La neumonía causa el 15% de las defunciones de niños en todo el mundo

En Colombia continúa la temporada de lluvia, y es normal que durante la época invernal se presente un incremento de casos de infección respiratoria aguda (IRA), sobre todo en los niños y personas mayores.

Es de considerar que las olas de frío vienen acompañadas de picos de enfermedades respiratorias, por lo que las autoridades sanitarias han empezado a planear estrategias para mitigar el impacto de los contagios por estas enfermedades.

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Una de las condiciones más comunes en esta temporada es la neumonía, un tipo de infección respiratoria aguda que afecta los pulmones y es la principal causa de mortalidad infantil a nivel global. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que esta enfermedad supone el 15 por ciento de todas las defunciones de niños menores de 5 años en todo el mundo.

La neumonía puede ser causada por virus, bacterias u hongos; no obstante, esta infección se puede prevenir mediante inmunización, una alimentación adecuada y el control de factores ambientales.

Pese a que cualquier persona puede desarrollar esta enfermedad, la infección se presenta con mayor incidencia en niños menores de 5 años, en especial antes del primer año, y en los adultos mayores de 60, indica la doctora María Isabel Uscher, médica pediatra de la Universidad Javeriana, quien a su vez hace un llamado a las personas que tienen enfermedades crónicas, como la diabetes y pulmonares crónicas, como el asma, la epoc, fumadores y pacientes con un sistema de defensas que no está maduro, como los bebés prematuros.

Aunque parece una enfermedad común y que puede tratarse con efectividad, los datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) mostraron que, durante el 2020, en este país, más de 47.000 personas murieron de neumonía.

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Por lo anterior es primordial establecer medidas de autocuidado y estrategias que permitan un diagnóstico oportuno y manejo apropiado de la enfermedad. Asimismo, es fundamental actuar responsablemente con el uso adecuado de antibióticos, pues, según la Revista de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional, “la neumonía sigue siendo una de las principales causas de consulta y de hospitalización a la que, además del alto impacto en términos de morbilidad y mortalidad, se suma la actual problemática de resistencia a los antimicrobianos”.

Advierte la doctora Uscher que “es importante conocer las señales de alarma, para diferenciar infecciones que pasan solas y requieren cuidados generales y observación de casos donde se debe consultar”.

De acuerdo con la experta, las principales manifestaciones de esta condición incluyen: fiebre persistente, de difícil manejo, prolongada (más de 5 días), fiebre que reaparece o se asocia a otros síntomas como tos progresiva, coloración morada en labios y compromiso del estado de conciencia como somnolencia o irritabilidad.

De igual forma, se puede presentar dificultad para respirar, aumento de la frecuencia respiratoria, patrones anormales de respiración como el uso de músculos externos, que muestra un desbalance en los movimientos del tórax y el abdomen; uso de músculos del cuello y aleteo de la nariz.

En pleno contexto de la ola invernal, la especialista advierte que no se deben desestimar las infecciones causadas por neumococo, ya que, además de la neumonía, que puede llevar a falla respiratoria, esta afección también puede desencadenar problemas de salud como otitis, sinusitis, artritis infecciosa y otras mucho más severas.

Algunas de estas condiciones graves pueden ser la sepsis, es decir, la infección diseminada con bacterias en la sangre; y no menos importante, la meningitis, infección de la membrana que cubre el cerebro, además de enfermedades que pueden generar secuelas como sordera, convulsiones, alteraciones en el desarrollo, entre otras, agrega la especialista en pediatría.

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Ante el incremento de las lluvias, que parecen extenderse hasta finales de este mes, la Secretaría Distrital de Salud (SDS) recomendó a la ciudadanía, y en especial a los padres, madres, cuidadores de menores de cinco años y a los adultos mayores de 60, poner en práctica medidas de prevención para evitar complicaciones, como el uso constante del tapabocas para evitar el contagio con las personas del círculo social, laboral y familiar, el lavado de manos con agua y jabón varias veces al día, alimentar a los bebés menores de 6 meses exclusivamente con leche materna y mantener los esquemas de vacunación al día para niños y adultos mayores, entre otras.

La mejor estrategia para la prevención de este tipo de infecciones está en la vacunación. “Es muy importante que todos tengamos nuestros esquemas de vacunación al día”, concluye la doctora María Isabel Uscher.

UNIDAD DE SALUD