La ciudad de Florida en la que solo se habla español y ahora es recinto de migrantes

En el condado de Miami-Dade, en Florida, hay una pequeña ciudad en la cual más del 95 por ciento de la población es de origen latino, se habla más español que inglés y se ha convertido en un punto de encuentro de migrantes. Considerada “la ciudad más latina de Estados Unidos”, Hialeah se encuentra entre la Bahía de Biscayne y los Everglades, a solo minutos de Miami Beach.

De acuerdo a la Oficina de Censo de estados Unidos, el 95,4 por ciento de la población de Hialeah, en Miami-Dade, Florida, es de ascendencia latina; 93,1 por ciento de sus habitantes usa el español como idioma principal, mientras que solo 6,4 se comunica en inglés. La importancia del español es tal y la ciudad tiene tantos latinos, que, dos terceras partes de la gente, califica su dominio del inglés como “no muy bueno”.

La ciudad, que forma parte del área metropolitana de Miami, es considerada un punto de encuentro de la comunidad cubana, cuyos primeros asentamientos se dieron en 1959, resultado de la revolución en la isla. Tanto así que 75 por ciento de la población tiene orígenes cubanos. Actualmente, también se ha convertido en destino de migrantes latinos.

La segunda ciudad más grande del condado de Miami-Dade, Hialeah está al borde de una crisis por la llegada de migrantes latinoamericanos, según explica el alcalde Esteban Bovo. “Vemos algunas cosas que nos preocupan, el incremento de los alquileres, el tráfico, muchos muchachos en nuestras escuelas”, dijo el funcionario en entrevista con CNN.  

La ciudad en la que se habla más español que inglés y cuyos habitantes tienen fuertes raíces latinas, se ha convertido en el destino de miles de migrantes. “Puede ser que un 50, un 70 por ciento, de esas personas terminen en el sur de la Florida y, posiblemente, la mitad de ellos, en Hialeah”, explica el funcionario, quien está preocupado por esta situación. “Esto no es California, Nueva York o un estado grande que quizás pueden asumir toda la carga”, indica el político.

En los últimos años, la cantidad de migrantes que han llegado a la ciudad han tenido impacto en el mercado inmobiliario, el cual presenta rentas cada vez más altas, así como en tráfico y los servicios. El alcalde considera que la ciudad debe buscar consejo de expertos en urbanidad para enfrentar el problema de vivienda asequible, con la intención de seguir manteniendo cubiertas las necesidades de sus residentes.