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Cerezas rojas: ¿cuál es el beneficio de su consumo para la salud de los niños?
Estas frutas tienen propiedades antioxidantes, además de calcio, hierro, entre otras vitaminas.
Las cerezas son una gran fuente de vitamina C, calcio, hierro, magnesio y potasio. Foto: iStock
Dulces o un poco más ácidas, en postres o solas, las cerezas rojas son una fruta deliciosa, que además está repleta de vitaminas, minerales y antioxidantes.
Son una fruta de hueso, lo que significa que tienen semillas en el centro y lo que se come es su parte exterior carnosa, que puede ser carmesí o un poco más amarilla.
Una taza (154 gramos) de cerezas dulces, aporta dos gramos de proteínas, tres de fibra y el 18 % del valor diario requerido de vitamina C, según el portal especializado 'Healthline'.
Estos nutrientes y su cantidad de fibra son su mayor aporte a la dieta de niños y adultos. De ellas también se puede obtener vitamina A y K.
La cereza es una fruta de verano, por lo que solo se consume en cierta temporada en algunos países. Foto:iStock
De acuerdo con la Clínica Clevealand, las cerezas pueden considerarse como un superalimento, pues poseen una amplia lista de bondades.
Por ejemplo, el consumo de cerezas rojas puede ayudar a combatir la inflamación y las enfermedades, por su alto contenido en polifenoles como los flavonoides.
"Estos fitonutrientes, o sustancias químicas de las plantas, tienen propiedades antioxidantes que protegen contra la inflamación y combaten los radicales libres, que pueden dañar las células y contribuir a enfermedades crónicas como el cáncer, la diabetes y las cardiopatías", explica la dietista Carly Sedlacek a la clínica mencionada.
A esto se le suma que pueden impactar en la calidad del sueño, pueden aliviar el dolor muscular y de la artritis.
"Los alimentos ricos en potasio y bajos en sodio, consumidos con moderación, pueden ayudar a bajar la tensión arterial y reducir el riesgo de enfermedades cardiacas", señala Sedlacek. Además, consumir esteroles vegetales es una forma eficaz y natural de reducir el colesterol, otra medida cardiosaludable.
Pero sin duda, uno de los beneficios más apetecidos es que su consumo frecuente puede ayudar a evitar el cáncer, debido a las elevadas cantidades de antocianinas y melatonina que ofrecen protección contra los daños celulares causantes del cáncer.
Las cerezas también tienen compuestos bioactivos, sustancias químicas que pueden ayudar a prevenir el cáncer, según las investigaciones.
De acuerdo con el portal de salud Web MD, las cerezas rojas son precursoras naturales de la aspirina, pues contienen ácido salicílico, lo que contribuye al efecto antiinflamatorio.
Adicional a lo mencionado, las antocianinas que dan a las cerezas su color rojo se han relacionado con una mejor salud del cerebro, el pensamiento y la memoria.
Un estudio citado en la web mencionada descubrió que beber zumo de cerezas todos los días durante 12 semanas mejoraba la fluidez verbal y la memoria en personas mayores con demencia leve o moderada.
El consumo de la fruta en la infancia
En el caso de los niños, todos estos beneficios pueden ser de gran utilidad, especialmente durante la etapa de crecimiento.
Sin embargo, si los infantes son muy pequeños, es importante eliminar el hueso y cortarlas en trozos para que no ocurra ningún accidente. También se pueden convertir en zumos, sorbetes o batidos para tomarlas de forma más rápida y su color puede ser muy atractivo, de acuerdo con un blog del portal 'Todo Papás'.
Este tipo de frutas pueden causar reacciones alérgicas, por lo que se recomienda introducirlas a la dieta después de los seis meses.
Siempre recurra a consulta con un pediatra o médico especialista si desea incorporar algún alimento a la dieta de sus hijos o si se presenta alguna reacción adversa a ellos.