Las graves consecuencias para el Eje Cafetero por la aguda crisis de la EPS Asmet Salud

Luego de que recientemente la Superintendencia Nacional de Salud revelara que la EPS Asmet Salud será intervenida debido a las continuas quejas por la prestación del servicio, los s de esta EPS en el Eje Cafetero están en incertidumbre por los tratamientos, citas médicas y procedimientos que tienen pendientes en la región.

La Supersalud anunció que istrará por un año a Asmet Salud, que tiene 2 millones de s en 12 departamentos.

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En Risaralda, por ejemplo, las deudas con la red pública hospitalaria superan 22.000 millones de pesos, sin contar la cartera que tiene la EPS con entidades privadas y con sus proveedores.

En este departamento hay unos 120.000 afiliados, de ellos más del 90 por ciento pertenecen al régimen subsidiado.

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Olga Lucía Zuluaga, directora de la Asociación de Instituciones de Salud, dijo en medios locales que los pacientes tienen serias dificultades para acceder oportunamente a los servicios de salud y pidió a la Superintendencia que garantice el giro de recursos.

“No podemos decir que no genera angustia a los prestadores, pero esta situación permitirá que el interventor determine el flujo de recursos acorde a la facturación y atención que tienen los s. Esperamos que realmente esa intervención sea para mejorar las condiciones, tanto para la EPS como para los prestadores”, dijo Zuluaga.

Cabe recordar que, en marzo pasado, el hospital universitario San Jorge de Pereira, les prestó atención a los s de esta EPS que tenían dificultades con los servicios médicos que requerían.

Las deudas de Asmet Salud superan los 954 mil millones de pesos. De ahí que la Superintendencia también ordenó la toma de posesión inmediata de bienes, haberes y negocios de la EPS tiene, los cuales se revisarán y se buscará la mejor solución en la intervención.

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En Quindío también hay preocupación. El hospital departamental San Juan de Dios aún atiende a los pacientes de esta EPS, sin embargo, le adeuda es de 2.400 millones de pesos.

“No sabemos qué va a pasar con los tratamientos que veníamos realizando ni con las citas que agendadas, algunas son de especialistas y se demoraron mucho en darnos esas citas. No nos podemos dar el lujo de suspender el tratamiento y de buscar citas particulares por eso pedimos que nos ayuden”, dijo Pilar García, usuaria en Armenia.

La situación en Caldas no es mejor, esta EPS es la que más afiliados tiene en el departamento, 142.857 del régimen subsidiado y 8.090 en el contributivo, y opera en 12 de los 27 municipios.

La falta de pago y los incumplimientos con centros de salud tienen prácticamente desprotegidos a los s. En los últimos días, el Hospital Santa Sofía y la Clínica Ospedale les cerraron la puerta a los afiliados, y eran las únicas entidades de alta complejidad con las que tenía contrato esta EPS en el departamento. Y es que, según cifras de la Personería de Manizales, a diario ponen 2,5 tutelas contra la EPS. Incluso, se habla de que no habrá más salida que liquidar.

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“Está agotada para brindar atención a los s. Con los organismos de control hemos definido reclamar al unísono al Ministerio y la Superintendencia medidas extraordinarias para que esta EPS mejore o se vaya. Desde Manizales el llamado es a que se retiren del todo”, dijo el secretario de Salud de Manizales, Carlos Orozco.

Ante el cierre de servicios con Santa Sofía y Ospedale, en Caldas la EPS solo tiene el apoyo de la red pública; una que se ha declarado de nuevo en crisis por que esta y otras EPS no les pagan. Incluso, esta semana, declararon Asamblea Permanente como protesta.

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Según Mónica Díaz, presidenta de la Asociación de Hospitales de Caldas, la deuda de todas las EPS con la red es de alrededor de 47 mil millones de pesos.

“No tenemos presupuesto para terminar el año, porque este se construye con lo recaudado. Además, ahora tememos que –si se da la liquidación de Asmet Salud– pase lo mismo que con EPS como Medimás que se fueron sin pagarnos. Esa situación nos dejaría mucho peor, así que solicitamos a todos los organismos medidas extraordinarias porque si no nos llegan recursos tendremos que empezar a cerrar servicios”, cerró Díaz.

LAURA USMA CARDONA y LAURA SEPÚLVEDA

Redacción EJE CAFETERO - EL TIEMPO