SEÑOR DIRECTOR:
En EL TIEMPO de 20-8-23 Jhenifer Mojica, la minagricultura, habla de bajar tasas de interés para la economía popular y de impulsar la agroindustria. Con estas propuestas se pretende ayudar a reparar la desaceleración de la economía, que bajó del 12,2 % en el segundo semestre al 0,3 %. Esto se asocia con el llamado del presidente Petro a acelerar la ejecución del presupuesto, el cual es alto para este ministerio. La ministra dice que ha ejecutado 2,1 billones, pero que hubo una adición de 1,3 billones. Se habla de créditos para riego, infraestructura, almacenamiento.
Habla de maíz, pero no entendemos que, a la par que se cosecha el maíz nuestro, se permiten importaciones, por medio de los TLC. Habla de democratizar el crédito para el agro, bajando tasas del 18 al 8 % con el Banco Agrario. Ojalá recordemos a la Caja Agraria, el Incora, o el Banco Ganadero, con los cuales fue posible ayudar mucho a los campesinos.
Se habla de alianzas público-privadas entre Minagricultura, el Banco Agrario, Finagro, Alquería y Asoleche. Aquí faltarían Colanta, Federacafé y las asociaciones Economía Solidaria y Popular. De todos modos, son apreciables las alianzas del Gobierno con estos entes gremiales y populares.
Fidel Vanegas Cantor
El sueldo se los congresistas
SEÑOR DIRECTOR:
Un proyecto de ley busca bajarles el sueldo a los congresistas. Eso es muy popular. Los políticos y en especial los congresistas no gozan de muy buena fama. Eso no se puede negar. Y con los sueldos mínimos y otros que la situación económica limita, o con millones de gentes en el rebusque para ganarse el pan de cada día, 43 millones de pesos suena escandaloso. Yo creo que el reto es que los padres de la patria trabajen, hagan propuestas legislativas que beneficien a la gente; que trabajen en propuestas para que el Estado llegue a zonas vulnerables y urgidas de empleo y protección, por ejemplo; que se empeñen en atajar la corrupción. Por sus obras los conoceréis. Si los electores sienten que sus representantes en el Congreso se esfuerzan por ellos, los sueldos serán lo de menos.
Pedro Samuel Hernández
Cafeteros frustrados
SEÑOR DIRECTOR:
Al leer la entrevista publicada en EL TIEMPO el 18 de agosto, con Germán Bahamón, gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, y tras la advertencia de Petro de que terminará con el Fondo Nacional del Café, queda en el imaginario de los cafeteros una sensación de impotencia, frustración y destrucción. Este FNC, creado en 1940 con el propósito de contribuir a maximizar el ingreso del productor de café, permitiendo a lo largo de 83 años el fomento de una caficultura eficiente, sostenible y mundialmente reconocida, hoy es desconocido por el presidente Petro.
Sería lo más absurdo que un presidente llevara a los cafeteros a que se empobrezcan más, a que abandonen el campo, a que se les agote la fuente de ingreso -compra segura-. ¿Dónde está la ayuda al campesino que en discursos expone y propone? El Presidente debe dar un trato igual a todos los gremios. A los factores adversos a los cuales se ve enfrentado el caficultor se suma el desprecio que tiene el Presidente por ellos.
Álvaro Sandoval Gómez