Los biopolímeros son una serie de sustancias inyectables que algunas veces no resultan aptas para el cuerpo humano y afectan diferentes tejidos, órganos y sistemas, produciendo lesiones irreversibles y, ocasionalmente, irreparables.
Muchas personas se aplican estas sustancias de origen sintético u orgánico que van desde parafina, silicona líquida, cemento óseo o aceite industrial, por medio de agujas debajo de la piel, con el fin de cambiar su apariencia corporal por los efectos del envejecimiento, cambios generados por la genética o alteraciones producidas por algunas enfermedades.
La gran mayoría de pacientes que se aplican sustancias de relleno no tienen ninguna sintomatología, sin embargo, un grupo pequeño de pacientes inician con síntomas como dolor, enrojecimiento o molestias en la zona de aplicación del relleno.
Algunos se acompañan de exudado, secreción o pus en la zona afectada y cuando la inflamación es severa se produce deformidad con gran rubor e hinchazón.
Muchos pacientes llegan a desarrollar una condición denominada alogenosis Iatrogénica, que se refiere al daño y degeneración de tejidos como reacción al producto inyectado.
Algunos otros llegan a padecer un síndrome autoinmune conocido como Síndrome de A.S.I.A., un conjunto de síntomas similares a enfermedades autoinmunes que empeora el pronóstico de los pacientes.
Este síndrome suele manifestarse mediante la pérdida de memoria, ojos secos, boca seca, dolores articulares, dolores musculares, alteraciones en el sueño, agotamiento físico al despertar o durante el día y depresión o irritabilidad.
Cabe resaltar que cuando los síntomas se acompañan de gran inflamación, dolor y deformidad se requiere la valoración de especialistas con el fin de controlar la inflamación local o sistémica generada por este cuerpo extraño. Un profesional de la salud podría recetarle diferentes medicamentos antiinflamatorios y una revisión exhaustiva si hay infección antimicrobiana.
También cabe la posibilidad de realizar un tratamiento quirúrgico, que se emplea para realizar lavados en la zona afectada y tomar muestras de las secreciones y tejidos cuando se sospecha infección. En algunos casos es posible realizar la extracción parcial de las sustancias inyectadas, por medio de cirugía realizando incisiones quirúrgicas en la zona afectada.
Lo más importante para prevenir este tipo de complicaciones al inyectarse biopolímeros es verificar que el producto que se va a inyectar sea aplicado por un experto: un médico o un especialista. También hay que verificar que el producto sea biocompatible, es decir, que no genere reacciones por tratarse de un cuerpo extraño.
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