En la décima edición del Bogotá Internacional Film Festival, siempre conducido por Andrés Bayona, tuvimos la oportunidad de repensar el juicio artístico e histórico a la pionera documentalista Leni Riefenstahl (Berlín 1902 – Múnich 2003). Se dice de quien falleciera a los 101 años que sus piezas maestras, de propaganda política de los años 30, obedecieron al delirio predicado por el poder nazi. Esta nueva película es un correctísimo homenaje al estilo y las indefiniciones políticas de Frau Leni (Helen), así como un film testimonial paradigmático de archivos fotográficos y de montaje con inédita armazón narrativa.
En su inauguración se vio el extravagantemente film musical de amores y crímenes, tras la verdadera identidad sexual de una ficticia criatura transmexicana llamada Emilia Pérez. El último título del director y guionista francés Jacques Audiard fue traído del Festival de Venecia al tradicional evento bogotano. Obtuvo en Cannes, en mayo pasado, el codiciado premio del jurado y su versátil intérprete, Karla Sofía Gascón, el de actriz principal –ahora favorita al Óscar con Angelina Jolie, Demi Moore y Lady Gaga–.
Riefenstahl (Andres Reiel, Alemania, 2024). Fotógrafa y artista consagrada, autora de uno de los documentales políticos más densos y controvertidos de la historia del cine El triunfo de la voluntad. Actriz, editora y cineasta, propagandista del régimen nazi alemán y absuelta en Nuremberg por ser simplemente “compañera de ruta”, no asociada con crímenes de guerra. Muy cuestionada y difamada, por mensajes manipuladores de difusión ideológica y culto a la personalidad, concibió las categorías estéticas atribuidas a la belleza griega. Al final, gran innovadora y perfeccionista en técnicas cinematográficas al servicio de expediciones humanas en Sudán, África.
En el banquillo de los indultados, toda una vida hostigada por periodistas y sometida al escarnio público, la Riefenstahl permaneció alejada de los medios especializados y debió soportar incomprensiones por haber sido responsable en Berlín de los documentales artísticos oficiales de las controvertidas (o politizadas) Olimpiadas de 1936 –Festival de las naciones y de la belleza–. Se le tachó por captar la plasticidad de pruebas atléticas y ejercicios gimnásticos, también de plasmar en bellas imágenes simétricas las monumentales coreografías deportivo-militares.
El triunfo de la voluntad (Leni Riefenstahl, Alemania, año 1935). Documental de memoria histórica y propaganda ideológica nazi, encargado por Adolf Hitler y guion coescrito con el no menos célebre arquitecto de la imagen Walter Ruttmann. Intervinieron: Hitler, Goebbels, Himmler, Göring, Rudolf Hess, Martin Bormann y otros comandantes del régimen nacional socialista –varios de ellos sentenciados en Nuremberg por crímenes contra la humanidad–.
Su prólogo: el Führer vuela de Berlín a Núremberg para "inspeccionar las columnas de sus fieles seguidores y reunirse con los máximos dirigentes del III Reich". Recibimiento apoteósico en el aeropuerto y las calles aledañas, con el saludo masivo del brazo extendido al unísono. Marchas militares y coreografías de soldados milimétricamente calculadas, profusión de banderas y esvásticas, despliegue nocturno de antorchas, discursos incendiarios y juegos pirotécnicos. Sus principios ideológicos: Fuerza del pueblo alemán, Orden, Autoridad y Lealtad; pureza de la raza aria por "mandato de Dios" y pangermanismo en la construcción masiva de un futuro glorioso para borrar las pérdidas del pasado. "Podemos ser felices de saber que el porvenir es nuestro sin reservas", pensaba Hitler.
En busca de Emilia Pérez (Jacques Audiard, Francia-Bélgica, 2024). Tragicomedia musical de amores y desamores, crímenes y redenciones impregnadas del caos o despelote típicamente mexicano que abraza el maremágnum del ‘realismo maravilloso’ latinoamericano recreado desde un estudio parisino. Montaña rusa narrativa de emociones encontradas, tres calificativos de s cuates en FilmAffinity: "Un musical narco-corrido, delicado y brutal”, “un asunto tan complejo como el transexualismo derrocha electricidad y osadía" o "entre lo sublime y lo ridículo, no se avergüenza de su condición de culebrón desaforado".
La española Karla Sofía Gascón, transexual de 50 años, en el doble papel del capo renegado 'Manitas del Monte', que logra forjar "el sueño de ser mujer". Acompañada de Zoe Saldaña –Rita, abogada de un bufete corrupto al servicio del Mal– y la no menos brillante y recursiva rubia camaleónica Selena Gómez. Una canción lo dice todo: "Medio él y medio ella, medio rico y medio pobre, medio machote y medio reina, medio aquí y medio allá, medio muerto y medio vivo, medio dentro y medio fuera".
Lawrence Anyways (Xavier Dolan, Canadá 2012). En su tercera película como autor, se efectúa una maravillosa transgresión con el versátil actor francés Melvil Poupaud, quien encarna, en casi tres horas, a un respetable profesor de letras que súbitamente abandona su apariencia viril para adoptar un nuevo look femenino ante las miradas entre incrédulas y simpatizantes de sus alumnos. Lo curioso resulta ser el travestirse con el apoyo de su esposa (Suzanne Clement) y su madre (esa gran dama sa de la actuación que es Nathalie Baye).
Seleccionada en Cannes por la sección oficial ‘Una cierta mirada’, la revista Cahiers du Cinéma le concedió cinco estrellas. Sin haber cumplido 24 años, con cuatro elogiadas cintas a su haber, Dolan se perfiló como ese autor que gusta de abordar temáticas parecidas: relaciones explosivas madre-hijo, crisis existenciales de los adolescentes y búsqueda de sus propias identidades afectivas. De igual manera, un cierto gusto kitsch en sus ambientaciones alterna con la brillante construcción de planimétria.