El episodio que protagonizó el sábado pasado la candidata a la Alcaldía de Cali Catalina Ortiz en el que un hombre le arroja agua desde un carro, algo que fue un montaje, podría traer consecuencias jurídicas para quienes sabían que todo el acto estaba previamente acordado.
La razón es que hace unos días la Fiscalía General de la Nación abrió una indagación para esclarecer la situación que se presentó en la capital del Valle del Cauca, y así dar con el hombre que pasó en un carro color gris y agredió a Ortiz.
EL TIEMPO conoció que en su momento la noticia criminal fue abierta de oficio por la Seccional Cali del ente acusador, hasta la cual días después se dirigió Ortiz para ampliar la denuncia, algo que podría afectarla jurídicamente a ella y a la gente de su equipo.
Y es que resulta que en el Código Penal el artículo 435 aparece el delito de falsa denuncia, aplicable para "el que bajo juramento denuncie ante la autoridad una conducta típica que no se ha cometido", el cual da una pena de 16 a 36 meses, y una multa que va desde los 2,66 a los 15 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
Las personas que sabían deberían responder por el delito de falsa denuncia contra persona indeterminada.
Para el abogado Camilo Burbano "si ella sabía que esto efectivamente era un montaje o algunos de sus colaboradores sabían, y aún así permitieron que se hicieron la denuncia, las personas que sabían deberían responder por el delito de falsa denuncia contra persona indeterminada".
Por su parte, al ser también consultado por este diario, el penalista Francisco Bernate resaltó que "si en efecto este acto fue denunciado ante la Fiscalía por ella a sabiendas de que era un montaje, se está incurriendo en el delito de falsa denuncia contra persona determinada. Insisto porque se sabía de entrada que era un montaje, confiemos y esperemos que eso no haya sido así. Por ser el delito de discriminación un delito que solamente se puede iniciar si hay denuncia de parte, considero que la Fiscalía no actuó oficiosamente, pero sí se puso en conocimiento este hecho a sabiendas de que era un montaje, es un delito y es muy grave.
De acuerdo a Burbano, hay que tener en cuenta que el delito de falsa denuncia es un delito de dolo, es decir, la persona que lo cometió debía tener el conocimiento y la voluntad de realizar la conducta punible.
Hasta el momento se sabe que la situación por la que pasó Catalina Ortiz en Cali fue una puesta en escena premeditada, por la cual este jueves ella lamentó lo ocurrido resaltando que no sabía que su equipo había hecho eso. "Nunca fui informada, ni pagué por esto, ni tuve conocimiento de que no fuera real hasta ahora que surge un video", escribió en Twitter.
Que fue un montaje lo dio a conocer una persona por medio de un video subido a la misma red social, en el que resaltó que todo hizo parte de un performance que pretendía visibilizar la violencia hacia las mujeres, y que no quiso informarle a la aspirante a la Alcaldía de Cali para tener una reacción natural por parte de ella.
"Obviamente para hacer todo esto tuve que coger desprevenida a Cata. Si no, no hubiera sido una reacción natural. La cogimos desprevenida y bueno, la verdad teníamos el video listo para revisarlo y se fue se fue. Se volvió tendencia. El video fue tendencia. Ella estaba sana. Cuando menos pensamos, Cata puso la denuncia", se escucha en el video.
Este acto fue rechazado por la alcaldesa mayor de Bogotá, Claudia López, quien manifestó que “la violencia contra las mujeres es una realidad diaria y dolorosa, no un ‘teatro del oprimido’ ni un ‘performance’”.
Sobre el proceso que abrió la Fiscalía en Cali no se conocen más detalles, pero si se comprueba finalmente que Ortiz sí supo de la puesta en escena y aún así fue a declarar a las autoridades judiciales como víctima se le podría complicar su situación jurídica, como lo advierten los penalistas.
Carlos López
Redacción Justicia
En Twitter: @CarlosL49
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