José Manuel Martínez Malaver, el director de la seccional Bogotá de la Fiscalía General de la Nación, en entrevista con EL TIEMPO, habló sobre los temas que le inquietan en la capital del país. ‘Tierreros’, hurto de bicicletas, hacinamiento en las URI, delitos sexuales y homicidios son algunas de sus principales preocupaciones.
Las invasiones ilegales instaladas en zonas de riesgo como Altos de la Estancia, en Ciudad Bolívar,
o Entrenubes, en Usme y San Cristóbal, son una prioridad para Martínez.
Por esta razón conformó un equipo especial de fiscales, con analista incluida, para entender mejor este fenómeno y lograr desarticular desde sus cabezas a las estructuras delincuenciales detrás de este delito.¿Quiénes son y cómo están combatiendo a los ‘tierreros’?
Tenemos un grupo de fiscales que ha trabajado el tema históricamente en la Fiscalía. Ellos estaban investigando el tema aisladamente, estábamos más con el aspecto técnico, pero como es un fenómeno criminal tan importante e histórico que nos está produciendo microtráfico y homicidios, decidimos tratarlo como un asunto de organizaciones criminales. Hicimos enlace con Hugo Acero, secretario de Seguridad, y en la Secretaría del Hábitat nos dieron capacitaciones técnicas. La idea es que vayamos detrás de la organización, no podemos decir que es tal o tal persona, porque estamos estructurando el tema, pero sí estamos viéndolo con enfoque contextual, no puede ser aislado.
¿Se confirmó la participación de funcionarios públicos, contratistas, en estas bandas?
Sí hemos encontrado que puede haber participación de funcionarios distritales, y pues es un negocio de personas que se han especializado en apropiarse del tema, porque le venden a gente pobre y les dicen que no los van a sacar y que van a recibir ayudas. Hay diferentes modus operandi, y lo delicado es que están asociados a muchos homicidios que hemos esclarecido en Bogotá. Acá esclarecemos homicidios semanalmente, tenemos un alto índice de esclarecimiento, estamos casi en el 39 por ciento.
La alcaldesa Claudia López y el secretario de Seguridad, Hugo Acero, han hablado de que habría estructuras paramilitares detrás de este fenómeno…
La alcaldesa lo ha dicho, pero lo que podemos decir es que son estructuras dedicadas a esto.
Sí hemos encontrado que puede haber participación de funcionarios distritales, y pues es un negocio de personas que se han especializado en apropiarse del tema
¿Qué han encontrado hasta el momento?
Lo que hemos visto es que los ‘tierreros’ son un fenómeno macrocriminal en la ciudad, y que tiene varias prácticas criminales y modus operandi, eso es lo que estamos descubriendo, y la idea es empezar a encontrar las cabezas.
¿Cuándo puede haber los primeros resultados?
En unos dos meses tendremos resultados, la Fiscalía es consciente del drama humano del desalojo, y en los operativos que hace la alcaldía hemos logrado recopilar muy buena información, la gente se ha acercado a la Fiscalía a entregar información.
Confían, eso ha sido muy importante porque ha sido un tema de años, puede haber complicidad de funcionarios públicos, pero hemos tenido presencia del CTI en distintos operativos. Queremos dar el paso de dejar la judicialización individual, y que lo que vaya a ingresar por ‘tierreros’ no entre por URI, sino directamente a este grupo de trabajo especializado. Igual que ocurre con secuestro y extorsión, que de una vez van al Gaula, que lo que llegue de ‘tierreros’ vaya de una vez al equipo especial, sin trámites.
Aparte de este tema, ¿qué le preocupa en Bogotá?
A propósito del direccionamiento estratégico del Fiscal General de la Nación, nos preocupa mucho el hurto. El de bicicletas, a personas y también nos preocupa la temática de niñas, mujeres y adolescentes víctimas de delitos sexuales. Estamos trabajando para dar respuesta inmediata. Menor de edad víctima, menor de edad que trabajamos como acto urgente. Otro asunto prioritario que tenemos es el de corrupción en contratación, tenemos una estructuración, así como priorizamos ‘tierreros’, creamos un grupo de fiscales para contratación en Bogotá que tiene un apoyo importante en investigación.
¿Cómo va la relación con la istración Distrital y la Mebog?
Uno de los éxitos que tiene la Fiscalía en materia de seguridad ciudadana en Bogotá es que siempre hemos trabajado articuladamente con la Policía y la autoridad distrital, respetando competencias; nosotros vamos de la mano, por eso es que tenemos un éxito importante en desarticulación de organizaciones criminales, trabajamos con Sijín y CTI, siempre de manera articulada. Siempre hemos sido uno solo, principalmente con la Policía, con el general Óscar Gómez. En delitos sexuales también tenemos una buena relación con la Secretaría de la Mujer, y trabajamos de la mano con el doctor Hugo Acero, que ha tenido propuestas interesantes.
¿Cómo va el asunto de homicidios?
Esclarecemos 14 homicidios semanalmente, tenemos un alto índice de esclarecimiento, estamos casi en el 39 %, lo que pasa es que con el hecho que pasó en la cárcel La Modelo (23 muertos tras amotinamiento el pasado 21 de marzo) se nos dispararon las cifras. Por ejemplo, la semana pasada fue histórica, se esclarecieron 16 casos de 23. Nosotros no vamos a parar. Lo hemos hablado con Sijín y CTI, porque si no, se disparan los indicadores delictivos. Vamos a continuar y hay proyecciones para las próximas semanas de organizaciones criminales. Solo en este mes hemos desarticulado 13 bandas y hecho 66 capturas, y en eso trabajamos con Policía y la alcaldía.
Hay hacinamiento en las URI y estaciones de Policía, ¿qué salidas ve a esta situación?
Es un asunto que hemos trabajado mucho. Nosotros, la Fiscalía, tiene salas de paso, las tenemos por 36 horas para resolver la situación de la persona capturada, sea en flagrancia u orden de captura. Ahí el fiscal ordena libertad o un juez de garantías impone medida de aseguramiento y el detenido tiene que salir de la sala de paso en 36 horas, pero, desafortunadamente, se desquició el tema, tenemos la sala de paso de la URI de Kennedy, que es una carceleta que maneja la Policía de Vigilancia y hemos tenido dificultades, hay 109 personas hacinadas.
¿Qué pasó con el contagio de covid-19 en esta URI y cuál es la situación de las demás?
Gracias a Dios se superó la problemática del covid-19. En Puente Aranda hay dos celdas, una de Dijín desbordada, que tiene criminales de alta peligrosidad; otra en otro piso de la Policía de Vigilancia, que está hacinada, y lo que era el CTP, que abrieron, ahora está hacinado. En Engativá tenemos una sala de paso para detenidos del CTI. Es complicado, la Fiscalía ha buscado todos los escenarios para poder salir adelante, hemos revisado, pero la verdad es que las personas que están detenidas es porque sí deben estar con detención intramural.
Siempre seguimos las directrices del Fiscal General, quien ha sido muy estricto en el respeto de las garantías, a los fiscales se les revisan muy bien las no privativas de la libertad, les hacen el test de suficiencia, la domiciliaria, pero la verdad, estas personas sí tienen que estar ahí.
ÓSCAR MURILLO