Lo que viene en la Corte y en Senado tras la victoria de Miguel Polo: ¿quién ganó y quién perdió tras la elección del nuevo magistrado?

En menos de 24 horas, desde la primera votación en plenaria del Senado, marcada por una polémica por un supuesto voto fraudulento, el Gobierno y las fuerzas que apoyaban la candidatura de Miguel Polo a la Corte Constitucional -entre ellas, el oficialismo liberal del expresidente César Gaviria- lograron conseguir siete votos más y derrotar a las fuerzas de oposición e independencia en una corporación en la que el Gobierno ha sufrido sus mayores derrotas desde que se acabó la otrora poderosa coalición de gobierno.

Polo finalmente se quedó con la silla en la Corte con 57 votos, siete más de los que logró en la primera jornada. Dangond pasó de 50 votos el lunes a 57, mientras que, de nuevo, el tercero en la disputa, Jaime Tobar, no logró ningún apoyo.

El triunfo de Polo representa sin duda un triunfo para el gobierno del presidente Petro, que se aplicó a fondo para desbaratar las mayorías que se anticipaban para Dangond, virtual ganadora hasta el lunes en la mañana. De hecho, desde Brasil, el jefe de Estado celebró el resultado: "Felicito a Miguel Polo Rosero. Un gran triunfo".

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Pero, como en su momento ocurrió con el triunfo de Gregorio Eljach en la puja por la Procuraduría, no puede leerse a Polo como un jurista totalmente alineado con las posiciones del Ejecutivo. Así, desde el entorno del expresidente César Gaviria también se recibió la decisión de la plenaria como un triunfo: sin los votos liberales del Senado, que en su mayoría 'le copian' a Gaviria, Polo no habría alcanzado las mayorías.

Precisamente desde la casa Gaviria salieron a reclamar el triunfo y dijeron que es de los suyos. Además, fuentes cercanas al Partido Liberal insistieron en que es cercano a Simón Gaviria, exdirector de la colectividad e hijo del exmandatario, y ha apoyado tesis a favor de la inversión privada y las libertades individuales. Ya el liberalismo había sido clave en la última gran victoria del Gobierno en Senado, cuando se aprobó la reforma pensional.

Lo que sí es un hecho es que la derrota de Dangond, quien fue candidata al Senado por el conservatismo en 2014, lo es también para las fuerzas de oposición e independencia y para el Partido Conservador, empezando por el presidente del Senado, Efraín Cepeda.

"Del magistrado Polo en la Corte Constitucional esperamos sensatez y que sea guardián de la democracia. Los colombianos rechazan cualquier posibilidad de una constituyente. En la Corte, si se conforma mayoría a favor del Gobierno, esperamos que los magistrados pongan por encima su conocimiento jurídico a su lealtad con el Gobierno Nacional", señaló Cepeda, quien reconoció la victoria de Polo, es decir, su derrota.

Con la llegada de Polo Rosero al alto tribunal hay expectativas en si la Corte mantendrá su postura frente al gobierno, o si, por el contrario, dejaría en evidencia que el Ejecutivo logró meter a una segunda ficha, debido al apoyo que le mostró al magistrado elegido.

En todo caso la postura del entrante magistrado, que reemplazará a Antonio José Lizarazo -quien en sus últimas decisiones ha estado en contra de las leyes, decretos y reformas formuladas por el Ejecutivo-, se verá al momento de estudiar y votar, por ejemplo, si la reforma pensional es o no constitucional, lo que dejará más claro las cargas de la Corte.

Aunque Polo Rosero en su discurso en el Senado, tras ser electo, se comprometió con realizar una “defensa férrea” de lo que es la Corte Constitucional, dejando de alguna manera clara su independencia y respeto por el papel que asumirá en el alto tribunal.

Lo anterior se refuerza, según el exministro Wilson Ruiz, de que ninguno de los candidatos de la terna, incluyendo a Polo Rosero, “respaldó una constituyente”.

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Sin embargo, abogados como Kenneth Burbano Villamarín, decano de la Facultad de Derecho Universidad Libre de Bogotá, considera que el 2025 “es un año clave”, en el que sí se podría ver un gran cambio para la Corte, toda vez que a la salida de Lizarazo se les sumarán las de los magistrados Cristina Pardo Schlesinger (sale en mayo); Diana Fajardo Rivera (sale en junio) y José Fernando Reyes Cuartas (sale en septiembre).

La misma visión tiene el jurista Juan Francisco Navarrete, quien sostiene que el próximo, cuando se elijan las tres plazas, “el Senado tendrá la responsabilidad de elegir por las calidades profesionales, pero teniendo en cuenta de que se mantenga el sistema de pesos y contrapesos”.

Recordemos que las votaciones que se han dado en los últimos meses en la Corte, respecto a las iniciativas del gobierno, ha marcado una postura crítica. Lo anterior se vio con la caída del decreto de emergencia económica, social y ecológica en La Guajira, en la que se tuvo 6 votos a favor y tres en contra, se vio una posición lejana a los intereses del Ejecutivo. Lo mismo ocurrió con la reforma tributaria que prohibía la deducción de las regalías, esta se cayó con siete votos a favor, uno en contra y un magistrado se declaró impedido. En cuanto a la Ley de ‘paz total’, la Corte Constitucional la salvó, pero estableció algunos condicionamientos y esta decisión tuvo ocho votos a favor y uno en contra.

Una postura más fuerte se evidenció con la Ley 2281 de 2024, por medio de la cual se creó el Ministerio de la Igualdad y Equidad. Todos los magistrados estuvieron a favor de declarar inexequible la creación de esa cartera, dirigida por la vicepresidenta Francia Márquez.

Era la virtual ganadora tras el anuncio de los partidos Conservador, Cambio Radical, Centro Democrático y buena parte de 'La U', sumado a algunos votos independientes y liberales. Las cuentas daban aproximadamente 55 votos, lo que era suficiente para ganar la puja.

Sin embargo, en una hábil jugada de la Casa de Nariño, en la que incluso se habla que el embajador en Londres Roy Barreras, otrora poderoso del Congreso, habría intervenido, se logró inclinar la balanza.

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De hecho, Barreras lanzó este martes un guiño a Polo a través de su cuenta de X tras la polémica sesión del lunes: "La Corte Constitucional es la garante de los Derechos de cada Colombiano. Incluso es el Polo a tierra de las decisiones de las otras ramas del poder".

Pero la llave, según se cuenta en el Senado, la habrían tenido algunos disidentes de Cambio Radical, que se rebelaron y votaron por Polo aunque habían dicho que irían en bloque por Dangond. Ni si quiera una reunión este martes en la presidencia del Senado de la que participaron Cepeda, Iván Name, Carlos Méisel, Sammy Mergh y Alfredo Deluque, quien no participó de la votación el lunes, pudo inclinar la balanza.

Así las cosas, por Polo votaron al Pacto Histórico, 'la U', liberales, Alianza Verde, Comunes y disidentes de Cambio Radical.

"No debe sorprendernos la victoria del candidato del Gobierno en el proceso de elección surtido por el Senado de la República. Es común que los candidatos con el guiño del Gobierno sean elegidos, pues los congresistas buscan congraciarse con el Gobierno de turno, sin pensar realmente en las consecuencias institucionales de elegir unos u otros. El Gobierno, en una elección apretada que inició 50\50 logró mayorías, para garantizar la elección del candidato de su preferencia. Lo extraño es el poco margen con el que ganó y la gran oposición que tiene el Gobierno en la cámara alta. Si uno revisa la elección de magistrados desde 2010 a la fecha, es la primera vez donde a pesar de la fuerza del gobierno de turno, le es tan difícil hacer elegir a un candidato de su preferencia", aseveró el analista Gonzalo Araújo.

Ahora la gran duda es qué tanta injerencia tendrá este resultado en el trámite de las reformas sociales y si podrían inclinarse las fuerzas hacia el Gobierno, a propósito de la imponente figura del ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, pero voces liberales señalan que si bien se coincidió en este propósito, no significa que sea la resurrección de la coalición. 

MATEO GARCÍA AGUDELO Y JESÚS BLANQUICET

POLÍTICA Y JUSTICIA