Mauricio Millán, quién fue gerente de gestión contractual en el consorcio
Ruta del Sol II, asistió este jueves como sexto testigo en el juicio que se le hace a José Elías Melo, expresidente de
Corficolombiana, por los sobornos de la multinacional brasileña
Odebrecht en el país.
Millán afirmó que en 2007 trabajó con Corficolombiana y desde el 2010 en su filial Episol, y señaló que cuando esta hizo parte del Consorcio Constructor Ruta del Sol (Consol), conformado además por Odebrecht y CSS Constructores, una de sus labores fue preparar la oferta para la obra. Millán dejó claro que su máximo superior era el expresidente de corficolombiana José Elías Melo.
Tras obtener la obra, Millán fue, según afirmó, el Gerente de istración Contractual del Consorcio Ruta del Sol y fue quien acompañó las comunicaciones y el levantamiento de redes, en cuanto a líneas eléctricas del proyecto. Su labor era firmar los giros en compañía de dos personas más delegadas por Odebrecht.
En respuesta a preguntas del fiscal del caso, este testigo hizo énfasis en que Episol -controlado por Corficolombiana- fue el vehículo utilizado para presentar la oferta. En esa operación, dijo, conoció a Melo.
Millán ratificó que el encargado de hacer la adjudicación en el Instituto Nacional de Concesiones (INCO), que después se transformó en la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), fue un comité de evaluación y que el gerente de dicha entidad era el exviceministro de Transporte Gabriel García Morales, ya condenado por recibir 6,5 millones de dólares de parte de directivos de debrecht y quien ya declaró esta semana en el juicio.
Como gerente contractual de Ruta del Sol, Millán autorizaba todos los giros, y en algunos casos solicitaba soportes contables. En el juicio contra Melo este jueves, dijo que le llamó la atención uno de los pagos, en el 2010, porque era derivado de un contrato de Odebrecht y que era por 18.000 millones de pesos. Millán relató que acudió a Melo para comunicarle su inquietud.
Señaló que cuando le dijo al entonces presidente de Corficolombiana que debían aclarar el tema, este le respondió que iba a hablar con Odebrecht.
Luego, según sostuvo Millán, Melo le dijo que ya había hablado con los brasileños y que procediera a hacer el giro.
Así mismo, el exgerente contractual de Ruta de Sol aseguró que cuando se ventiló el escándalo de corrupción de Odebrecht en todo el mundo, a finales del 2016, Corficolombiana y el Grupo Aval hicieron una auditoría interna y entrevistaron a las personas que estaban en el grupo, entre ellos al propio Mauricio Millán y a empleados de Episol que estaban vinculados con el proyecto.
La auditoría, anotó Millán, la hicieron Rafael Neira, vicepresidente de auditoría del Grupo Aval y María Isabel Ortiz, auditora de Corficolombiana.
Según relató, el resultado de esas auditorías se presentó en juntas, y según cree Millán, se presentaron acciones judiciales.
Sobre la autorización que le dio Melo para girar los 18.000 millones de pesos, Millán dijo que no entregó documentos de soporte ni consideró pedir una autorización por escrito para hacer el pago.
En respuesta a una pregunta del procurador delegado en el juicio, Millán afirmó que hubo alrededor de tres o cuatro casos más donde tuvo dudas de los pagos. Así, mismo, reiteró que para realizar los pagos de Consol se requerían tres firmas para proceder, la de él y la de dos funcionarios de Odebrecht.
Millán señaló que recibió bonificaciones de Corficolombiana y que en un año alcanzó a recibir 100 millones de pesos. Esas bonificaciones, según relató, eran por buen desempeño.
El juicio contra José Elías Melo se reanudará este viernes para escuchar a dos investigadores del caso.
Esta semana fueron escuchados por el juez que conoce del caso, además del exviceministro de Transporte García Morales y el expresidente de Odebrecht en Colombia Luiz Antonio Bueno Junior, otros dos exdirectivos de la multinacional brasileña.
REDACCIÓN JUSTICIA Y PAZ