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¿El oxígeno se podría acabar en la Tierra? Esto dicen algunos científicos
Investigadores encuentran que van disminuyendo los niveles de oxígeno, a lo largo de miles de años.
La Tierra posee varias capas, incluyendo la atmósfera, cuya composición es oxígeno, nitrógeno, argón y dióxido de carbono, principalmente. Foto: Nasa / EFE
Diversos grupos investigativos han buscado darle una respuesta a cuánto tiempo le queda a la Tierra. Si el sol se expande, podría desaparecer la vida sobre el planeta; la detonación de armas nucleares también podría acabar el mundo.
Ahora, también podemos añadir a las posibilidades de extinción de la humanidad las pandemias -cada vez más difíciles de erradicar- e incluso que se acabe el oxígeno.
La atmósfera está compuesta por varios gases, más o menos en esta distribución: 78 % de nitrógeno, 21 % de oxígeno, 0,9 % de argón y 0,03 % dióxido de carbono. Este delicado balance entre gases es el que permite que en el planeta se puedan dar formas de vida aeróbicas -es decir, que requieren del oxígeno- , pero con el calentamiento global, los niveles de este gas necesario para la vida podrían verse afectados.
De acuerdo a la sección noticiosa del canal ‘Discovery’, ‘Discovery News’, algunos científicos se han acercado a obtener respuestas sobre cómo se podría dar ese fenómeno y en cuánto tiempo podría ocurrir.
El equipo conjunto de Kazumi Ozaki, de la Universidad de Toho, en Japón; y Christopher Reinhard, del Instituto de Georgia, en Estados Unidos; realizó una serie de pruebas que pueden ilustrar este fenómeno.
Replicaron las condiciones medioambientales, geológicas y atmosféricas en un ambiente controlado para observar los efectos de una disminución en los niveles de oxígeno en la vida sobre la Tierra.
La preocupación al respecto no es urgente, de cualquier modo, pues según los datos extrapolados del estudio publicado en la revista científica ‘Nature Geoscience’ se predijo que esto tardaría dos mil millones de años en ocurrir. La misma línea de tiempo se tiene respecto a la futura implosión del Sol.
Dos causas posibles
Los gases de efecto invernadero han afectado de manera permanente la capa de ozono, la cual protege a la Tierra de las embestidas directas de las tormentas solares, pero debido a los gases de efecto invernadero, tiene agujeros que permiten que pase más de la radiación producida por la estrella alrededor de la cual giran todos los planetas del Sistema Solar.
En tiempos prehistóricos, la Tierra tenía entre un 30 % y un 35 % de oxígeno en la atmósfera
La relación con el Sol es delicada, pues la luz que emite es necesaria también para el desarrollo de la vida. Mejor dicho, lo ideal es tener esta estrella cerca, pero no demasiado.
Sin embargo, con mayores niveles de radiación en la Tierra se produce más dióxido de carbono de lo que las plantas pueden convertir en oxígeno.
Además, como la Tierra se está viendo afectada por aumentos en la temperatura, algunos gases se escapan antes de entrar a la atmósfera.
En el modelo, creado por el equipo Ozaki-Reinhard, no se tuvieron en cuenta condiciones como una inminente guerra nuclear o aumentos en la producción de dióxido de carbono por parte de las industrias del ser humano.
La sonda Parker podría alcanzar temperaturas hasta 2000 grados centígrados en su próxima aproximación al sol. Foto:iStock
Por otro lado, según ‘Discovery News’, Ian Plimer, profesor de la Universidad de Adelaide en Australia, en conjunto con Jon Harrison de la Universidad de Arizona, Estados Unidos, encontraron que en tiempos prehistóricos la Tierra tenía entre un 30 % y un 35 % de oxígeno en la atmósfera. Creen que era precisamente por eso que los animales crecían a mayores tallas que hoy en día.
Así que no solo se trata de un fenómeno creado por la humanidad - aunque sí la podría empeorar-, pues el ciclo de vida del Sol también es responsable de que haya menos oxígeno disponible en el planeta.
En la revista ‘New Scientist’ el equipo de Ozaki y Reinhard mostró que también a medida que el Sol envejece, se vuelve más caliente. Eso hace que en la Tierra disminuya drásticamente la cantidad de dióxido de carbono, el cual es requerido por las plantas para vivir.
Es decir, todo se trata de un delicado balance. Sin embargo, al menos por el tiempo presente, hay amenazas más urgentes para la vida en el planeta. Para que el oxígeno se acabe en la Tierra, de acuerdo con lo dado a conocer por los investigadores, faltan al menos dos mil millones de años.