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Con tutela buscan que se aplique eutanasia a paciente en Cali
Víctor Escobar sufre de enfermedades no terminales, pero ruega por morir con dignidad.
Víctor Alfonso Escobar Prado pide que le dejen una muerte digna. Foto: Archivo particular
Desde hace más de dos años empezó el sufrimiento para quien era conductor de carros de carga y que debió dejar el volante perseguido por enfermedades y hasta un grave accidente
El trámite en busca de una eutanasia ha sido complicado porque los dictámenes médicos indican que no tiene enfermedad terminal. Una sentencia de la Corte Constitucional le abrió la esperanza porque comprende a quienes pasan por una situación de agobio que lleva a la crueldad.
En la espera, Escobar, quien es padre de cuatro hijos, recibe el respaldo de su compañera Diana Nieto.
En la juventud, Víctor Alfonso Escobar Prado era conductor de tractomula. Movía cargas como cemento y otros materiales hacia el centro del país o en rutas al puerto de Buenaventura. De una primera unión tuvo a sus tres hijos.
La primera contingencia para su salud se presentó hace unos 36 años. Tenía 24 años de edad. Fue cuando se le rodó el carro a un compañero y él quedó aplastado contra su tractomula. En el impacto se le salió parte de los intestinos por la ingle.
Debió ser sometido a tres cirugías de columna. La recuperación fue lenta, pero con los meses pudo regresar al trabajo con cambios en su actividad.
Hace unos 15 años conoció en una librería a Diana Nieto, su actual compañera y ambos siguieron la crianza de una hija de ella. La situación de salud no era tan crítica.
Aparte de conducir carro también le tocaba entrar a un laboratorio a dar apoyo. Pero empezó a sentirse mal. Ahora dice que pudo ser el asbesto, el nombre de seis minerales de origen natural que existen en el medio ambiente, con usos comerciales e industriales.
En el ámbito de la salud se considera como un cancerígeno humano cuando es inhalado y se instala en los pulmones. La tos era frecuente.
Víctor Escobar espera respuesta a su petición de eutanasia. Foto:Archivo particular
En octubre de 2007 le dio el primer accidente cerebrovascular, que se produce cuando un coágulo o masa grasa obstruye el suministro de sangre hacia el cerebro. En enero de 2008 le repitió.
Entonces quedó una hemiparesia derecha (condición neurológica que dificulta el movimiento de una mitad del cuerpo). También por el agrandamiento del lado derecho del corazón.
Perdió memoria y debió acudir a terapias de reconocimiento. Debió aprender hasta a comer.
El cuadro se complicó cuando le diagnosticaron Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (Epoc), que le ha llevado a episodios de sangrado.
En 2015 entró al quirófano por una nueva cirugía de columna. A ello se agregó la diabetes e hipertensión.
Hace dos años, al escuchar sobre la eutanasia, el hombre decidió que no podía vivir así. Pero no era sencillo que ese trámite se pudiera completar porque sus enfermedades no eran terminales.
Soy Diana @Eutanasia16 amig@s con pena les escribo ya que siempre por necesidad me tengo que valer de ustedes Llevaba a mi esposo a bañarlo y se me cayó la silla con mi celular y se me partió la pantalla, por favor quién me pude ayudar para arreglarlo Lo necesito urgente gracias. pic.twitter.com/67PYydu6yK
Los esposo Víctor y Diana en su lucha por la eutanasia Foto:Archivo particular
"Cuando él me dijo, me asuste. Le dije pero cómo me va a dejar sola. Luego me explicó sus razones y ahora le ayudó porque no quiero verlo sufrir", dice Diana Nieto, quien ha acudido a las redes para pedir el apoyo para Víctor y contingencias como que se le quebró el celular y lo requieren para seguir en el o y las diligencias necesarias.
Desde su casa en el barrio Mojica los dos empezaron a pensar cómo buscar ayuda y pensaron en una especie de campaña por la eutanasia de Víctor Escobar.
Fue en febrero de 2020 cuando abrieron cuentas en redes sociales para dar a conocer esa petición.
La eutanasia sería un descanso tanto para mí, como para mi familia y las personas que acompañan mi petición"
Pero el decir que se quiere ejercer el derecho a morir dignamente es recibido con incredulidad y hasta con objeciones de conciencia de quienes tenían relación con ese trámite.
A sus 60 años, don Víctor recobró la esperanza en julio en una sentencia de la Corte Constitucional que amplió el derecho fundamental a morir dignamente a personas que afrontan enfermedades no terminales, le permita cumplir su voluntad.
El pasado viernes 3 de septiembre les llegó el documento de una Empresa Prestadora de Salud (Eps), en el que se radica el 'procedimiento eutanásico'. "Sería un descanso para mí, mi familia y las personas que acompañan", dice Escobar, pero la espera no se ha terminado.
El pasado 27 de junio, Escobar informó que se le había negado el derecho a morir dignamente. A través de una valoración en una clínica, la junta médica determinó que no era terminal. Su caso es de un paciente degenerativo.
El 25 de julio la sala plena de la Corte Constitucional, por una votación de 6 contra tres 3, acogió una modificación sobre la eutanasia en Colombia. De acuerdo con la providencia, ese derecho fundamental a morir dignamente cubre también a pacientes que no tienen enfermedades terminales, pero que a causa de sus padecimientos sufren de intensos dolores y condiciones.
El representante a la Cámara Juan Fernando Reyes sostiene que "Víctor ya tomó su decisión. Eutanasia ya....Hoy depende de su esposa para bañarse, vestirse y comer. Además, necesita medicinas para soportar el dolor luego de sufrir dos accidentes cerebrovasculartes y tener una movilidad limitada. Su derecho y su voluntad de morir ha sido ignorada".
El abogado Luis Giraldo Montenegro Foto:Archivo particular
El abogado Luis Giraldo Montenegro asumió la causa de Víctor Escobar e instauró una tutela.
Piensa que "es importante que quienes atienden el caso (jueces, secretarios, médicos, enfermeros, psicólogos) informen si tienen alguna objeción de conciencia. La voluntad de Víctor es clara y es morir dignamente".
La Corte, con ponencia de Diana Fajardo, señala que las enfermedades incurables deben ser diagnosticadas por un médico. Para solicitar la eutanasia debe existir consentimiento del paciente ‘libre’ e ‘informado’. En la decisión se orienta a ‘no obligar a vivir’ a quien está bajo ‘intensos sufrimientos’ pues, incluso, esto recaería en la ‘crueldad’.
El 20 de septiembre cuando era la cita, la doctora no conocía esa petición, dice Diana, quien acompaña en cada instante de dolor y súplicas a su compañero.
Es importante que quienes atienden el caso (jueces, secretarios, médicos, enfermeros, psicólogos) infórmen si tienen alguna objeción de conciencia"
De acuerdo con el artículo 106 del Código Penal, para 'el homicidio por piedad o eutanasia' se debe tener el consentimiento libre e informado, previo o posterior al diagnóstico del sujeto pasivo del acto, y siempre que el paciente padezca un intenso sufrimiento físico o psíquico, proveniente de lesión corporal o enfermedad grave e incurable”.
La frase del paciente es: "La eutanasia es el adelanto de lo que está por venir. La verdad quiero un descanso ya. Día y noche me siento muy mal. No quiero más sufrimiento".