Con el desfile de El Madrugón en la Bogotá Fahshion Week, ‘la vara quedó alta’

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Con estas palabras de Pilar Castaño, periodista de moda y escritora colombiana, se dio inicio al desfile 'Puente' protagonizada, en el Centro de Convenciones Ágora de Bogotá, por nueve diseñadores de El Madrugón, una zona reconocida por su comercio textil en el sector de San Victorino, en el centro de Bogotá.

En una larga pasarela, iluminada por reflectores y luces blancas, se dispuso uno de los actos clave de la séptima edición de la Bogotá Fashion Week organizada por la Cámara de Comercio de Bogotá. Al final del camino dispuesto, un tumulto de fotógrafos esperaba impaciente la salida de los y las modelos para empezar a obturar y capturar la identidad de la moda popular.

De acuerdo con Maria Paz Gaviria, gerente de Programas Culturales de la Cámara de Comercio de Bogotá, la participación de los y las 750 modelos que desfilaron en las 20 pasarelas de 36 marcas participantes durante los días del evento, se contrataron "a través de un casting donde fueron invitadas 58 agencias en el país, de estas, 40 aceptaron participar".

El público esperaba con ansias en las gradas ubicadas a ambos lados de la larga pasarela, mientras, en una tarima dispuesta al fondo, Pilar Castaño seguía con su intervención: "No les voy a decir que San Victorino (está presente) en pleno, porque son 600 marcas más y solo tenemos nueve hoy para ustedes. Pero estoy segura de que, con nueve marcas, ustedes se van a llevar ese olor a canelazo, a tinto, a madrugón. (...) Van a sentir esa plenura, esa ebuliición, ese dinamismo".



Tras agregar unas palabras más, entraron en escena varios jóvenes llevando en la espalda rollos de denim y los típicos costales a rayas naranjas, rojas y moradas que utilizan los cargueros para empacar mercancía. Luego, se les dio paso a las primeras modelos.

NK (@grupo_nk) ofreció los primeros diseños al público. Cuatro modelos salieron al son de una música dinámica y vibrante, mostrando prendas amplias, ruanas y estampados de colores que recuerdan a los diseños exóticos y entrañables de tejidos tradicionales en lana.

Con el inicio de esta marca, salieron rápidamente las otras ocho. Al ritmo de canciones de música popular o en inglés, fueron apareciendo Divina Collection (@divinacollection), con conjuntos largos y cortos ceñidos al cuerpo; Kott Risk (@kottrisk), con trajes estilizados de manera oversized, mezclas entre azul y negro y costuras visibles en cada prenda... Y así una a una, todas las marcas les ofrecieron a los fascinados expectantes una propuesta que fusionó en pasarela la moda popular y la alta costura.

Los y las modelos de las nueve marcas participantes desfilaron, posaron, gesticularon y lucieron las prendas, teniendo de fondo un elemento que, de seguro, los asistentes no olvidarán: una presentación en imágenes, sonido y música del tradicional San Victorino en Bogotá.

En una especie de cubo led ubicado en la parte posterior del recinto -mientras sonaban arengas como "lleve, lleve el canelazo", "descuentos en ropa, lleve todo barato" y el indiscutible ruido de una multitud consagrada en el centro de una ciudad- se iban mostrando personas cargando costales de ropa, imágenes de vendedores ofreciendo canelazos y comidas rápidas y una zona llena de gente buscando llevarse la mejor prenda a su casa.

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Al final del espectáculo, cada uno de los y las modelos se posó por unos minutos en la pasarela y luego se retiraron del espacio. Esta fue la primera edición de la Bogotá Fashion Week que contó con la participación de diseñadores y economías populares.

"Cada feria de nosotros, hoy, en Corferias, tiene un contenido de economía popular (...) Porque no solamente las cifras me indican que hay que trabajar mucho más con ellos, sino porque la inercia de la economía mundial también nos lleva a esa conclusión", afirma al respecto José Ovidio Claros Polanco, actual presidente de la Cámara de Comercio de Bogotá.

Menciona, además, que en su gestión se busca mantener "la estructura que tiene la Cámara de Comercio con los medianos y con los grandes", pero haciendo un énfasis en la participación de nuevos sectores, pues "la gente de San Victorino vive conectada al mundo de la moda más que cualquiera".

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Frente a esta afirmación están de acuerdo varios diseñadores como Karen reyes, quien, con su apuesta en calzado femenino forrado en denim, les ofreció un gran espectáculo a los asistentes de la pasarela: "Hay demasiado talento y ganas de sacar nuestras marcas adelante. Tenemos muchas ganas de soñar de hacer cosas chéveres, pero, de pronto, no nos salimos del nicho de nosotros y hay muchas cosas por explorar", asegura.

Tras el inédito momento ofrecido, los asistentes y más de 80 compradores internacionales accedieron al segundo, de los cinco pisos del centro de convenciones, para comercializar y generar os con los expositores.

"Lo que estamos haciendo en esta séptima edición es imparable", menciona Claros, y finaliza diciendo: "Estamos listos para poder replicar esto en otras Cámaras de Comercio para que también hagan estos modelos. La vara quedó alta".

Sin duda, el desfile 'Puente' de El Madrugón es un precedente para la ciudad, el país y el referente internacional de Colombia en temas de moda y cultura. Y hoy, con la finalización del evento en la noche, se culmina una etapa de reconocimiento a los sectores trabajadores que representan al país con su inventiva y su producción textil.

"La gente nos tienen estigmatizados de que El Madrugón es barato, es malo, pero no. Acá les dimos una muestra de que nosotros diseñamos, de que tenemos buenos materiales, de que de verdad hacemos las cosas con amor para todo el mundo", finaliza Andrea Castro, cofundadora de Kott Risk, una de las marcas que participó en la pasarela.