De acuerdo con la revista Science, a pesar de que, por definición, se supone que los microbios son tan pequeños que solo se pueden ver con un microscopio, una bacteria recién descrita que vive en los manglares del Caribe se escapa a esta regla: su única célula filiforme es visible a simple vista, crece hasta 2 centímetros y 5.000 veces más grande que muchos otros microbios.
Esta bacteria gigante tiene además un enorme genoma que no flota libremente dentro de la célula como en otras bacterias, sino que está encerrado en una membrana, una característica propia de células mucho más complejas, como las del cuerpo humano.
De acuerdo con los expertos, el microbio, no tan micro, recién descubierto desdibuja la línea entre procariotas, grupo que incluye bacterias y microbios unicelulares llamados arqueas, y eucariotas, que incluye todo, desde levaduras hasta la mayoría de las formas de vida multicelular, incluidos los humanos.
La bacteria fue vista por primera vez hace unos 10 años por Olivier Gros, biólogo marino de la Universidad de las Antillas sas, Pointe-à-Pitre. El extraño organismo crecía como delgados filamentos en la superficie de las hojas de mangle en descomposición en un pantano local. Cinco años después que él y sus colegas se dieron cuenta de que los organismos eran en realidad bacterias, pero no apreciaron cuán especiales eran hasta que el estudiante graduado de Gros, Jean-Marie Volland, empezó a trabajar para caracterizarlos.
El grupo usó una variedad de microscopía y métodos de tinción para verificar que los filamentos de los manglares fueran cada uno de una sola célula. Además, se percataron de que la célula incluye dos sacos de membrana, uno de los cuales contiene todo el ADN. Volland llama a ese saco un orgánulo y para algunos expertos consultados por Science implica que las dos ramas de la vida no son tan diferentes como se pensaba anteriormente. El otro saco, presumiblemente lleno de agua, ocupa el 73 % de su volumen total.
Otra característica sorprendete de la particular bacteria es su información genética. Cuando los investigadores del Instituto Conjunto del Genoma del Departamento de Energía secuenciaron el ADN del interior, descubrieron que el genoma era enorme, con 11 millones de bases que albergaban unos 11.000 genes claramente distinguibles. Típicamente, los genomas bacterianos promedian alrededor de 4 millones de bases y alrededor de 3.900 genes.
CIENCIA