Los refugios para animales pertenecientes a la ciudad de Los Angeles, ubicados en el estado de California, Estados Unidos, enfrentan una grave crisis al estar ocupados al 203% de su capacidad, lo que genera que ya no tengan más lugar para recibir a los perros que necesitan un espacio.
Los perros que vivían juntos en una jaula, en condiciones insalubres y rodeados de suciedad, fueron captados en cámara por voluntarios y grupos de rescate, y las imágenes rápidamente llamaron la atención de los internautas. A lo largo del territorio de Los Ángeles, cerca de 1.500 perros ocupan las instalaciones de los seis refugios que pertenecen a la ciudad, los cuales solo tienen espacio para la mitad.
La situación empeora a medida que más
perros son llevados a los refugios por voluntarios, que instantáneamente a las personas a adoptarlos, ya sea transitoriamente o permanentemente. La
Lista Roja de Alerta de Servicios para Animales de Los Ángeles reúne actualmente a 104 perros que, de no ser adoptados por una familia, serán sacrificados, con fecha límite fijada para el 2 de junio.
Más de 300 grupos de rescate trabajan actualmente con los Servicios de Los Ángeles para la crianza de los animales, pero aún no es suficiente para enfrentar la grave crisis que pone en peligro la vida de cientos de perros. No obstante, de acuerdo a NBC News, el 90 por ciento de los animales de la Lista Roja de Alerta, que figura detallada en el sitio web oficial del Servicio de Animales de L.A., son rescatados o adoptados antes de ser sacrificados.
La medida inmediata para luchar contra la crisis de los refugios
La directora del grupo de rescate de animales Blue Man Dog, Mia Gyzander, en conjunto con voluntarios, rescatistas y entrenadores, crearon el Foster South LA con el objetivo de mitigar la tensión en los abarrotados refugios de la ciudad. Semanalmente, visitan los centros de refugio para controlar el estado de los animales y contribuir con los recursos que pueden brindar.
En diálogo con el medio anteriormente mencionado, Gyzander explicó la grave situación que enfrentan en la ciudad. "La mayoría de estos perros han estado en casas y ahora se sientan en sus propias heces, encerrados con otros perros, que pueden no ser muy amigables porque no hay espacio y el volumen de ladridos es un ambiente tan estresante que es realmente horrible", sostuvo.
En esa línea, explicó la solución inmediata que puede aliviar la problemática. "Adoptar o acoger es lo inmediato que hay que hacer, claramente, correr la voz, hablar con otras personas y estar al tanto de lo que está sucediendo hoy en nuestros refugios porque esto es una crisis", remarcó.