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¿Por qué nos quedamos sin energía y con fatiga después de los 50? Trucos para elevarla y ganar potencia

Además de los malos hábitos, la deficiencia de nutrientes podría provocar cansancio.

La fatiga puede ser causada por afecciones de la salud, malos hábitos en el estilo de vida o la edad. Foto: iStock

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Sofía Arias Martínez

PRACTICANTE PROFESIONAL29.05.2024 10:17 Actualizado: 29.05.2024 12:38

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La fatiga es aquel sentimiento de falta de energía, cansancio y agotamiento constante. Puede ser causada por afecciones de la salud, malos hábitos en el estilo de vida o la edad. Es uno de los síntomas que vienen junto al envejecimiento y, según un estudio de la Universidad Yale, es la razón principal de la falta de actividad física en personas de 70 años o más.

Para combatir este problema los expertos sugieren tener una dieta balanceada, dormir lo suficiente y hacer actividad física. Existen unas comidas en específico que podrían disminuir los síntomas de este tipo de cansancio.

¿Cuáles son los síntomas de la fatiga?

Esta sensación y disminución de la energía puede ser física, mental o emocional. De acuerdo con el portal de salud 'Better Health Channel', si no se controla, podría poner en riesgo su vida y la de los demás. Esto se debe a que podría causar accidentes de tránsito al quedarse dormido detrás del volante.

(Lea aquí: El 'superpoder' del ginseng para deportistas: evita lesiones y reduce el cansancio).

Estos son algunos de los síntomas asociados:

Cansancio crónico, somnolencia y falta de energía.
Dolor de cabeza.
Mareos.
Debilidad muscular.
Reflejos disminuidos.
Deterioro en la toma de decisiones.
Mal humor.
Alteración de la coordinación ojo-mano, también conocida como óculo-manual.
Pérdida de apetito.
Visión borrosa.
Problemas de memoria a corto plazo.
Problemas de concentración.
Alucinaciones.

Una mujer había pasado toda la vida padeciendo de un cansancio crónico, sin imaginar que esto era solo un síntoma de un extraño padecimiento — Puede causar dolor de cabeza. Foto:IStock

La fatiga después de los 50 años

"Las personas mayores de 50 años tienen más probabilidades de experimentar deficiencias de nutrientes, especialmente vitaminas B12 y D, hierro y ácido fólico, que causan fatiga", indicó la Asociación Estadounidense de Personas Retiradas.

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Además, el dietista y nutricionista Luis Zamora explicó en una entrevista para 'Gaceta Médica' que la edad causa una variación en la composición corporal de las personas. Esto podría causar un aumento de la masa grasa y una disminución en la masa magra. Estos cambios podrían producir signos de cansancio, ya que también se pierde masa muscular.

"A partir de los 40-45 años en las mujeres y de los 50 en los hombres, las personas empiezan a mostrar unos claros síntomas relacionados con los cambios fisiológicos propios de la edad como son el aumento de grasa corporal y la pérdida de masa muscular. Una de las frases más repetidas por estos pacientes es: 'Llego muy cansado al final del día'", puntualizó.

¿Cómo elevar la energía?

Primero que todo, es necesario consultar con un profesional de la salud para asegurar que la fatiga no sea causada por un problema médico. De acuerdo con el Sistema de Salud de Monte Sinaí, el cansancio puede ocurrir en casos de diabetes, cáncer, artritis, anorexia, enfermedad de Addison y lupus, entre otros.

(Le recomendamos leer: ¿Cuánto debe durar la siesta perfecta para recargar energía y reparar el cansancio?).

De lo contrario, se podrían implementar cambios en el estilo de vida, como tomar agua, evitar la cafeína, desayunar, no saltar comidas, tener una dieta balanceada, comer alimentos ricos en hierro, no fumar, hacer actividad física, dormir lo suficiente y manejar el estrés.

Entre los muchos alimentos para una dieta saludable, hay uno que destaca especialmente — Se recomienda una dieta saludable. Foto:iStock

La Universidad de Michigan recomendó una dieta enfocada en la reducción de la fatiga. Estas fueron las indicaciones:

El 50 por ciento de los granos deben ser enteros: por lo menos tres porciones al día.
Cinco porciones de verduras al día: una porción de tomates, una porción de verduras de hoja verde, una porción de verduras amarillas o anaranjadas, dos porciones de otras verduras o repetir las anteriores.
Dos porciones de fruta al día: al menos una porción con un contenido alto de vitamina C.
Dos porciones diarias: de pescados grasos, nueces, semillas y aceites.

A continuación, la lista de los ingredientes sugeridos:

Granos enteros: trigo, el maíz, el centeno, la avena, el arroz integral y la cebada.
Verduras de hoja verde: espinaca, col rizada, acelga, hojas de remolacha, brócoli, lechuga, rúcula y berro.
Verduras amarillas y anaranjadas: calabaza, zanahoria, pimentón y batata.
Otras verduras sugeridas: espárragos, repollo, berenjena, apio, pepino y calabacín.
Frutas: manzanas, arándanos, frambuesas, cerezas, guayaba, uvas, limones, melones, kiwis, piña, naranjas y fresas.
Semillas y nueces: linaza, semillas de chía, almendras y pistachos.
Aceites: aceite de soja, aceita de canola, aceite de linaza y aceite de oliva.
Pescados: salmón, salmón ahumado, trucha, sardinas, arenque, pescado blanco, pescado azul y anchoas.

Recuerde consultar con un profesional de la salud antes de incorporar nuevos alimentos y visite un centro de salud cercano en caso de presentar síntomas adversos.