La inteligencia artificial a menudo es criticada porque inventa información que parece real, lo que se conoce como alucinaciones.
Sin embargo, en la ciencia, las alucinaciones de IA pueden ser notablemente útiles. Las máquinas inteligentes están ideando derroches de irrealidades que ayudan a los científicos a rastrear el cáncer, diseñar medicamentos, inventar dispositivos médicos, descubrir fenómenos climáticos e incluso ganar el Premio Nobel.
“El público piensa que todo es malo”, dijo Amy McGovern, científica computacional que dirige un instituto federal de inteligencia artificial en Estados Unidos. “Pero de hecho está dando a los científicos nuevas ideas”.
Las alucinaciones de IA aceleran el proceso mediante el cual los científicos e inventores idean y prueban nuevas ideas. Lo que antes llevaba años ahora se puede hacer en días, horas y minutos.
Las alucinaciones surgen cuando los científicos enseñan modelos computacionales generativos sobre un tema en particular y luego dejan que las máquinas reprocesen esa información. En ocasiones, los resultados conducen a descubrimientos importantes.
En octubre, David Baker, de la Universidad de Washington, compartió el Premio Nobel de Química por su investigación pionera sobre las proteínas, las moléculas nudosas y altamente complejas que potencian la vida. El comité del Nobel lo elogió por descubrir cómo construir rápidamente tipos completamente nuevos de proteínas que no se encuentran en la naturaleza, calificando su hazaña de “casi imposible”.
En una entrevista, Baker citó estallidos de imaginaciones de IA como fundamentales para “crear proteínas desde cero”. La tecnología ha ayudado a su laboratorio a obtener aproximadamente 100 patentes. Una es para una nueva forma de tratar el cáncer. Otra busca ayudar en la guerra global contra las infecciones virales. Baker también fundó o ayudó a iniciar más de 20 empresas de biotecnología.
Baker dijo que su laboratorio ha diseñado 10 millones de proteínas nuevas. “Incluso los científicos que se ganan la vida dedicados a las proteínas no saben hasta dónde han llegado las cosas”, añadió.
Algunos científicos consideran que la palabra “alucinaciones” es engañosa y evitan usarla. Ven las imaginaciones de los modelos de IA generativa no como ilusorios sino prospectivos —como teniendo alguna posibilidad de volverse realidad.
Muchos expertos dijeron que las imaginaciones de la IA científica tienen grandes ventajas en comparación con las alucinaciones de los chatbots. Fundamentalmente, los estallidos creativos tienen sus raíces en hechos concretos de la naturaleza y la ciencia, en lugar de en las ambigüedades del lenguaje humano o la confusión de Internet, conocida por sus prejuicios y falsedades. Esa base física en hechos confiables puede producir resultados muy precisos.
Anima Anandkumar, profesora de matemáticas y ciencias computacionales en el Instituto Tecnológico de California, quien anteriormente dirigió la investigación de IA en Nvidia, y sus colegas usaron recientemente alucinaciones de IA para ayudar a diseñar un nuevo catéter que reduce en gran medida la contaminación bacteriana —que anualmente causa millones de infecciones del tracto urinario en todo el mundo. Dijo que el modelo IA del equipo ideó miles de geometrías de catéteres.
Las paredes internas del nuevo catéter están revestidas con púas aserradas que evitan que las bacterias ganen tracción y naden corriente arriba para infectar la vejiga de los pacientes. Anandkumar dijo que el equipo está explorando la comercialización del dispositivo.
Pushmeet Kohli, jefe de la división científica de DeepMind, una empresa de Google en Londres que desarrolla aplicaciones de inteligencia artificial, ve a la IA como descubriendo los secretos más profundos de la vida y estableciendo una nueva y poderosa base para curar enfermedades, mejorar la salud y prolongar la vida.
“Una vez que descifremos y comprendamos verdaderamente el lenguaje de la vida, será mágico”, dijo.