restablecer los derechos de niños, niñas y adolescentes víctimas de violencia sexual. La capital reporta el mayor número de casos en todo el país.
Esta cruda radiografía es quizás la problemática más grave por solucionar si se quiere seguir mejorando en los indicadores de los embarazos en adolescentes.
Según la Secretaría de Salud, para el año 2018, a través del subsistema de vigilancia epidemiológica de la violencia intrafamiliar, maltrato infantil y violencia sexual (Sivim), se registraron un total de 174 casos de gestantes menores de 14 años. El 95,4 % de los embarazos de niñas se producen entre los 13 y 14 años.
Detrás de estas cifras, sin duda hay vidas y sueños truncados. Según el documento Conpes Social 147 del 31 de enero de 2012, referencia para el Distrito, el embarazo temprano trae riesgos que ponen en desequilibrio el bienestar integral y las expectativas de vida de las jóvenes. “Ocasionan deserciones o discriminaciones en los contextos educativos y sociales; generan vinculación temprana al mercado laboral y mayores probabilidades de ingresar a cadenas productivas de subempleo u otras formas inestables de relación laboral”.
Además, dice el documento, se crean tensiones familiares y emocionales, e impulsan la reconfiguración o aceleración de los proyectos de vida. Y las afectaciones no son solo psicológicas. Como consecuencia de la inmadurez física, “las adolescentes tienen el doble de probabilidad de morir en el parto, en relación con las mujeres en los 20; en aquellas por debajo de 15 años de edad aumenta en 5 veces el riesgo”.
En el Conpes se explica que durante el embarazo se pueden presentar complicaciones como hipertensión, preeclampsia y eclampsia, anemia, hemorragias, entre otras que tienen su origen no solo en la inmadurez física de los cuerpos sino en el tardío a servicios de salud y cuidado prenatal al desconocerse el embarazo.
Muchas niñas carecen de información sobre el funcionamiento de su cuerpo y tienen mitos en torno a la concepción, o toman la decisión de esconder el embarazo. La entidad concluye que la gestación a temprana edad es un fenómeno social que puede traer consigo afectaciones para la salud de la mujer, así como de su hijo, tales como malformaciones, bebés con peso bajo y una mayor tasa de mortalidad perinatal.
Y, en el plano psicológico, los adolescentes pueden vivir alteraciones emocionales por asumir roles de adulto, estigma y humillación; así mismo, depresión, síndrome del fracaso de la madre/padre, sentimiento de pérdida de la juventud e, incluso, suicidio.
Por eso, para defensoras de los derechos de las mujeres como Claudia Yurley Quintero, es necesario seguir trabajando en la generación de espacios y entornos protectores y seguros para los niños, niñas y adolescentes. “Hay que procurarles clubes, escuelas, jornadas extensivas de arte, bibliotecas. Lugares en donde aprendan y compartan sus experiencias y sean protegidos”, dice.
Paradójicamente, el lugar en donde las niñas deberían estar más protegidas es donde más se cometen los abusos: el hogar.
Pese a los avances, había todavía más por hacer. Por alguna razón no era fácil que un adolescente o, incluso, un adulto se atreviera a formular preguntas sobre sexualidad.
Por eso se ideó, en 2016, Sexperto, una plataforma web para que quienes ingresaran tuvieran la libertar de salir de sus dudas frente al sexo y la sexualidad, y, lo mejor, de forma anónima.
Entonces, para muchos, quienes comenzaron a responder esas dudas ya no eran desconocidos en la web, amigos o, peor, extraños, sino que quienes estaban al otro lado del teléfono eran expertos, como personal médico, abogados, especialistas en salud pública, psicólogos, enfermeros, trabajadores sociales, entre otros.
Las cifras, como reza el dicho, hablan por sí solas. La página ha sido visitada 1’355.983 veces. El 41,7 % de los s se identifican como mujeres y 58,3 %, como hombres.
Y para el caso que nos compete hay que decir que el 75,4 % de las personas que consultan son menores de 24 años, el grupo poblacional objetivo del Programa Distrital de Prevención de Paternidad y Maternidad Temprana.
Varios indicadores han llamado la atención. Por ejemplo, el 76 % de los jóvenes que usan Sexperto.co reportan haber modificado sus practicas sexuales para prevenir infecciones de transmisión sexual y/o embarazos no deseados después de consultar la página. Las preguntas, para muchos ingenuas u obvias, muestran cuánta falta hacía y sigue haciendo invertir en educación (ver recuadro).
Desde esta plataforma no solo se resuelven dudas, sino que también se pueden hacer, pedir y agendar citas médicas de anticoncepción en los 13 puntos de atención de la Red Pública de Salud, con personal médico sensibilizado en derechos sexuales y derechos reproductivos, especializado en trabajo con adolescentes y jóvenes.
“Esta labor innovadora de usar Internet para solicitar citas se realiza por primera vez en el país para la red subsidiada de salud”, dijo el secretario de salud, Luis Gonzalo Morales.
Un caso ejemplar el del profe que redujo el embarazo adolescente
El profesor Luis Miguel Bermúdez en una clase con algunos de sus estudiantes del colegio Gerardo Paredes, en Suba. Foto:Mauricio León / EL TIEMPO
“Esto es un condón, ¿saben cómo se pone?”, dice el profesor Luis Miguel Bermúdez frente a unos 32 estudiantes del colegio Gerardo Paredes, en la localidad de Suba.
Con explicaciones como esta, que a simple vista parece básica, el profesor ha logrado grandes cosas como posicionar la lucha contra las violencias de género en el ámbito educativo, o que en el primer trimestre de 2017, los embarazos adolescentes en esta institución llegaran a cero, cuando llegó a tener hasta ocho niñas embarazadas de los 32 estudiantes que tiene en una sola aula, y 70 de los 700 que puede haber en el colegio.
Con su proyecto ‘La integración curricular de la ciudadanía sexual y el enfoque diferencial y de géneros’, el profesor logró el Premio Compartir al Gran Maestro 2017 y quedó en el grupo de los 10 mejores educadores del mundo según el Global Teacher Prize, conocido como el Nobel de los profesores. Pero, más allá de eso, les ha cambiado la vida a cientos de niños al enseñarles a defender sus derechos sexuales y reproductivos.
Las preguntas que más visitas han recibido son
1. ¿Cuándo debería tener relaciones sexuales por primera vez? (29.834 visitas, 2,54 % del total)
2.¿Cómo sé si soy bisexual? (29.934 visitas, 2,12 %)
3.¿Eyacular por fuera previene el embarazo? (22.511 visitas, 1,91 %)
4.¿Se pueden usar dos condones al mismo tiempo? (13.827 visitas, 1,18 %)
5.¿Puedo contraer infecciones de transmisión sexual a través del sexo anal?
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