En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información aquí

CLUB VIVAMOS
Suscríbete
Disfruta de los beneficios de El Tiempo
SUSCRÍBETE CLUB VIVAMOS

¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo [email protected] no ha sido verificado. Verificar Correo

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión

Hola, bienvenido

¿Cual es la ciudad colombiana clasificada como la más peligrosa del mundo?
¿Cómo va el juicio al expresidente Álvaro Uribe?
¿Accidente de bus en Calarcá?
Frío inusual en Bogotá explicado por el Ideam

Elogio del caldo de costilla de Anita / El condimentario

Sin duda es uno de los platos más reconfortantes de nuestra cocina tradicional.

NO USAR ESTA FOTO

NO USAR ESTA FOTO Foto: Foto / Cortesía

Alt thumbnail

Actualizado:

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon
Colombia es un país de sopas: sancochos, caldos, cremas y potajes hacen parte del menú tradicional local. Es posible hacer un reconocimiento y recorrido por el territorio nacional a través de ellas. Entre todas, hay una que es la dueña de mi panza y corazón: el caldo de costilla.
Este sustancioso manjar que orondo se pasea, a cualquier hora del día, principalmente por las mesas del centro del país, es mágico y poderoso. Cada cucharada es memoria, sabor, sanación, trabajo y dicha. Es una sopa históricamente campesina, que alimenta, da alegría y energía a montones de colombianos.
(También puede leer: Arepaís / El condimentario).
Aunque ahora hay que decir que alimentaba, porque los precios de sus ingredientes, a pesar de ser pocos y cero lujosos, están por las nubes. Al paso que vamos será inalcanzable y ostentosa para la mayoría de las familias colombianas. Inaudito.
Es uno de los platos más reconfortantes de nuestra cocina tradicional. Cuando llego de un viaje, es lo único que me ayuda para volver a centrarme, aterrizar y poner los pies de nuevo en la realidad. Cuando tengo guayabo, es la infaltable cura que repone los cinco sentidos. Cuando estoy enferma me devuelve el alma al cuerpo.
Cuando estoy triste, angustiada o pasando un mal momento es el abrazo cálido que recompone y anima. Y cuando hace mucho frio, llueve y el día está desapacible y gris, es abrigo, cobija y arrunche. Un tazón de caldo de costilla con harto cilantro es todo lo que está bien.
Como creo que en la cocina no hay secretos y que las recetas se deben compartir y transmitir, les cuento la que Anita, quien trabaja en mi casa y que además es una gran cocinera, prepara con mucho amor. Vaya suerte la que tengo. Es la fórmula que cocina su mamá Georgina, en Gámeza, Boyacá y que ella generosamente aquí relata. Tome nota:
"Corto en porciones la costilla de res carnuda. Para 4 porciones uso una 1 libra de costilla, aunque a veces se encoje mucho, todo depende de cuantos gordos tenga. Antes de cocinar se le pueden quitar los más grandes para que no quede grasoso. La pongo a nadar en suficiente agua con un diente de ajo y sal. Se cocina en la pitadora cerca de una hora. En olla normal, se demora más tiempo. Como a los 40 minutos reviso. Debe quedar blanditica, que se separe la carne del hueso.
Ahí agrego 8 papas medianas, peladas enteras. Se puede en cubitos, pero mi mamá siempre las pone enteras. El tipo de papa depende del gusto de cada quien, si quiere el caldo más espesito entonces se usa pastusa que se desbarata un poquito, si quiere el caldo clarito se usa sabanera. También se le echa un gajo, la parte blanca, de la cebolla larga y unos tallos de cilantro con la raíz que da más sabor.
Probar si necesita más sal. Debe tener suficiente líquido. Ya no se pita más y se cocina sin tapar, puede ser en la misma olla para no ensuciar otra, hasta que la papa ablande. Se sirve muy caliente con cilantro fresco y cebolla larga picados muy finitos."
No entiendo como hacen en otros países para vivir sin el caldo de costilla. Pobres almas.
Buen provecho.
-MARGARITA BERNAL
Para EL TIEMPO
En Twitter: @MargaritaBernal

Sigue toda la información de Cultura en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon

Conforme a los criterios de

Logo Trust Project
Saber más
Sugerencias
Alt thumbnail

BOLETINES EL TIEMPO

Regístrate en nuestros boletines y recibe noticias en tu correo según tus intereses. Mantente informado con lo que realmente te importa.

Alt thumbnail

EL TIEMPO GOOGLE NEWS

Síguenos en GOOGLE NEWS. Mantente siempre actualizado con las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en Google News.

Alt thumbnail

EL TIEMPO WHATSAPP

Únete al canal de El Tiempo en WhatsApp para estar al día con las noticias más relevantes al momento.

Alt thumbnail

EL TIEMPO APP

Mantente informado con la app de EL TIEMPO. Recibe las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en tu dispositivo.

Alt thumbnail

SUSCRÍBETE AL DIGITAL

Información confiable para ti. Suscríbete a EL TIEMPO y consulta de forma ilimitada nuestros contenidos periodísticos.

Mis portales