El Monumento a la Resistencia está ubicado sobre un separador vial, entre dos casetas y dos comunas.
Esta es la escultura que fue inaugurada el 14 de junio de 2021 y está compuesta por una mano que abraza un cartel en el que aparece la palabra ‘Resiste’, como un tributo a los manifestantes de la capital vallecaucana muertos y heridos durante el paro nacional, el cual comenzó el 28 de abril y duró hasta entrado el segundo semestre del año pasado.
Pero casi un año después, el monumento queda, de nuevo, en medio de una controversia, en el sector de Puerto Rellena,suroriente de la ciudad. Dos inspecciones de Policía, en cada comuna, tienen pedidos para recuperar el espacio público.
Desde que se erigió con los nombres de algunos de los jóvenes que murieron durante el paro, alcanzando más de 10 metros de altura, ciudadanos y concejales han venido insistiendo en que se debe tumbar, debido a que, según ellos, no cumple con la normatividad.
De igual manera, el 26 de junio, cuando se cumplió el desbloqueo de la zona, la Fuerza Pública esperaba desmontarlo. Ahora se habla de su demolición. Sin embargo, el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, asegura que no tumbará ni destruirá el Monumento a la Resistencia y no existe una orden para demolerlo.
El concejal Roberto Rodríguez, del Centro Democrático, sostiene que “la orden del inspector de Policía Especial, en favor de los caleños, dicta la recuperación del espacio público y la remoción de bienes que lo ocupan en la calle 36 entre carreras 46 y 48”.
El alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, asegura que no tumbará ni destruirá el ‘Monumento a la Resistencia’ y no existe una orden para demolerlo
Ospina afirma: “No vamos a demoler. Lo que sí queremos es ordenar. Nos parece que si el espacio se ordena y regulariza, va a tener mucha mayor fuerza y vitalidad. Queremos que exista toda una plataforma cultural y de emprendimiento alrededor del monumento, que tiene permiso por parte de la Alcaldía”.
Calificó de irresponsable que alguien agite la idea de que la Alcaldía demolerá un monumento con permisos.
Dice que en el sitio podría darse un proyecto cultural, emprendimiento y servicio. “Un espacio que no sea tugurial y le pueda brindar a quienes levantaron el monumento un sitio para construir ciudad de responsabilidades compartidas”, expresa Ospina.
“Ningún inspector de Policía ha ordenado la demolición o retiro del monumento que jóvenes erigieron en el estallido social del paro nacional”, expresa el secretario de Seguridad y Justicia de Cali, Carlos Soler, tras conocer el fallo en primera instancia del inspector de Policía de la comuna 12, pero aclara que no es el monumento, sino las casetas al lado derecho del mismo.
El inspector, según Soler, ordenó la demolición y retiro de las casetas, basándose en peticiones que entre diciembre y enero hicieron ciudadanos, así como la Defensoría del Pueblo, la Personería y la Procuraduría. Pero el monumento tiene permiso de Planeación.
Un segundo inspector, en la comuna 11, tiene pendiente fallo sobre las casetas de lado izquierdo.
Soler dice que la primera instancia para dirimir estos casos son inspectores y corregidores, y él como titular de Seguridad y Justicia dilucida la segunda instancia con un nuevo fallo. “Analizo si confirmo o modifico el fallo o busco la resolución alternativa de conflictos”.
El director de Planeación de Cali, Roy Barreras, manifiesta que el monumento tiene autorización y se ha buscado diálogos para aclarar su permanencia.
‘La Calle del sabor’
No cesa la controversia por la Carpa de la carrera 50 con calle Quinta, cerca del barrio El Lido.
Vecinos piden a la Alcaldía un debate y atención a sus derechos a la tranquilidad y el bienestar, por el ruido de eventos masivos, que se vienen realizando desde hace cuatro años en la carpa instalada en el lote de la calle Quinta, en el sur de Cali.
Sostienen que los conciertos de música y actividades de candidatos al Congreso y a la Presidencia de la República los dejaron ensordecidos.
La queja llegó al alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, quien anunció controles y anotó que “no se pueden impedir en cualquier espacio los espectáculos porque la ciudad también debe ser constructora de un escenario donde eventos y conciertos se puedan desarrollar”.
Ante la situación, la comunidad insiste en una audiencia pública, pues considera que dichas acciones populares y tutelas en cuatro años no han tenido efecto.
Carlos Paz, empresario y gestor de la Carpa La 50, ha planteado que hay personas que se propusieron desvirtuar la iniciativa. Sostiene que tienen los permisos.
La concejala Diana Rojas propuso un cabildo abierto con delegados de las secretarías de Seguridad y Salud, y Planeacióndistritales y del Dagma.
En el Dagma dicen que una de las zonas de más quejas por ruido en Cali está en el sur, en las comunas 17 y 19.
CALI