Al tiempo que se conocieron detalles iniciales de la
reforma pensional que busca hacer el gobierno del presidente
Gustavo Petro, también se registraron las primeras reacciones a la iniciativa que se espera presentar ante el Congreso de la República en la primera legislatura del 2023.
Uno de estas reacciones fue la del exministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry, quien a través de su cuenta oficial de Twitter calificó esta reforma pensional como un “desastre mayúsculo”.
“Traslada 85 por ciento de las cotizaciones al régimen público, seca las AFP y el mercado de capitales, se gasta ese ahorro en subsidios, aumenta el déficit del sistema y su efecto fiscal, pues no hacen cambios paramétricos que reduzcan el déficit”, fueron los puntos negativos que destacó Echeverry de esta iniciativa.
Por el contrario, la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, aseguró que esta es una “reforma estructural, no es una reforma paramétrica, lo que estamos buscando es cómo generar mayor cobertura, para que todos los adultos mayores que hoy están por fuera de la posibilidad de tener una vejez digna, tengan unos elementos que les permitan a través del apoyo del Estado liberar sus recursos y así potenciar una vejez con dignidad y que no vivan de la caridad de sus familias”.
De acuerdo con el Ministerio de Trabajo, la reforma pensional propuesta, que se discutirá en una subcomisión que estará integrada por representantes del sector gremial, sindicatos y el Gobierno nacional, se basa en tres pilares:
Pilar solidario: con una renta básica correspondiente a medio salario mínimo legal vigente y que cobijará a las personas que no alcanzan a obtener una pensión.
Pilar contributivo: para las personas que devengan hasta cuatro salarios mínimos y harán sus aportes obligatorios al régimen de prima media istrado por Colpensiones.
Pilar complementario: para personas que tienen ingresos por encima de los 4 salarios mínimos que hacen aportes adicionales al Régimen de Ahorro Individual de las as de Fondos de Pensiones y de Cesantías (AFP).
"La reforma está pensada en la solidaridad y como enfoque en los derechos, no en la rentabilidad económica en donde la dignidad del adulto mayor debe ser protegida por el sistema dándole un ingreso solidario y universal a la población”, aseguró el viceministro encargado de Empleo y Pensiones, Juan Carlos Hernández.