SEÑOR DIRECTOR:
EL TIEMPO de 1-11-2021 nos habla del plan del tren del Caribe, que conectaría a Santa Marta, Barranquilla y Cartagena, con la participación de una multinacional china. Es una excelente idea, sobre todo para quienes conocimos nuestra bella costa Atlántica viajando en el Expreso del Sol, de Bogotá a Santa Marta. Que, de hecho, ¿por qué lo dejaron acabar?
Con el sistema elevado, según el proyecto de los chinos, los costos se reducen un 44 por ciento, afectan menos el paisaje e incrementan el aspecto turístico del viaje.
Por otra parte, es mucho mejor negociar con ciudadanos de ese país porque con ellos no hay peligro de ‘odebrechadores’, ya que en China existe la pena de muerte, principalmente para los saqueadores del Estado.
Según Juan Felipe Velásquez, representante de BYD en Colombia, por ser un sistema mixto puede transportar más de 8.000 pasajeros por hora, a una velocidad de 80 km/h.
Es importante brindar todo el respaldo a proyectos como este, teniendo en cuenta que el futuro de nuestra economía está en el turismo.
Además de pensar en exportar, es más rentable que los extranjeros vengan a consumir nuestros productos, y para ello debemos consolidarnos como productores de agricultura orgánica limpia y saludable.
Fidel Vanegas Cantor
Bogotá
Centenario de Chico O’ Farrill
SEÑOR DIRECTOR:
Arturo Chico O’Farrill, ese gran director cubano de orquesta, trompetista y compositor, nacido en La Habana el 28 de octubre de 1921, hace 100 años, llegó a ser uno de los grandes arreglistas de Dizzy Gillespie, Stan Kenton y Benny Goodman. Además, fue integrante de la famosa orquesta Havana Cuban Boys, de Armando Orefiche. Como compositor escribió dos Suites jazz afrocubanas, más la Suite azteca para la gran orquesta de Machito y sus Afrocubanos.
La figura de Chico O’Farrill se constituyó en un gran aporte para el jazz latino, y hoy es considerado el mejor de los músicos que han dejado huella en este género. Su centenario es momento justo para evocar su grandeza y su memoria.
José Portaccio Fontalvo
Contra la movilidad
SEÑOR DIRECTOR:
Pareciera que los últimos alcaldes de la capital sufrieran de ocofobia, pues se han negado a construir nuevas vías -reduciendo las que tenemos para destinarlas como ciclorrutas-, han instalado reductores de velocidad sin justificación, y ahora se proyecta la demolición de los puentes peatonales para crear ‘cebras’ de paso de transeúntes con largos minutos de espera.
Hace poco, para colmo de males, autorizaron el estacionamiento en las calles, atascando de esta manera la movilidad de los vehículos particulares, como si estos fueran sus grandes enemigos.
Esta animadversión contra los conductores perjudica enormemente el desarrollo ágil que debe mantener la metrópolis, pues ocasiona atraso, generalizado y malestar general entre la población que debe acudir a citas de negocios, médicas y de todo orden.
Héctor-Bruno Fernández Gómez