*Luz, una niña colombiana de tan solo 14 años, se convirtió en la clave para ejecutar una operación transnacional que culminó este jueves con la captura de quien es considerada la principal proxeneta del sur del país: Leonarda Camara Pizango, llamada la ‘madame del Amazonas’, a quien se le seguía la pista desde hace al menos 10 meses.
La menor fue raptada en la población fronteriza de Puerto Nariño –sur de Colombia– y luego trasladada hasta Ayacucho (Perú), para ser explotada sexualmente.
Pero tras la denuncia de sus padres y labores de inteligencia, fue hallada en febrero pasado en una peluquería de dicha ciudad con evidentes signos de violencia sexual.
EL TIEMPO estableció que la menor logró comunicarse con sus padres y darles las señas para que llegaran a un edificio de cinco pisos en obra gris, en donde la tenían recluida.
El día del rescate de la joven colombiana se incautaron algunos celulares y computadores, que permitieron comenzar a rastrear a la red.
De hecho, para seguirles el rastro a los de esta organización, se hicieron seguimientos durante más de seis meses y se analizaron al menos 1.400 horas de grabaciones de interceptaciones telefónicas.
En el operativo, liderado por Migración Colombia, cooperó el Servicio de Seguridad Diplomática de la embajada de los Estados Unidos y la Dirección de Protección y Servicios Especiales de la Policía (Dipro).
Además de la señalada proxeneta, a quien también se la conocía como la ‘Tigresa’, fueron capturados William Ramón Veloza Souza, alias el Caimán o Tis-Tis, y Zenon Peña Camara, conocido en la red como el ‘Tigrillo’.
Los familiares de la menor de 14 años que fue clave para realizar estas capturas identificaron al ‘Caimán’, hijo de la ‘madame del Amazonas’, como quien la raptó de Puerto Nariño.
“Testimonios señalan que este individuo (el ‘Caimán’) se encargaba de convencer a las menores para que trabajaran en establecimientos de comercio en Pucallpa (Perú). Para trasladarlas, usaban documentos de ciudadanía falsos de ese país”, le explicó a EL TIEMPO uno de los oficiales que participaron en la redada a la que se bautizó Triple Frontera.
¿Influencia política?
Y es que según las investigaciones adelantadas por la Policía Judicial de Migración Colombia, el ‘Caimán’ habría sido el encargado de retener y explotar sexualmente a las niñas de comunidades indígenas usando regalos y engaños.
Mientras que la ‘madame’, madre del 'Caimán', era la presunta encargada de trasladar a las menores desde Puerto Nariño hacia Iquitos y Pucallpa, en Perú, para que fueran explotadas laboral y sexualmente.
Un oficial que participó en el operativo señaló que también se indaga si esta red tiene nexos con el manejo del microtráfico en la zona. Y confirmó que uno de los capturados es pariente de influyentes líderes políticos del Amazonas.
De manera paralela, y con el apoyo de la oficina de Turismo de Amazonas, se intervinieron tres hoteles en Leticia –capital de Amazonas– que eran usados por esta red. Allí se rescató a otra menor, quien también identificó al ‘Caimán’.
Christian Krüger, director general de Migración Colombia –entidad que lideró el equipo que trabajó en la operación Triple Frontera–, confirmó que “la investigación nació gracias a la denuncia de una de las madres de las víctimas, quien nos contó lo que había sucedido”.
Tras las capturas, las tres personas fueron presentadas ante un juez de garantías. Son procesadas por tráfico de migrantes, trata de personas, inducción a la prostitución y demanda de explotación sexual con menores.
La noche de este jueves quedó planteado un posible acuerdo entre la Fiscalía, la ‘madame’ y el ‘Tigrillo’ para que se les diera arresto domiciliario, pero su audiencia se aplazó para hoy. En el caso del ‘Caimán’, hijo de la proxeneta, quedó en firme la petición de detención intramural, pero el juez también lo definirá este viernes.
UNIDAD INVESTIGATIVA
* Nombre cambiado para proteger a la menor.