En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información aquí

CLUB VIVAMOS
Suscríbete
Disfruta de los beneficios de El Tiempo
SUSCRÍBETE CLUB VIVAMOS

¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo [email protected] no ha sido verificado. Verificar Correo

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión

Hola, bienvenido

¿Cómo está el clima en Bogotá?
¿Cómo se llama el hijo de Petro?
¿El pico y placa en Bogotá como quedaría para el 2024?

Opinión

El peso invisible del ‘ageism’ en las mujeres latinoamericanas

El edadismo perpetúa la desigualdad de género al limitar las oportunidades de las mujeres mayores y reforzar estereotipos.

Alt thumbnail

Actualizado:

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon
El término ageing, que hace referencia al envejecimiento continuo de la población en comparación con los bajos índices de natalidad, ha traído consigo el ageism —o “edadismo”—, esa discriminación sutil pero persistente basada en la edad, un problema global que afecta a todos los géneros. Sin embargo, las mujeres, especialmente en América Latina, enfrentan una carga adicional debido a la intersección de esta discriminación con los estereotipos de género arraigados en nuestras sociedades.
Un estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) reveló que el 45 por ciento de las mujeres mayores de 50 años en la región han experimentado discriminación laboral debido a su edad. Esta cifra alarmante se traduce en dificultades para encontrar empleo, ascender en sus carreras y acceder a oportunidades de desarrollo profesional.
En el ámbito de la salud, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha documentado cómo el edadismo afecta negativamente la calidad de vida de las mujeres mayores. La falta de a servicios de salud adecuados, la discriminación en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades y la invisibilización de sus necesidades específicas son solo algunas de las consecuencias de este fenómeno.
Este tipo de discriminación es especialmente preocupante, ya que no solo afecta los derechos laborales de los/as trabajadores/as mayores de 50 años, sino que también perjudica a las empresas, que pierden la oportunidad de contratar a profesionales altamente cualificados y experimentados. Un estudio realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde) encontró que los/as trabajadores/as mayores de 50 años tenían más probabilidades de ser despedidos/as que los trabajadores más jóvenes.
Es necesario visibilizar esta problemática, cuestionar los estereotipos de género y edad, y promover políticas públicas que garanticen la igualdad de oportunidades para las mujeres de todas las edades.
A pesar de contar con una amplia experiencia y una valiosa trayectoria laboral, las personas mayores de 50 años a menudo enfrentan discriminación en los procesos de selección de las empresas. Se les considera “demasiado viejos” para aprender cosas nuevas, “más caros” que los candidatos más jóvenes y “menos adaptables” a los nuevos cambios y tecnologías.
He encontrado varios prejuicios preocupantes que nos estigmatizan a los que ya pasamos por ese rango de edad. Según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la tasa de desempleo entre las personas mayores de 50 años es notablemente más alta que la de los trabajadores más jóvenes en muchas regiones del mundo.
De otro lado, es recurrente que las personas mayores que logran ser contratadas a menudo experimenten una reducción significativa en sus ingresos. Esto se debe a que son contratadas para roles de menor remuneración o con condiciones laborales menos favorables. Un estudio del Pew Research Center en Estados Unidos revela que los desempleados mayores de 50 años tienen más dificultades para encontrar un nuevo empleo que los trabajadores más jóvenes. Además, el tiempo que les lleva encontrar trabajo es significativamente mayor.
En América Latina, los estereotipos de género tradicionales dictan que las mujeres deben ser jóvenes, bellas y dedicadas al cuidado de los demás. A medida que envejecen, estas expectativas se vuelven una carga adicional, ya que se las percibe como menos valiosas y menos capaces de contribuir a la sociedad.
Un estudio realizado en Argentina por el Centro de Estudios de Estado y Sociedad (Cedes) reveló que el 60 por ciento de las mujeres mayores de 60 años se sienten invisibilizadas y discriminadas por su edad y género. Esta invisibilización se manifiesta en la falta de representación en los medios de comunicación, la exclusión de espacios de toma de decisiones y la falta de reconocimiento de sus logros y aportes.
El edadismo tiene un impacto profundo en la vida de las mujeres latinoamericanas. Además de las consecuencias económicas y laborales mencionadas anteriormente, este fenómeno también afecta su salud mental y emocional. La discriminación, la invisibilización y la pérdida de roles sociales pueden llevar al aislamiento, la depresión y la ansiedad.
Además, el edadismo perpetúa la desigualdad de género al limitar las oportunidades de las mujeres mayores y reforzar los estereotipos que las definen como menos valiosas que los hombres.
Es hora de actuar.
El edadismo es un problema complejo que requiere una respuesta integral y que contenga, por demás, acciones afirmativas. Es necesario visibilizar esta problemática, cuestionar los estereotipos de género y edad, y promover políticas públicas que garanticen la igualdad de oportunidades para las mujeres de todas las edades.
La lucha contra el edadismo es una lucha por la justicia social y la igualdad de género. Es hora de reconocer el valor y la contribución de las mujeres mayores, y de construir una sociedad en la que todas las personas puedan vivir con dignidad y respeto, independientemente de su edad.
*Miembro de Women In Connection

Sigue toda la información de Opinión en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon

Conforme a los criterios de

Logo Trust Project
Saber más
Sugerencias
Alt thumbnail

BOLETINES EL TIEMPO

Regístrate en nuestros boletines y recibe noticias en tu correo según tus intereses. Mantente informado con lo que realmente te importa.

Alt thumbnail

EL TIEMPO GOOGLE NEWS

Síguenos en GOOGLE NEWS. Mantente siempre actualizado con las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en Google News.

Alt thumbnail

EL TIEMPO WHATSAPP

Únete al canal de El Tiempo en WhatsApp para estar al día con las noticias más relevantes al momento.

Alt thumbnail

EL TIEMPO APP

Mantente informado con la app de EL TIEMPO. Recibe las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en tu dispositivo.

Alt thumbnail

SUSCRÍBETE AL DIGITAL

Información confiable para ti. Suscríbete a EL TIEMPO y consulta de forma ilimitada nuestros contenidos periodísticos.