Lo que pudo ocasionar el accidente de un bus que dejó 5 personas muertas en Caparrapí

Este lunes se confirmó la muerte del conductor de la flota, quien se suma a otros cuatro fallecidos.

Accidente de tránsito en Caparrapí, Cundinamarca Foto: Bomberos de Cundinamarca

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Angel Nicolas Diaz Malpica

30.12.2024 16:07 Actualizado: 30.12.2024 16:19

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A cinco ascendió el número de personas fallecidas en el accidente de tránsito que se presentó en el municipio de Caparrapí, Cundinamarca. La última víctima fatal es José Francisco Cifuentes Beltrán, el conductor del bus que cayó a un abismo mientras cubría la ruta que conduce de la cabecera municipal a la vereda La Azauncha.

Hacia las 7:00 de la mañana del pasado domingo se presentó un siniestro vial en el sector conocido como Mata de Plátano, zona rural de Caparrapí. Una buseta de la empresa Rionegro – Expreso Gómez Villa sufrió un accidente en extrañas circunstancias en la que rodó por un abismo de 200 metros. El vehículo llevaba a bordo nueve pasajeros y el conductor, de los cuales cinco resultaron con heridas graves y otros cinco fallecieron.

Accidente vía de luseta de la flota Rio Negro, que cubría la ruta del municipio Caparrapi. Foto:Bomberos Cundinamarca.

“El último reporte es del conductor, quien infortunadamente fallece en el hospital de La Dorada, Caldas, debido a las múltiples complicaciones por su estado de salud”, dijo Álvaro Farfán, capitán del Cuerpo de Bomberos de Cundinamarca.

Hacia las 7:00 de la mañana del lunes, el Cuerpo de Bomberos de Cundinamarca confirmó el fallecimiento de José Francisco Cifuentes, el conductor de la buseta, quien tenía 45 años. En un primer momento, Cifuentes fue la primera persona conducida a un centro asistencial. Fue trasladado en ambulancia al hospital de La Dorada, Caldas, para recibir atención más especializada debido a sus heridas.

Aunque durante los dos días su pronóstico se mantuvo bajo reserva, las heridas del accidente le provocaron la muerte. Al momento de ingresarlo al centro asistencial, el personal médico le practicó una prueba de alcoholemia en sangre para verificar si se encontraba bajo los efectos del licor, resultado que todavía no se conoce.

Al respecto, las autoridades municipales y departamentales adelantaron las investigaciones correspondientes para determinar las causas del accidente. Por un lado, en la tarde del domingo desde la gerencia de la empresa de transporte intermunicipal se atribuyó como causa del accidente el mal estado de la vía terciaria que conecta varias veredas con el pueblo de Caparrapí.

Esta versión fue inmediatamente rechazada por el alcalde del municipio, Andrés Ardila Sánchez, quien le dijo a EL TIEMPO que las condiciones de la carretera son óptimas.

“Acabo de hablar con el gerente de la empresa de transporte por vía telefónica, porque ya me iba poniendo de mal genio. Desde ayer le dije que no viniera a manchar el nombre de la istración ni el mío. La vía está en buenas condiciones”, le contó el mandatario a este diario.

Ardila dijo que hace tan solo dos meses la istración municipal adelantó acciones de mantenimiento en esa vía, por lo cual descarta que el accidente haya sido por condiciones de infraestructura vial.

“Hace como dos meses hicimos labores con la motoniveladora y tiene buen recebo. Ni siquiera está liso el suelo como para decir que el carro patinó”, aseguró Ardila.

Por su parte, defiende que la verdadera causa del accidente fue una falla mecánica o un error humano cometido por el conductor de la buseta. El alcalde dijo que recibió información de un conductor que pasaba cerca de la flota minutos antes del accidente en la curva.

De acuerdo con el testimonio, el vehículo venía desestabilizándose de su camino y no conducía de manera recta. No se atribuye exceso de velocidad, pues, dice Ardila, en ese tramo no se puede superar los 40 kilómetros por hora.

“Alguien que venía en una moto atrás de la flota vio que en varias ocasiones se había intentado salir de la placa huella. Pudo haber sido un microsueño, una distracción o una falla del vehículo. Eso fue en una parte plana”, explicó.

Los peritos de la Policía de Tránsito de Cundinamarca llegaron hacia las 11 de la mañana de este lunes al lugar de los hechos para verificar las causas del accidente. Según el alcalde, “en la parte de atrás de la carretera se ve la llanta trasera marcada y más adelante se ve el cabrillazo que da el conductor cuando se sintió saliéndose de la vía, pero ya fue demasiado tarde”.

Abismo en el que cayó la buseta en Caparrapí, Cundinamarca Foto:Bomberos de Cundinamarca

Estas hipótesis están siendo estudiadas todavía por los expertos e investigadores de las autoridades municipales y departamentales.

El conductor se suma a las otras tres personas que fallecieron y que fueron identificadas inmediatamente en el lugar como víctimas fatales, entre ellas Yulmary Tovar, quien era una niña de tan solo 3 años; Lucila González, de 60 años; y Otilia Camacho, de 27 años.

Las otras siete personas fueron conducidas de inmediato al Hospital San José en Caparrapí. En el transcurso del domingo se confirmó el fallecimiento de otro de los pasajeros por consecuencia del accidente justo al ingresar al servicio de urgencias local.

Al momento, Ardila confirmó que, de los cinco sobrevivientes, un adulto mayor de 72 años se encuentra en estado crítico, mientras que las otras cuatro personas se encuentran estables en recuperación en el centro médico del pueblo.

NICOLÁS DÍAZ MALPICA

Escuela de Periodismo Multimedia EL TIEMPO

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