Tras derrota de Mike Tyson contra Jake Paul, piden cambiar el reglamento del boxeo

Figura de YouTube, empresario y ahora autoproclamado rostro del boxeo: Jake Paul es un experto en reinventarse que dio un golpe maestro el viernes con su victoria ante Mike Tyson en una de las peleas más esperadas y mediáticas. 

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Paul, de 27 años, ha sabido transformar su fama como celebridad de Internet en una lucrativa carrera en los deportes de combate, cuyo punto culminante fue su triunfo ante el legendario pero envejecido 'Iron Mike', tres décadas mayor que él. 

El combate, ganado por Paul por decisión unánime, se celebró frente a más de 72.000 espectadores en Arlington (Texas) y una audiencia potencial de millones de espectadores a través de Netflix, que llevó a cabo un enorme esfuerzo publicitario para la primera velada de boxeo que retransmitía en vivo.

“Quería darles a los fans un espectáculo, pero no quería lastimar a alguien que no necesitaba ser lastimado”, afirmó Paul, y el debate está abierto.

El exmédico de la Asociación de Boxeadores Profesionales Alemanes, Walter Wagner, criticó la decisión de permitir que Tyson se subiera al ring con 58 años.

El médico pidió que se revisen las reglas del boxeo mundial para establecer una edad límite, esto porque de permitirlo puede ser un “riesgo de salud severo” para los boxeadores que pelean con más de 40 años.

“Como norma, no deberían dejar subir a un ring a nadie por encima de los 40 años”, fue la sentencia de  Werner. 

“Si no eres capaz de protegerte y defenderte por ti mismo, esto puede llevar a serios problemas de salud. La salud de los atletas debería ser lo prioritario”, concluyó.

El boxeador más temido en los rings en la década de 1980 dijo que pelear fue una victoria, al detallar los problemas médicos que sufrió tras vomitar sangre durante un vuelo desde Miami a Los Ángeles. "Casi muero en junio", aseguró Tyson. 

"Tuve 8 transfusiones de sangre (...) tuve que luchar para pelear, así que gané". Tyson había adjudicado la suspensión de la pelea ante Paul a mitad de año a un "brote de úlcera". "Que mis hijos me vean plantarme y terminar 8 asaltos con un boxeador de talento, que tiene la mitad de mi edad, ante un estadio de los Dallas Cowboys abarrotado es una experiencia que ningún hombre tiene derecho a exigir", resumió.

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