Comfandi entiende la educación como la herramienta más poderosa para la movilización social. A partir de ahí, la Caja de Compensación tiene un gran objetivo: brindar oportunidades de a una educación integral y de calidad a las familias vallecaucanas para que desarrollen al máximo sus capacidades y construyan un futuro con mayores oportunidades, que les permita la inserción a la vida productiva, e impulsar su movilidad social, su productividad y la de la región.
En un principio, esta meta puede considerarse distante, pero ¿y si el Valle del Cauca y sus habitantes tuvieran a una propuesta educativa enfocada en la empleabilidad, el emprendimiento y la productividad y cuya inversión asciende a los $185.000 millones?
Alejandra Jaramillo, directora de Desarrollo Social de Comfandi, ahonda en la gran apuesta que Comfandi viene realizando:
¿Por qué Comfandi concibe la educación como movilizador del desarrollo social?
Un gran desafío que Comfandi se ha propuesto abordar, y que todo el país padece, es lograr la articulación entre la oferta y demanda laboral, lo que tiene efecto en la productividad de las empresas.
Para Comfandi, una educación pertinente en niños, jóvenes y adultos permitirá suplir las necesidades de las empresas para su consolidación y escalamiento. En este sentido, existe un reto superior y es realizar un ajuste en la oferta educativa, para realizar una transición ágil y consecuente con las dinámicas económicas.
Desde Comfandi, reconocemos la educación de calidad como factor esencial para el desarrollo humano y principal acelerador para un mejor futuro. La educación tiene la capacidad de transformar territorios e impactar positivamente en la sociedad, también promueve la generación de empleo, conectando el talento de las personas con oportunidades que consolidan el tejido empresarial y promueven el desarrollo sostenible de las empresas.
¿Cuáles problemáticas han identificado en el Valle del Cauca?
Una problemática es una oportunidad, y en el Valle del Cauca tenemos la oportunidad de fortalecer el bilingüismo en la población y, en ese sentido, trabajamos implementándolo en nuestra red de colegios y junto a aliados en iniciativas de región como ‘Hello Valle!’, un programa de formación en inglés, alianza con Invest Pacific, Propacífico y Comfenalco Valle para aportar y responder a las necesidades en talento humano, principalmente del sector de Center y BPO.
También es importante lograr que los ámbitos de formación se conecten con las expectativas de los estudiantes y a su vez con las competencias requeridas por los empresarios.
Usted menciona algunas iniciativas de Comfandi, pero todo esto se articula en una gran propuesta
Planteamos una propuesta educativa sistémica, enfocada en la empleabilidad, el emprendimiento, la productividad y en la relación con el entorno, desde un concepto de equidad e igualdad de oportunidades, centrada en el ser, en el saber, en el conocer, en el convivir, en formar ciudadanos globales que, con su pensamiento crítico y acción, generen impactos positivos y transformen el territorio.
Por eso, invertiremos $185.000 millones para el fortalecimiento de nuestra propuesta educativa, que responda a las exigencias de la educación del siglo XXI, orientada a la empleabilidad, al emprendimiento y al mundo productivo.
Una propuesta que contempla, además, la creación de siete Campus E, trascendiendo de colegios tradicionales a ambientes de aprendizaje, donde articularemos las capacidades para habilitar la productividad y movilidad social, y beneficiar a 11.000 personas, que son nuestros afiliados.
¿En qué se invertirán esos $185.000 millones?
En Educación Básica, fortaleceremos las capacidades físicas y tecnológicas, implementando proyectos con énfasis en habilidades STEM (ciencia, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas), bilingüismo, desarrollo de mentalidad emprendedora, formación empresarial y acompañamiento en el desarrollo de habilidades psicoemocionales, psicosociales y socio ocupacionales.
Todo con el fin de potenciar las oportunidades para las nuevas generaciones de líderes vallecaucanos.
En Educación Terciaria (enseñanza superior), adaptamos el currículo de los programas y lo construimos desde una mirada de la formación para la productividad, basada en la necesidad de la dinámica económica de la región y en el talento y las competencias que requiere el sector productivo, acogiendo la visión de los modelos disruptivos en educación, mediante credenciales alternativas que proyectan una conexión entre la oferta laboral y los buscadores de empleo.
Es fundamental fortalecer la implementación de experimentos empresariales diseñados con la participación del sector productivo.
El tejido empresarial vallecaucano ha sido vinculado a varias iniciativas de Comfandi.
¿Cuál es el balance de ese trabajo conjunto?
Comfandi propicia alianza estratégica que contribuyan al cierre de brechas sociales y económicas y al progreso de la región y, a la vez, fortalezcan su propuesta educativa para brindar una educación de alta calidad que permita desarrollar habilidades para responder a las necesidades del contexto.
Con el Comité Intergremial y Empresarial del Valle del Cauca (CIEV) implementamos estrategias que contribuyan a cerrar brechas de capital humano y a la reactivación económica.
Operamos el ‘Programa Integral de Productividad’, que enfoca sus esfuerzos en fortalecer la productividad de las MiPymes a través de la optimización de sus modelos de negocio.
En alianza con Sinergia Tribu y la Universidad Icesi, implementamos modelos disruptivos de educación para dar respuesta a las necesidades de los microempresarios de la región, como es el caso de la ‘Macrocredencial en gestión estratégica’, orientada a la innovación y al diseño de estrategias para mejorar la productividad de los negocios en el ámbito digital, en la que participaron 40 comerciantes del centro de Cali.
¿Cuál es el llamado de la Caja para que surjan más iniciativas, cómo está?
Hacemos un llamado a trabajar juntos Estado, empresa, academia, aliados y comunidades para seguir brindando, lo que la sociedad tanto reclama que es el derecho a la educación de calidad, porque reconocemos su valor en todas las etapas del ser humano y es motor de desarrollo.