En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información
aquí
Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión
¡Hola! Parece que has alcanzado tu límite diario de 3 búsquedas en nuestro chat bot como registrado.
¿Quieres seguir disfrutando de este y otros beneficios exclusivos?
Adquiere el plan de suscripción que se adapte a tus preferencias y accede a ¡contenido ilimitado! No te
pierdas la oportunidad de disfrutar todas las funcionalidades que ofrecemos. 🌟
¡Hola! Haz excedido el máximo de peticiones mensuales.
Para más información continua navegando en eltiempo.com
Error 505
Estamos resolviendo el problema, inténtalo nuevamente más tarde.
Procesando tu pregunta... ¡Un momento, por favor!
¿Sabías que registrándote en nuestro portal podrás acceder al chatbot de El Tiempo y obtener información
precisa en tus búsquedas?
Con el envío de tus consultas, aceptas los Términos y Condiciones del Chat disponibles en la parte superior. Recuerda que las respuestas generadas pueden presentar inexactitudes o bloqueos, de acuerdo con las políticas de filtros de contenido o el estado del modelo. Este Chat tiene finalidades únicamente informativas.
De acuerdo con las políticas de la IA que usa EL TIEMPO, no es posible responder a las preguntas relacionadas con los siguientes temas: odio, sexual, violencia y autolesiones
Opinión
Exclusivo suscriptores
Cómo apagar la pasión: los comportamientos que, según estudios, pueden reducir la atracción / Sexo con Esther
Factores concretos pueden cortar la inspiración y hacer que el departamento inferior cierre por mantenimiento.
Al final, lo importante no es solo evitar lo malo, sino aprender a reír cuando algo no sale como se esperaba. Foto: iStock
El arte de la seducción tiene su ciencia, pero la de apagar la pasión parece aún más efectiva. Un estudio de la Universidad de Albany sugiere que ciertos comportamientos pueden reducir la atracción y afectar la satisfacción en pareja. Es decir, no es solo percepción: hay factores concretos que pueden cortar la inspiración y hacer que el departamento inferior cierre por mantenimiento.
Y aunque cada quien tiene sus gustos, hay errores universales que han sido señalados con insistencia tanto por hombres como por mujeres. Todo empieza por lo más básico: la higiene personal. El deseo entra por los ojos, sí, pero también por la nariz. Investigaciones sobre el impacto del aroma en la atracción han demostrado que el olor corporal es un factor clave en la química entre dos personas. Dicho de otro modo: el mal aliento, la falta de aseo en el departamento inferior y el aroma a “día largo de trabajo pesado” pueden acabar con cualquier intención amorosa. Si una cena condimentada en exceso es inevitable, que también lo sea el cepillado de dientes. Y si la jornada fue intensa, nada mejor que un paso por la ducha antes de la acción. No es obsesión, es sentido común.
Pero así como hay aromas que cortan la inspiración, también lo hace el mal manejo del tiempo. Ni tan corto que no se disfrute, ni tan largo que canse. Estudios sobre satisfacción sexual han concluido que el tiempo ideal para el aquello ronda entre los 7 y 13 minutos, sin contar los prolegómenos. Por debajo de eso, deja un sabor a poco. Por encima, puede volverse un maratón agotador. Nada peor que alguien que cree que la calidad se mide en duración, cuando en realidad se trata de intensidad. O, peor aún, quien decide que todo se resuelve en 90 segundos y buenas noches.
0tro factor que garantiza una desactivación inmediata del deseo es el error de nombrar a la persona equivocada en el momento más inoportuno. No importa si se trata de un lapsus inocente o una confusión sin malas intenciones, el daño es irreparable. En el mejor de los casos, se pasa a una charla incómoda; en el peor, la sesión se da por terminada con efectos secundarios de largo plazo.
Imagen de referencia. Foto:IStock
El vocabulario inadecuado también tiene su poder destructor. Hay quienes creen que un par de frases sacadas de películas para adultos pueden elevar la temperatura y terminan logrando el efecto contrario. Y en el otro extremo están quienes se vuelven entrevistadores en plena acción: “¿Te gusta? ¿Así? ¿Y ahora? ¿Más rápido? ¿Más lento?”. Nada mata el instinto como un cuestionario de satisfacción en tiempo real.
Por si fuera poco, hay quienes parecen olvidar que hay un momento para todo. Y en el aquello, el multitasking es un crimen. Nada desconecta tanto como estar en el mejor punto y que de pronto alguien suelte un “¿Cerraste la puerta?” o “Mañana hay que pagar la luz”. Si hay algo que apaga el fuego más rápido que un balde de agua fría es sentir que la otra persona está resolviendo pendientes en su cabeza mientras el otro da lo mejor de sí.
Y no se trata de echar las ganas por la ventana con un listado de fallas, porque también hay formas de salvarlas. Menos distracciones, más atención al detalle y, sobre todo, saber que el aquello no es un trámite ni una rutina, sino un arte que se cultiva. Al final, lo importante no es solo evitar lo malo, sino aprender a reír cuando algo no sale como se esperaba. Porque si hay algo que puede salvar un momento incómodo, es la complicidad de seguir adelante sin tomarse la faena demasiado en serio. Hasta luego.