Después de más de un año de confrontaciones que dejaron muertos, heridos, capturados y desplazados en la
comuna 13 (San Javier), de Medellín, se prendió una luz de esperanza para tener una pizca de tranquilidad.
El Comité de Derechos Humanos de esta comuna del occidente de Medellín informó que las estructuras criminales que allí delinquen llegaron a un acuerdo para el cese del fuego y para repartirse las rentas criminales.
“Esta guerra dejó más de 170 personas asesinadas, 200 personas lesionadas y 700 personas desplazadas; los grupos armados ilegales han llegado a un acuerdo entre ellos, donde se reparten el territorio, las plazas y la extorsión”, manifestó James Zuluaga, coordinador del Comité.
Sin embargo, cifras del Sistema de Información para la Seguridad y la Convivencia (Sisc) indicaron que el año pasado, en esta comuna, fueron asesinadas 91 personas mientras que en 2017 las víctimas mortales fueron 48. Este año, a la fecha, van 6 homicidios, un caso menos que los que llevaba la comuna en la misma fecha, el año pasado.
Los grupos armados ilegales han llegado a un acuerdo entre ellos, donde se reparten el territorio, las plazas y la extorsión
Para Zuluaga, si bien lo ideal no es que este anuncio de paz se logre por decisión de los grupos armados, es positivo que cesen las muertes violentas en la zona.
“Hasta donde sabemos, se está dando en la comuna 13, pero creemos que se puede dar en todo Medellín. Desde hace varios días no se han presentado balaceras ni hechos violentos en la zona. Y muchas personas nos manifestaron esta decisión de los ‘combos’ cuando hacíamos recorridos por los barrios”, expresó el defensor de derechos humanos.
Añadió Zuluaga que todo lo que genere tranquilidad a la comunidad de San Javier es bienvenido, pero hizo un llamado a la institucionalidad para que no baje la guardia en la lucha contra las estructuras criminales.
“Cuando estos grupos generan este tipo de acuerdos lo que hacen es fortalecerse. Sabemos que el Estado ha generado presión y eso creo que los obligó para que se sentaran a negociar estos acuerdos”, manifestó el coordinador.
Incluso, el líder social añadió que según se habla en la comuna, la orden habría venido desde los cabecillas de los grupos de delincuencia organizada (GDO) que están en la cárcel.
Cabe recordar que, según la secretaría de Seguridad, en la comuna 13 hay enfrentamientos entre cuatro
estructuras criminales:
el ‘Coco’ contra la ‘Agonía’ en la parte baja de la comuna y la ‘Torre’ contra ‘Betania’ en la parte alta.“Lo que hacen es ponerse de acuerdo sobre quién maneja la extorsión en distintas zonas y se distribuyen el control territorial”, explicó Zuluaga, quien añadió que el último pacto que se firmó en la ciudad fue en 2013 y duró casi cinco años, por lo que se espera que la tranquilidad dure por varios años.
Sabemos que el Estado ha generado presión y eso creo que los obligó para que se sentaran a negociar estos acuerdos
Por su parte, Andrés Tobón, secretario de Seguridad de Medellín, desmintió el presunto pacto.
“Ayer (jueves) desafortunadamente se presentó un homicidio en la comuna 13, así que evidentemente ese tipo de aseveraciones no tiene ningún tipo de sustento. La realidad es que las estructuras criminales de la comuna 13 están en confrontación por asuntos económicos. Quieren seguir extrayendo y explotar a la ciudadanía. La única tarea dispuesta por las autoridades es clara: seguir combatiendo a todas estas estructuras que es una estrategia que ha venido funcionando muy bien”, aseguró Tobón.
Sustentó su afirmación indicando que en materia de cabecillas solo hace falta capturar a alias ‘Pocho’, por quien hay recompensa económica y quien estaría cerca de ser capturado.
De igual forma, reconoció que la mayoría de homicidios en la comuna 13 han sido por confrontaciones entre estructuras criminales, pero aseguró que las cifras no concuerdan con las 170 que denunció Zuluaga.
DAVID ALEJANDRO MERCADO PÉREZ
Redactor de EL TIEMPO
Medellín