SEÑOR DIRECTOR:
Por los momentos que vive el país es bienvenido el nombramiento del general Pedro Sánchez Suárez, de magnífico desempeño en la Fuerza Aérea, sin que haya perdido la sencillez que caracteriza a los militares troperos.
Buen detalle fue haber solicitado la baja, como militar, para no perjudicar a sus compañeros de milicia. Ser experto en helicópteros ayudó a su éxito en la operación Esperanza y le seguirá ayudando ahora. Pero al anterior mindefensa no se le puede achacar todo el desorden territorial, donde debe trabajar todo el Gobierno. Entonces, "¿dónde está el piloto?".
Por haber trabajado en la Reforma Agraria del siglo pasado, sé que hicimos mucho por los negros, indígenas y campesinos y que esa obra debe continuarse... Me dolió escuchar a la gobernadora del Chocó suplicando por su tierra. De la misma manera que se creó, con la FAC, Satena como empresa comercial del Estado, para servir a los territorios distantes, la Armada debería crear un servicio similar para los mares, ríos y esteros de la patria. Esta empresa será vital para ayudar a los territorios más afectados por las narcoeconomías y que están sufriendo su aterradora presencia. Bueno ha de ser que el nuevo ministro acoja esta propuesta.
Fidel Vanegas Cantor
SEÑOR DIRECTOR:
Quizás, a partir del 12 de febrero, la humanidad haya entrado a un cambio de era o a un cambio de época con el control de la fusión nuclear por más de 22 minutos en el Centro de la Comisión de Energía Atómica y Energías Alternativa (CEA), en Cadarache, cerca de Marsella. Dicha proeza con el control de un tipo de energía inagotable, limpia y barata es comparable al redescubrimiento de la bombilla eléctrica, por parte de Nicola Tesla y Tomás Alva Edison. Para adquirir o lograr dicho tipo de tecnología en un país como Colombia, tendrían que pasar unos 50 años.
Fueron 22 minutos de fusión nuclear de los que bien se podría surtir la energía durante un año de una ciudad del tamaño de Bogotá, sin que ninguno de sus habitantes reciba bajo las puertas de su hogar los cumpliditos recibos de energía y gas cada mes.
Fernando Cortés Quintero
SEÑOR DIRECTOR:
Si Herbin Hoyos estuviese aquí, su voz seguiría denunciando las injusticias y exigiendo verdad para las víctimas del secuestro y la violencia en Colombia. Tras cuatro años de su partida por covid-19, su legado sigue siendo una guía para quienes luchan por la libertad y la justicia.
Herbin no solo fue un periodista valiente, sino un símbolo de resistencia. Si estuviera aquí, nos recordaría que la indiferencia es el peor enemigo de la democracia y que olvidar a las víctimas es traicionar su memoria. Su ejemplo nos inspira a no rendirnos y a seguir elevando la voz por aquellos que aún esperan justicia.
Nuestra esperanza no está en políticos ni en promesas vacías, sino en la determinación de una ciudadanía que se niega a olvidar. La verdad que Herbin defendió con su vida debe seguir guiando nuestro presente y nuestro futuro. Mantener viva su voz es la única manera de honrar su memoria y de exigir un país donde la verdad y la justicia prevalezcan.
Martín Abel Chivatá Negro