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San Judas Tadeo, el patrón de las causas imposibles: ¿qué se le pide y cuando inicia su novena?

Su madre era María de Cleofás, prima de la Virgen, lo que lo hace primo de Jesús y hermano de Santiago el Menor.

El apóstol es originario de Galilea y considerado pariente cercano de Jesús. Foto: X: @sanjudastadeopa

PeriodistaActualizado:
San Judas Tadeo es uno de los santos más venerados por los creyentes, especialmente en periodos de tristeza y dificultad. La novena del patrono de las causas imposibles inició el pasado 19 de octubre, y tiene como objetivo preparar a los devotos para su fiesta, celebrada el día 28 de este mes.
Conocido en la tradición católica por asistir a quienes enfrentan situaciones desesperadas, San Judas Tadeo fue uno de los 12 apóstoles de Jesucristo.
Es importante destacar que no debe ser confundido con Judas Iscariote, el apóstol que traicionó a Jesús, razón por la cual se le llama "San Judas" o "Judas el fiel" en la tradición religiosa.
Es importante recordar que no se trata de Judas Iscariote, apóstol conocido por traicionar a Jesus. Por ello, la Iglesia Católica lo nombró “San Judas” o “Judas el fiel", con la intención de evitar la confusión.

La historia de San Judas Tadeo

San Judas Tadeo Foto:Cortesía

El apóstol es originario de Galilea y considerado pariente cercano de Jesús. Según las escrituras bíblicas y el sitio ‘web’ Vatican News, el padre del santo era Alfeo, hermano de san José.
Por otro lado, su madre era María de Cleofás, prima de la Virgen, lo que lo hace primo de Jesús y hermano de Santiago el Menor. A pesar de vivir en un contexto social en el que los cristianos eran perseguidos por sus creencias, dedicó su vida a predicar el evangelio, siendo decapitado en Persia.
Judas, proviene del hebreo Yehuda, que significa “alabanzas a Dios”, mientras que Tadeo, es de origen arameo y se traduce como “el valiente”.

¿Qué se le pide a San Judas Tadeo?

Usualmente, la oración a San Judas Tadeo es proclamada cuando los creyentes se encuentran atravesando momentos de dificultades económicas, emocionales, laborales, de salud, seguridad y familiares.
Tal y como lo afirman las sagradas escrituras, su intercesión es solicitada cuando los recursos humanos y terrenales son ineficientes para solucionar una eventualidad.
Su reputación como el santo de las causas imposibles se consolidó a través de la visión de Santa Brígida de Suecia, quien afirmó que Jesús le sugirió orar a San Judas en momentos de gran dificultad.

Oración a San Judas Tadeo para casos imposibles y desesperados

¡Oh venerado San Judas Tadeo! Siervo fiel y amigo de Jesús. Muchos son los que te honran y te invocan en el mundo entero, como el patrón de los casos imposibles y de las causas desesperadas. Ruega por mí, que me siento tan impotente y solo.
Por favor, consígueme ayuda visible y rápida. Ven pronto en mi auxilio en este momento de gran tribulación que aflige a mi alma para que pueda recibir el consuelo y la ayuda del cielo en todas mis necesidades, pruebas y sufrimientos, particularmente en esta (realiza aquí tu petición) y que pueda alabar a Dios contigo por siempre.
Te prometo, bendito San Judas Tadeo, que siendo siempre conscientes de este gran favor que me alcanzarás, que siempre te honraré como mi poderoso patrono especial, y fomentaré con enorme gratitud, tu maravillosa devoción. Amén.
¡Oh gloriosísimo apóstol San Judas! Siervo fiel y amigo de Jesús. El nombre del traidor que entregó a tu querido Maestro en manos de sus enemigos ha sido la causa de que muchos te hayan olvidado, pero la Iglesia te honra y te invoca universalmente como el patrón de los casos difíciles y desesperados.
Ruega por mí que soy tan miserable, y has uso de ese privilegio especial a ti concedido de socorrer visible y prontamente cuando casi se ha perdido toda esperanza.
Ven en mi ayuda en esta gran necesidad, para que reciba los consuelos y socorros del cielo en todas mis necesidades, tribulaciones y sufrimientos, particularmente en la que te presento a continuación. (Haga aquí cada una de sus súplicas)
Alcánzame lo que humildemente te pido para que pueda siempre, con todo mi ser y todo mi corazón, bendecir y alabar a Dios contigo y con todos los escogidos por toda la eternidad.
Te prometo, glorioso San Judas, acordarme siempre de este gran favor y nunca dejaré de honrarte como a mi especial y poderoso protector y hacer todo lo que pueda para fomentar tu devoción.
Amén.
San Judas, ruega por nosotros y por todos los que te honran e invocan tu ayuda.
Rezar el Padrenuestro, Ave María y Gloria (3 veces).
JOHAN STEVEN GUERRERO.
EQUIPO ALCANCE DIGITAL.
EL TIEMPO.

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