Las demoras que dejaron en libertad a 'Papá Pitufo' en Portugal: ¿hubo maniobras dilatorias?, ¿hay riesgo de fuga?

El llamado 'zar del contrabando', Diego Marín Buitrago, quedará en libertad de forma inmediata. El Tribunal Supremo de Justicia de Portugal aprobó un recurso de habeas corpus interpuesto por la defensa y le abrió las rejas al señalado capo del contrabando, quien en la justicia colombiana es llamado a responder por concierto para delinquir y cohecho por dar u ofrecer.

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Marín está siendo procesado por la justicia colombiana y fue imputado en contumacia (en ausencia) mientras se resolvía el requerimiento de extradición, que fue aprobado en segunda instancia y entró en vigencia desde el 9 de mayo.

'Papá Pitufo' está próximo a ir a juicio, ya que la fiscal general Luz Adriana Camargo aseguró que ya se radicó la acusación en su contra. 

No obstante haber sido notificada la negación del recurso de casación contra la decisión en primera instancia del Tribunal de Apelación de Oporto, lo que dejó en firme el aval para que Diego Marín fuera enviado en un vuelo a Colombia, su extradición no se ejecutó. ¿La razón? No puede salir de territorio ibérico, en tanto no se resuelva una solicitud de asilo que radicó en paralelo a su proceso judicial.

"La extradición no puede ejecutarse hasta que exista una resolución definitiva sobre la solicitud de protección internacional formulada por el extraditado, en virtud de lo dispuesto en el artículo 48.2 de la Ley 27/2008, del 30 de junio", se lee en la sentencia en segunda instancia del Tribunal Supremo de Justicia. 

La ley portuguesa establece un plazo de 20 días, contados a partir de la fecha en que la decisión quedó en firme (09/05/2025), para que se cumpla la orden de extradición. 

Sin embargo, debido al amparo jurídico que impide su salida del país hasta que se resuelva la solicitud de asilo, ese plazo venció, y tras el recurso de habeas corpus presentado por su defensa, se ordenó su libertad.

“El habeas corpus es un recurso universalmente reconocido, mediante el cual cualquier persona que considere que debe estar en libertad y que su detención vulnera sus derechos puede presentarlo ante la justicia. Es una acción jurídica efectiva y de rápida resolución”, explicó el penalista Francisco Bernate.

La justicia portuguesa explicó que en los procedimientos de extradición, no se habla de detención preventiva, pues la privación de libertad en este caso tiene como objeto entregar a la persona al país requirente. 

"El artículo 48 de la Ley 27/2008, que regula los efectos del asilo y la protección subsidiaria sobre la extradición, establece que la concesión de asilo o de protección subsidiaria impide cualquier solicitud de extradición del beneficiario basada en los hechos que fundamentaron la concesión de la protección internacional", argumentó el Tribunal.

Y agregó: "la ley no contempla ninguna prórroga de los plazos de detención fijados en el proceso de extradición, ni prevé la suspensión del vencimiento de dichos plazos, como sí ocurre en determinadas situaciones de prisión preventiva".

Por las razones expuestas, los magistrados de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo de Justicia avalaron el habeas corpus presentado por Marín Buitrago y ordenaron el cese de su detención. 

Quien es considerado en Colombia como la cabeza de la poderosa banda de contrabando y lavado de activos, que entra hasta el 80 % de la mercancía ilegal, radicó la solicitud de asilo en Portugal, ante la Agencia de Integración y Migración antes que se formalizara la solicitud de extradición. 

Esta fue desestimada, decisión que fue impugnada por la defensa ante la jurisdicción contencioso-istrativa de ese país. Ese recurso abrió otro paquidérmico camino. 

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El Tribunal istrativo de Lisboa, mediante auto del 1 de febrero de 2025, se declaró incompetente por razones territoriales y ordenó la remisión del expediente, una vez en firme, al Tribunal istrativo Común del Tribunal istrativo y Fiscal de Oporto.

Sobre la decisión del habeas corpus, según la defensa, no proceden más recursos. Se espera que se resuelva la solicitud de asilo en los Tribunales istrativos y, desde ya, anunciaron acciones legales si la justicia de Portugal lo rechaza. Esto le daría otros meses al procesado en libertad mientras se resuelve y se avala su extradición. 

"La solicitud de asilo tiene dos fundamentos. Uno, la protección de los derechos de Diego, en términos de garantizarle el debido proceso y el derecho a la defensa, teniendo en cuenta que, según nuestro concepto, ha habido una interferencia indebida del Ejecutivo en las decisiones judiciales. Y segundo: que en Colombia no se nos dio respuesta, y podemos afirmar que no existen garantías para la persona solicitada en extradición. Pero, sobre todo, hay un componente político que se aleja de lo jurídico y que podría tener repercusiones en las decisiones judiciales", le dijo a este diario el abogado de Marín, Camilo Rojas. 

El mismo Tribunal Supremo de Justicia, en el aval en segunda instancia de la extradición, aseguró que alias Papá Pitufo tiene "alto peligro de fuga". La misma historia se repitió en 2024, cuando España, tras capturarlo por una circular roja de Interpol, le concedió la libertad temporal mientras se concretaba su extradición a Colombia y Marín huyó a Portugal. En este último país, fue detenido nuevamente en diciembre del año pasado.

Sin embargo, según su defensa la decisión de pasar la frontera fue producto de las "manifestaciones en las que el Presidente expuso públicamente que estaba hablando con su homólogo en España para que trajeran (a Colombia) a Diego Marín".

"Entonces, Diego, al percibir precisamente que puede haber una interferencia política en su proceso, acude a Portugal para solicitar asilo", agregó. 

Con la defensa de Marín concuerdan penalistas consultados por este diario, quienes aseguran que se la libertad por habeas corpus en un derecho en el debido proceso.

Otra versión tienen las autoridades colombianas que por su "poder corruptor" han exigido todas las medidas de seguridad. Entre estos el propio presidente Gustavo Petro, quien ha rechazado la decisión judicial.

Redacción Justicia