El dolor de oído es un dolor agudo, sordo o urente (que quema) en uno o ambos oídos. Este puede ser temporal o constante, y tener causas como la otitis, infecciones y lesiones por cambio de presión. Le contamos cómo tratarlo naturalmente.
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, Medline Plus, en los adultos es menor probable que la causa de un dolor de oído se remita a una infección en este órgano.
"El dolor que se siente en el oído puede provenir de otro lugar, como de la articulación en la mandíbula (articulación temporomandibular), los dientes o la garganta. Esto se llama dolor "referido"", reza el portal especializado.
En el caso particular de un niño o bebé sí puede deberse a una infección, irritación del conducto auditivo por el uso de aplicadores de algodón o jabón y champú que quedan en el oído.
Es recomendable que e a su médico si hay presencia de fiebre; nuevos síntomas como mareo, dolor de cabeza, inflamación alrededor del oído o debilidad en músculos faciales; y dolor intenso que cesa repentinamente.
Sin embargo, hay también una serie de cuidados que se pueden aplicar en el hogar para ayudar con el dolor de oído.
Estas son algunas medidas referidas por la Biblioteca Nacional de Medicina y el Instituto Nacional de Medicina de Estados Unidos:
-Colocar una compresa fría o paños húmedos fríos en el oído externo durante 20 minutos para reducir el dolor.
-Masticar puede ayudar a aliviar el dolor y la presión de una infección del oído. (La goma de mascar puede ser un peligro de ahogamiento para niños pequeños).
-Descansar en una posición erguida en lugar de acostarse puede reducir la presión en el oído medio.
-Las gotas óticas de venta libre se pueden emplear para aliviar el dolor siempre y cuando el tímpano no presente ruptura.
-Los analgésicos de venta libre, como el paracetamol o el ibuprofeno, pueden proporcionar un alivio en el dolor de oído para los adultos y los niños. (NO le dé ácido acetilsalicílico [aspirin] a los niños).
Cuando el dolor de oído es producto de un cambio de altitud, como cuando se vuela en un avión, es posible que ayude tragar o masticar chicle, así como dejar que los bebés chupen biberón o se amamanten.
Asimismo, es fundamental prevenir las infecciones en el oído no poniendo objetos dentro de él, no fumando cerca de niños y niñas, y secando las orejas bien después de bañarse o nadar.
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO
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